Creo que la mayoría de nosotros de manera intuitiva pensamos que los alimentos congelados no son tan saludables como los frescos. Y personalmente pienso que es impagable poder disfrutar de todo el sabor de unas verduras de huerta recién cogidas y que si hablamos de sabor, en el caso de las verduras, no hay punto de comparación, aunque es cierto que esta pérdida no es igual en todos los productos.

Siempre he sido fiel defensora de los productos de temporada y de proximidad y me preocupa bastante saber de dónde viene lo que como, pero eso no significa que en ocasiones no tenga que recurrir a unos garbanzos de bote o a unos guisantes congelados sin que me suponga un drama.

Alimentos frescos y alimentos congelados, ¿cuáles son más saludables?

En cuanto a propiedades nutricionales, los alimentos congelados como verduras, frutas, carnes o pescados aportan prácticamente los mismos nutrientes que los mismos productos frescos, aunque por mucho que nos insistan la mayoría pierden sabor y muchos de ellos adquieren una textura bastante diferente. Os pongo como ejemplos las setas congeladas o los frutos rojos que, una vez se descongelan no tienen nada que ver con lo que eran antes de congelarse, al menos si pretendemos comerlos crudos.

Pero un punto importante a la hora de llevarnos a casa un producto congelado es que es buena costumbre echar un ojo al etiquetado, pues no son lo mismo unas espinacas ultracongeladas que, con más o menos sabor, solo son espinacas que un filete al que han añadido sal y otra serie de aditivos para que la congelación no afecte visualmente a su aspecto. Cuando es así debe especificarse en la etiqueta y no debe venderse como carne, sino como preparado cárnico o preparado de carne congelada. Un ejemplo de lo que os digo lo podéis encontrar en la sección de carnes congeladas del Mercadona, que es el primer sitio que me viene a la cabeza en este momento.

Los alimentos congelados, ¿son seguros?

En lo que a seguridad alimentaria se refiere, los alimentos se someten a un proceso de ultracongelación que impide el crecimiento de microbios y que los hace completamente seguros para su consumo siempre y cuando se haya respetado la cadena de frío.

Pero si son casi igual de buenos, ¿por qué los alimentos congelados son más baratos?

Por una cuestión de oferta, se recolectan en temporada cuando la oferta es mayor y el precio es más barato, eso permite que el precio final también sea más barato.

¿Los alimentos congelados comprados son iguales que los que se congelan en casa?

La congelación a nivel industrial se realiza de una forma más rápida y eficiente de la que podemos conseguir en un congelador doméstico y eso siempre es una ventaja. Cuando congelamos en casa siempre tenemos que tener la precaución de congelar alimentos que estén muy frescos.

¿Y los alimentos congelados precocinados son saludables?

Pues os digo lo mismo que con los preparados cárnicos. Normalmente son productos que llevan bastantes grasas, sal y aditivos para que al descongelarlos tengan buen aspecto o mantengan una textura apetecible, por lo que son menos recomendables y de consumirse debe ser muy de vez en cuando. Si queremos raciones de comida cocinada, lo mejor es preparar nuestros propios túpers.

Y si cocino con alimentos congelados, ¿puedo congelar las sobras?

Sí, porque en ese caso no estamos rompiendo la cadena de frío, sino que hemos descongelado un producto, lo hemos calentado a una temperatura suficientemente alta como para que su consumo sea seguro y no hay ningún problema en congelarlo de nuevo una vez cocinado. Lo que no puedes hacer es volver a congelar las sobras de las sobras.

Y ahora si queréis podéis contarme qué productos congelados compráis habitualmente. ¿Recomendaciones sobre alguno en concreto que sea tan bueno como fresco?

Imagen| Flickr

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