El Cultural

Imaginar con corrección

Imaginar_Historiar. Comisarios: Mónica Portillo y Sergio Rubira.

29 mayo, 2009 02:00

Hans-Peter Feldmann: Old painting, 2005

Centro de Arte Dos de Mayo (CA2M). Avda. Constitución 23-25. MóSTOLES (MADRID). Hasta el 6 de septiembre.


Las Jornadas de Estudio de la Imagen han abierto su XVI edición en el Centro de Arte Dos de Mayo, en Móstoles, con un formato igual al de ediciones anteriores -seminario, convocatoria abierta a investigadores y artistas, una exposición y un catálogo que recogerá los resultados de la convocatoria- y con uno de sus nombres habituales al frente del proyecto, Sergio Rubira. En la dirección le acompaña este año Mónica Portillo.

Bajo el título imaginar_historiar, la exposición comparte con las restantes actividades un objetivo: "analizar la capacidad de las imágenes históricas y documentales para (re)producir el pasado y la memoria, aprehender el presente e imaginar escenarios posibles de futuro". Ambos comisarios se han apoyado en el historiador Aby Warburg
y su monumental Atlas Mnemosyine: "una colección de documentos relativos a la psicología de la expresión humana", según sus palabras.

Aunque realizó lo fundamental de su obra en los años veinte y treinta del siglo pasado, Warburg no fue reconocido internacionalmente hasta los años setenta. En España no ha sido traducido hasta hace cuatro años, cuando apareció en Alianza Editorial su imprescindible El renacimiento del paganismo. Imposible resumir ni mínimamente el ideario de Warburg, pero quizás baste con algunos rasgos, que, sin duda, han tenido en cuenta Portillo y Rubira, y que sustentan la fama actual del autor: su interés por el resurgimiento en el presente de ideas remotas en el tiempo; la consideración de los productos artísticos como documentos, prescindiendo de las categorías estéticas, y la apreciación especial de las obras olvidadas; la consideración de las migraciones culturales y la atención a los rechazos y tergiversaciones que configuran la memoria.

Así, imaginar_historiar empieza precisamente con una de las imágenes de Mnemosyne a la que se suman lienzos de Raimundo y José de Madrazo (Luis comparece en otra sala), la intervención de Hans Peter Feldman sobre una copia decimonónica de la Venus de Urbino de Tiziano, de la que oculta la identidad tapándole los ojos, y una parodia de Juan Dávila de un desnudo fundamental en la historia del arte chileno.

En espacios sucesivos se entrecruzan obras de diferentes artistas realizadas en su mayoría en los últimos años, que abordan el recuerdo y su reconstrucción personal, en el que no podía faltar una visión antropológica del colonialismo -en los álbumes del surafricano Santu Mokofeng-; la historia que narran los lugares, como la conmovedora visión de Berlín de Amire Siegel -que reproduce fragmentos de películas en sus enclaves originales de rodaje-, o el proyecto documental sobre la ciudad vacía de Pedro G. Romero; la verosimilitud o las distorsiones sobre la guerra, con especial hincapié en la contienda española en piezas de Rogelio López Cuenca, Fernando Sánchez Castillo y Francesc Torres, y la Revolución Rusa -Tacita Dean- o la independencia hispanoamericana. La muestra se cierra con un pase en vídeo de la filmografía de Basilio Martín Patino.

imaginar_historiar es una exposición que exige, por así decirlo, conocer la historia privada de cada una de las obras expuestas, un relato del relato que por sí misma constituyen. Es una exposición plagada de seres humanos, de historias de personas, generalmente anónimas, en circunstancias terribles o marcadas indeleblemente por lo que la Historia quiso contar de ellas. Hay, no cabe duda, una sensible carga emocional en cada una de las piezas, y, sin embargo, no puedo sino pensar que es una exposición políticamente correcta, incluso en exceso, que lo que cuenta despierta la imaginación, pero hacia cuentos ya sabidos; que no sería del todo justo decir que es académica, pero sí que sus hipótesis sobre la Historia y la Memoria obtuvieron confirmación hace ya tiempo.