Cervezas Ambar ha querido recuperar el arte de beber en porrón, acompañándolo del contenido cervecero más adecuado para este recipiente centenario, la cerveza con limón. Así, de la mano de Ambar Radler, la cervecera ha diseñado junto con Chichinabo Inc. un porrón de edición limitada que estará disponible en las principales cadenas de alimentación hasta fin de existencias.

Este verano toca empinar el codo con Ambar Radler y el porrón

Una forma divertida, social y veraniega de compartir cerveza, que se puede conseguir gratuitamente con la compra de 12 latas de Ambar Radler y que viene acompañada de una breve guía para beber en porrón con arte, para ponerlo en práctica en casa con la mayor destreza.

El origen del porrón

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Hasta no hace mucho, era bastante común ver beber en porrón en algunos bares de España. E incluso en algunas casas. Sin embargo, poco a poco ha ido desapareciendo y, aunque aún no está extinto porque aún queda algún bar donde la gracia está en empinar el codo para beber del porrón, de no hacer nada para evitarlo en unos años podríamos darle por perdido.

Podría decirse que el «abuelo» de este artilugio es el ritón romano: un recipiente con forma de cuerno que se utilizaba tanto en rituales como en bacanales. Se bebía de él como copa o a gollete por el extremo más fino.

Esta curiosa forma de beber se mantuvo varios siglos, pero quienes «empinaban el codo» se resignaban a mantener el orificio tapado con un dedo entre trago y trago, lo que no hacía excesivamente cómodas las celebraciones.

Pero, ¿qué pasaría si fusionásemos una botella con un cuerno o ritón? El resultado es un recipiente bastante pintoresco mucho más cómodo a la hora de beber de él que una botella, mucho más estable a la hora de apoyar sobre una superficie que un cuerno y encima transportable. Vamos, todo un «inventazo», y con sello español.

Para beber con porrón

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Empieza llenar el porrón de cerveza, pero ten cuidado de no desbordarlo. Para beber:

• coge el porrón por el cuello con una mano
• acerca la parte más estrecha del porrón a la boca, pero sin chupar ¡qué el porrón tiene que rular! Solo para situarte.
• demuestra tu arte levantando el porrón y abriendo la boca sin ponerte perdido.