Los reyes de España, Felipe VI (55 años) y Letizia (51), han enviado un mensaje de apoyo y felicitación a Federico X (55) por su legendaria proclamación como nuevo Rey de Dinamarca este domingo, 14 de enero.

"Nuestra felicitación en el inicio de vuestro Reinado, con el mayor afecto personal y los mejores deseos para el pueblo de Dinamarca", han informado a través de su cuenta oficial de Twitter.

En el post, la Casa Real española ha compartido una imagen de los Reyes de España junto a Margarita II (83), Federico X y Mary (51), tomada durante la última visita de los monarcas españoles al país en noviembre del año pasado, cuando estalló el escándalo de las imágenes de Genoveva Casanova (47).

[De la emoción de Federico X al movimiento 'in extremis' de Christian con su abuela, Margarita II: las anécdotas]

El comunicado llega minutos después de que se oficializara el cambio de trono danés, cuando Margarita II ha firmado su abdicación en el palacio de Christiansborg, enfrente de su nieto, Christian (18), su primogénito, el Gobierno, el secretario del gabinete en el Consejo de Estado y la primera ministra del país, Mette Frederiksen.

Después, Federico ha salido al balcón entre lágrimas para saludar al pueblo danés y ha pronunciado sus primeras palabras como Rey. "Mi madre ha sido una soberana fuera de lo común", decía mientras leía el papel que tenía preparado con el mensaje que iba a anunciar. Además, ha asegurado que quiere convertirse en un "rey unificador del mañana" y ha dictado el nuevo lema: "Conectados y comprometidos con el Reino de Dinamarca".

Visita a Dinamarca

Felipe VI y Letizia se desplazaron a Dinamarca el 6 de noviembre -cumpliéndose el 20 aniversario de su famosa pedida de mano- con motivo de la Visita de Estado tras la invitación de la reina Margarita. Este fue el primer viaje oficial al país en 40 años.

Los Reyes de España, Margarita, Federico y Mary en la visita a Dinamarca. Gtres

[Soufflé, timbal de col y mucho toque español: así fue la lujosa cena de gala de Felipe y Letizia en Dinamarca]

Los Reyes aterrizaron en Copenhague y fueron recibidos con los máximos honores por parte de la ya exsoberana, la nueva Reina consorte y el resto de la Casa Real danesa. Después de un paseo a caballo, llegaron al Palacio de Amalienborg, donde se reunieron con Federico y donde Felipe protagonizó un tierno reencuentro con su ahijado, el príncipe Vincent, quienes posaron cómplices y alegres en una conmovedora fotografía.

Después se trasladaron al Palacio de Christiansborg, donde tuvo lugar la cena de gala ofrecida por Margarita II a la que acudieron más de 200 invitados entre los que se encontraban líderes políticos, económicos y del mundo cultural y deportivo. Así, se produjo el evento más esperado del día en el que las Casas Reales lucieron sus mejores galas. Dos días después, los Reyes pusieron rumbo a España.