Es una de las frutas tropicales que más se consumen en España, no solo en conserva, sino también al natural. Su sabor dulce y su textura firme la convierten en una deliciosa golosina natural.

Se trata de una fruta con gran contenido en agua por lo que resulta muy adecuada para la preparación de zumos, sorbetes y batidos como este granizado de piña y menta que os traemos hoy.

Propiedades nutricionales de la piña

Según la Fundación Española de la Nutrición "la piña es una fruta que sólo madura satisfactoriamente en la planta. Su contenido en azúcar y en principios activos se duplica en las últimas semanas de maduración, por lo que los frutos recolectados prematuramente resultan ácidos y pobres en nutrientes.

Si ha sido bien madurada contiene alrededor del 11% de hidratos de carbono. La piña es fuente de vitamina C (contribuye a la protección de las células frente al daño oxidativo) y yodo (contribuye al metabolismo energético normal y a la producción de hormonas tiroideas y a la función tiroidea normal).

Entre los componentes no nutritivos de la piña, destacan los ácidos orgánicos, cítrico y málico, responsables de su sabor ácido.

Contiene bromelina o bromelaína, enzima o fermento de acción proteolítica, capaz de romper las moléculas de proteína dejando libres los aminoácidos que las forman. 

Una forma bastante habitual de consumir la piña es en conserva. Tras este procesado, la piña mantiene algunas de sus vitaminas y minerales, pero es pobre en su enzima bromelina —que se degrada con facilidad— y además resulta más calórica cuando la conserva no es en su jugo, sino en almibar, una solución azucarada."

Cómo hacer un granizado de piña y menta

Ingredientes

  • Piña grande de unos 2 kg, 1 ud
  • Cubitos de hielo, 30 ud
  • Limas, 2
  • Menta fresca, 1/2 ramillete y un poco más para decorar

Paso 1

Pelamos la piña, la troceamos en dados de unos tres centímetros y los echamos en el vaso de un robot de cocina o de una batidora de vaso americano con potencia suficiente para triturar hielo.

Paso 2

Pelamos las limas, las cortamos en dos y las echamos también en el vaso.

Paso 3

Añadimos la menta y trituramos hasta tener un puré.

Paso 4

Añadimos el hielo y trituramos todo con unos golpes de turbo. Si no tenemos ningún aparato con potencia suficiente para triturar hielo, podemos sustituir los cubitos de hielo por hielo picado en escamas del que se puede comprar en muchos supermercados. En ese caso, añadiremos las escamas de hielo al puré de piña y mezclaremos bien con ayuda de una espátula.

Paso 5

Servimos inmediatamente decorando con unas hojas de menta o un poco de ralladura de lima.