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Las familias suelen conservar tradiciones culinarias basadas en trucos transmitidos de abuelas a nietos, capaces de convertir recetas cotidianas en platos excepcionales.

Darío Jozifek, cocinero autodidacta y creador de contenido conocido en redes como @jozichef, ha revelado uno de estos métodos heredados de su abuela para lograr que cualquier tipo de carne resulte mucho más tierna y jugosa.

Tal y como ha explicado, el procedimiento consiste en dejar que la carne (sea pollo, pavo, cerdo o ternera) repose durante un día en la nevera, completamente sumergida en una mezcla de huevo batido, sal, ajo y perejil.

Según el propio Jozifek, quien anima en sus vídeos a probar el marinado antes de empanar y freír, "después de probar la carne así, no querrás cocinarla de otra manera".

El chef sostiene que este "truco de abuela" ha formado parte de la cocina de su casa durante años, permitiendo obtener carnes más jugosas y con un sabor más profundo.

Destaca, además, que no está restringido a una variedad concreta, pues se aplica tanto a pechugas de pollo como a filetes de ternera o solomillos de cerdo.

De hecho, recomienda incluso preparar y congelar las piezas ya marinadas y empanadas para disfrutar de una comida rápida y deliciosa en cualquier momento.

¿Es seguro dejar carne cruda en huevo batido durante un día?

Puede ser que surja la duda de si es seguro o no dejar la carne en la nevera embadurnada en huevo batido durante 24 horas.

Aunque el recurso parece muy efectivo, conviene tener en cuenta que tanto el huevo como la carne cruda son potenciales portadores de bacterias como Salmonella.

La FDA (Food and Drug Administration, Administración de Alimentos y Medicamentos en español) advierte que, incluso estando limpios y sin fisuras, los huevos pueden contener este patógeno, origen de numerosos casos de intoxicación alimentaria.

Del mismo modo, el portal Higiene Ambiental remarca que el huevo fresco, pese a su alto valor nutritivo, supone un riesgo si no se manipula, conserva y cocina con precaución.

Por ello, en el sector hostelero, el uso de huevo crudo está restringido y se prefieren productos pasteurizados para reducir posibles riesgos.

Así pues, se pueden mantener refrigeradas las preparaciones con huevo, pero siempre a 4 °C o menos, y utilizando recipientes cerrados y limpios, extremando el frío si se prolonga la conservación.

Por último, la cocción adecuada debe alcanzar al menos 75°C en el centro de la carne, de esta forma se elimina la presencia de Salmonella y otros patógenos.