Con la llegada de la época estival, es muy común salir a comer fuera, o bien preparar alimentos para un gran número de personas en nuestra propia casa con prisas y sin percatarnos de su exposición a las altas temperaturas que suelen azotar nuestro país. Asimismo, dichas prisas también pueden dar lugar a una mala conservación de los alimentos preparados que, aunque se basen en productos frescos y de calidad, pueden acabar produciéndonos otros síntomas muy diferentes de la buena degustación alimentaria que cabría esperar. De hecho, hasta el 50% de las intoxicaciones se producen con alimentos preparados en casa.

Os hablo de las intoxicaciones alimentarias, las cuales pueden producirse durante todo el año, pero que destacan por tener un repunte en verano debido a las altas temperaturas. A las bacterias les gusta vivir a 36ºC – 37ºC, y pueden estar en diversos alimentos, destacando los huevos, carnes, pescados e incluso verduras. Si sufrimos una de estas intoxicaciones, lo más común es acabar con una gastroenteritis (vómitos, diarrea y dolor abdominal), incluso llegando a precisar. atención médica. Y ojo, pues algunos de estos bichitos tardan hasta tres días en causar síntomas, aunque otros producen una intoxicación inmediata.

Por ello, hoy repasaremos los alimentos que más intoxicaciones alimentarias suelen provocar, según el último informe de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), con datos del pasado año 2014.

Huevos

huevos-encurtidos-01

Los huevos, tortillas o salsas basadas en huevo son un peligro de sobra conocido en verano por su mala manipulación y/o conservación. Según la OCU, el huevo es causante del 23% de intoxicaciones alimentarias en España gracias a la transmisión de un tipo de bacteria llamada Salmonella. Este microorganismo se encuentra en las heces de los animales, motivo por el cual acaba contactando con la cascara del huevo.

Por ello, la OCU aconseja una manipulación cuidadosa del alimento, evitando el contacto de la cáscara con el interior; y no, no es necesario lavarla sino solo evitar el contacto entre el interior y el exterior. Asimismo, las salsas como la mayonesa o las tortillas no deben permanecer más de 24 horas en la nevera y, si hacemos una tortilla, debe consumirse antes de dos horas tras sacarlas de la nevera.

Como curiosidad, el Centro Europeo para la Prevención y Control de las Enfermedades habló el pasado mes de junio sobre un nuevo brote de Salmonella enterica en otro alimento bien distinto, las semillas de sésamo, algo que no es demasiado común.

Pescado

sushi-pescado-00

El segundo producto alimentario, con un 9% de las intoxicaciones alimentarias en su haber, es el pescado y los derivados pesqueros según la OCU. Esto se debe, sobre todo, a la nueva moda de consumir pescado crudo o semicrudo, como es el caso del sushi preparado en casa.

De nuevo, la OCU recomienda una manipulación cuidadosa, con un lavado y conservación en nevera hasta cocinarlo. Por otro lado, si se quiere comer crudo, es importante congelarlo a -20ºC o más durante un mínimo de 5 días para asegurar que las larvas de anisakis han muerto, ya que este microorganismo está causando cada vez más infestaciones parasitarias en nuestro país y también en otros países de Europa. De hecho, recientemente hubo un raro caso de infestación por anisakis (tras comer sushi) en Portugal que llegó a necesitar una intervención quirúrgica.

Marisco

06-marisco

Seguidamente, la OCU afirma que el 6% de las intoxicaciones alimentarias en España se deben al marisco. Para evitarlas, la OCU aconseja comprar el marisco vivo y en lugares de venta autorizada, no a furtivos, pues estos últimos no garantizan una higiene adecuada.

Asimismo, destacan que los moluscos de concha grande son los más peligrosos en este sentido, ya que son los que más bacterias concentran sobre ellos, y deben estar recogidos en zonas seguras o depurados para evitar problemas.

Vegetales

Italian ingredients - pasta, vegetables, spices, cheese

Empatados con los mariscos, los vegetales son responsables del 6% de las intoxicaciones alimentarias. De nuevo, la OCU aconseja lavar correctamente los vegetales, ya que se suelen mezclar posteriormente con otros alimentos y acaban dándonos problemas.

De hecho, destacan, incluso se han reportado casos de brotes de gastroenteritis por virus por frutos rojos congelados o zumos. Aunque no suele ser algo común.

Pollo

pechuga

Finalmente, en quinto lugar, el pollo destaca entre las carnes por producir el 5% de las intoxicaciones alimentarias. Según la OCU esto se debe a que es una carne fácil de contaminar por su abundancia de agua y por su mala manipulación.

En el caso del pollo destacan dos tipos de bacterias: la salmonella (como en el huevo) y el campylobacter; este último ha repuntado sus casos según el último informe del Centro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades con datos de 2014, un año donde se registraron más de 240.000 casos confirmados de campilobacteriosis en toda Europa, destacando un aumento del 13% de este tipo de infecciones respecto al año anterior y su claro pico estancional en julio.

Tanto la salmonella como el campylobacter producen síntomas de gastroenteritis como los que hemos explicado inicialmente. Por ello, la OCU aconseja cocinar bien el pollo, siendo desaconsejable su consumo crudo o semicrudo, sobre todo en productos tales como hamburguesas o salchichas frescas. Además, es importante evitar una contaminación cruzada al manipular la carne de pollo en tablas o con cubiertos.

¿Habéis tomado buena nota?

Imagen de cabecera | GoodLifeStudio (iStock)

Noticias relacionadas