El pollo asado es sin lugar a duda una de mis diez recetas favoritas. Es muy fácil hacerlo mal y destrozarlo, pero siguiendo esta sencilla receta conseguiréis un pollo asado al horno que queda crujiente por fuera y tierno por dentro. Con una salsa espectacular.

Ingredientes

Para el pollo asado en el horno

  • Pollo entero y limpio, 1
  • Sal
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Vino blanco, 1 vaso

Para la salsa

  • Romero, 1 ramillete
  • Lima, 1
  • Naranja, 1
  • Caldo de pollo, 500 ml
  • Mantequilla, 1 cucharada
  • Ajos, 4 dientes

01: Asar el pollo en el horno

Precalentamos el horno a 180ºC.

Salamos el pollo por todas partes y lo untamos en aceite de oliva con una brocha. Untamos también un poco de aceite en la bandeja del horno y lo ponemos con la pechuga mirando hacia arriba durante una hora a 180ºC.

02: Preparar la salsa de romero

Mientras se va haciendo el pollo preparamos la salsa. En una sartén derretimos la mantequilla y a fuego alto pasamos unos segundos el romero. Bajamos a la mitad de potencia y doramos los ajos. Añadimos la ralladura de la lima y la naranja, doramos unos segundos y añadimos el caldo de pollo. Dejamos a fuego medio reduciendo mientras se sigue haciendo el pollo en el horno.

03: Regar con el vino

Pasada la primera hora de horno, sacamos el pollo, lo regamos con el vino blanco y lo volvemos a meter al horno durante otra hora a 180ºC o hasta que esté bien dorado por fuera.

04: Terminar la salsa

Cuando esté listo el pollo recogemos la salsa que se ha formado en la bandeja y la reservamos. Trinchamos el pollo, separamos la carne de la carcasa y pasamos esta por una sartén a fuego alto, la retiramos y añadimos la salsa preparada antes con el romero y la del propio pollo que hemos reservado. Juntamos todo durante unos minutos a fuego medio.

Notas

La clave para conseguir un pollo asado al horno crujiente por fuera y tierno por dentro está en esa primera hora en la que no hemos añadido ningún líquido. Es muy importante seguir este paso y añadir el líquido pasada una hora, así se consigue ese pollo asado perfecto.

La salsa admite muchísimas modificaciones, podemos hacerla solo de cítricos con más tipos y cantidad de ralladura, o podemos eliminarlos y además de romero usar tomillo. O usarlo todo, ninguna opción es mala y obtendremos diferentes resultados.

Yo guardo un poco de esta salsa antes de añadir el caldo de pollo para hacer patatas asadas. Las cuezo en gajos durante 8 minutos, cuelo el agua, añado la salsa, tapo la cacerola, agito todo bien y echo las patatas a la bandeja del pollo en la última media hora de cocción.

Y a ti, ¿con qué especias te gusta el pollo asado? ¿Sueles asarlo entero o prefieres asarlo en trozos? ¿Qué tal si nos lo cuentas y la próxima vez que hagas pollo asado en tu casa le haces una foto y la subes a las redes sociales? Puedes etiquetarnos en Facebook o Instagram.