Vamos a preparar un pan de molde casero delicioso, esponjoso y sobre todo natural, sin la cantidad de conservantes que lleva el pan de molde industrial. Este pan es básicamente harina, levadura, sal y agua. Es verdad que nos durará menos tiempo, pero no vamos a dejar que se ponga duro porque seguro que nos lo vamos a comer antes de que eso suceda. Además, si vemos que no lo vamos a consumir pronto lo podemos congelar sin problemas.

Ingredientes para elaborar el pan de molde con Thermomix 

Para elaborar el prefermento

  • Agua, 50 g
  • Levadura fresca prensada, 10 g
  • Azúcar, media cucharadita
  • Harina de fuerza, 65 g

Para elaborar la masa de pan de molde

  • El prefermento del apartado anterior
  • Agua, 125 g
  • Azúcar, media cucharadita
  • Aceite de oliva virgen extra, 20 g
  • Sal, media cucharadita
  • Harina de fuerza, 250 g
  • Aceite de oliva, para engrasar el molde y pincelar la masa
  • Semillas de sésamo o amapola, para espolvorear

He utilizado un molde tipo cake de las siguientes medidas: 25 x 11 x 7,5 cm

Elaboración del pan de molde con Thermomix (TM5)

01: Elaboramos el prefermento

Ponemos en el vaso todos los ingredientes del prefermento: el agua, la levadura fresca prensada, el azúcar y la harina de fuerza. Mezclamos programando 30 seg/velocidad 4. Dejamos reposar la mezcla dentro del vaso durante 30 minutos o hasta que doble su volumen. Este tiempo de espera es muy relativo porque depende mucho de la temperatura del lugar donde estemos cocinando, de todas formas es mejor dejarlo más tiempo que quedarnos cortos.

02: Elaboramos la masa del pan de molde y dejamos levar

Añadimos al vaso, sobre el prefermento, todos los ingredientes de la masa de pan: el agua, el azúcar, el aceite de oliva virgen extra, la sal y la harina de fuerza. Amasamos el conjunto programando 2 min/vel espiga.

Dejamos reposar de nuevo la masa en el vaso sin el cubilete y tapado con un paño hasta que doble su volumen. Tardará aproximadamente 30 minutos. Si necesitamos el robot para otra cosa, podemos dejar reposar la masa en un molde engrasado con aceite y tapado con un trapo o film transparente.

Mientras, engrasamos el molde tipo cake alargado con aceite de oliva o mantequilla. En esta ocasión, para asegurarme un desmoldado sin sorpresas, ya que es la primera vez que utilizo este molde, he puesto una tira de papel de horno a lo largo. Si sabes que el tuyo desmolda bien no hace falta que se la pongas.

03: Colocamos la masa en el molde y dejamos levar una vez más

Después de doblar su volumen, la masa resultante es algo pegajosa pero se elimina fácilmente de las manos, así que normalmente no es necesario añadir nada de harina sobre la encimera para amasarla y desgasificarla. Como todas las harinas no reaccionan igual, si te ha quedado la masa demasiado pegajosa espolvorea la encimera y la masa con un poco de harina hasta que sea manejable, pero sin pasarte.

Hacemos una bola con la masa y con el rodillo le damos una forma alargada del tamaño del molde. Colocamos la masa dentro del molde y la extendemos con las manos para que llegue bien a todos los rincones.

Debemos dejar levar la masa de nuevo hasta que doble su volumen; tardará alrededor de una hora. Tapamos el molde con un paño y lo dejamos en un sitio cálido y sin corrientes; yo lo he metido en el horno apagado.

Una vez levada la masa, pintamos la superficie con aceite o leche, muy suavemente. Si quieres que quede más doradito puedes pintarla con huevo batido. Opcionalmente podemos espolvorear la superficie con semillas de sésamo o amapola.

Precalentamos el horno 240ºC calor arriba y abajo.

04: Horneamos el pan de molde

Introducimos el molde en el horno precalentado y horneamos durante 5 minutos a 240ºC, calor arriba y abajo. Seguidamente bajamos la temperatura a 200ºC, y continuamos horneando durante 20 ó 25 minutos más, hasta que se dore la superficie del pan. Si se dora antes de este tiempo, tapa el pan con papel de aluminio y continua horneando.

Los tiempos de cocción pueden variar en función del horno, podemos comprobar si el pan está cocido pinchándolo con un palo de brocheta.

Cuando el pan esté cocido, lo sacamos del horno y lo dejamos atemperar, y en cuanto sea manejable lo desmoldamos sobre una rejilla, para evitar que se humedezca dentro del molde. Si queremos que la corteza nos quede blanda deberemos envolverlo en un trapo de cocina limpio mientras se enfría.

Dejamos enfriar completamente antes de consumir.

05: Servimos el pan de molde casero

Una vez se ha enfriado completamente el pan de molde, lo cortamos en rebanadas con un cuchillo bien afilado.

Y ya podemos saborear nuestro esponjoso y delicioso pan de molde casero como más nos apetezca: como acompañamiento de nuestra comida, o para desayunar o merendar en versión dulce, con mantequilla y mermelada o miel, o en versión salada, con tomate rallado, jamón y aove.

Lo podemos conservar en un recipiente hermético o en una bolsa de plástico en el frigorífico.

Resultado

El resultado es un pan esponjoso, muy rico y saludable. Merece la pena, no voy a decir el esfuerzo porque con la Thermomix no requiere de ninguno, sino la espera de los levados, porque el resultado es espectacular.

Como no lleva ningún conservante, después de un par de días podemos notar que la miga se seca un poco, así que si vemos que no lo vamos a consumir en ese tiempo es mejor que lo congelemos. Cortamos el pan en rodajas y las congelamos individualmente envueltas en film transparente o en bolsas de congelar, de este modo siempre tendremos a mano pan como recién hecho y, en función de la prisa que tengamos, nos bastará con meterlas aún congeladas en la tostadora o dejarlas descongelar sobre una rejilla a temperatura ambiente.

Y en lugar de congelarlo, también podemos utilizarlo para prepararnos unos deliciosos sándwiches, o emplearlo como ingrediente principal de unos cuantos platos, te dejo algunas ideas: