La lava avanza en La Palma.

La lava avanza en La Palma. Reuters

Ciencia

La pesadilla continúa en La Palma ante posibles nuevos derrumbes y bocas: "No descartamos nada"

Los vulcanólogos no descartan la aparición de nuevas bocas, coladas o incluso el derrumbe de la cara sur del cono principal del Cumbre Vieja.

11 octubre, 2021 01:27

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"Contra la naturaleza no puedes hacer nada", afirma Laura García Cañada, vulcanóloga del Instituto Geográfico Nacional (IGN), a EL ESPAÑOL. Con 525 hectáreas arrasadas y 1.281 edificaciones e infraestructuras invisibilizadas por la lava, el volcán Cumbre Vieja de La Palma sigue siendo el único y principal motivo de la preocupación local.

El derrumbe total de la cara norte del cono del volcán el sábado generó una colada de lava que arrasó, con cierta velocidad, las zonas previamente liberadas de la furia vulcánica. Todoque, el barrio más afectado, llora ahora la pérdida de las edificaciones que aguantaron la primera estacada. Todas las casas ya son ceniza tras haber sido arrasadas por la nueva colada.

Los vecinos, evacuados, contabilizan las horas de oscuridad por rugidos del Cumbre Vieja. "Por la noche es cuando más fuerte se pone la erupción", afirma a este medio Nieves Rosa Arroyo, consejera de Seguridad y Emergencias del Cabildo de La Palma. 

La situación actual preocupa, precisamente, por la incertidumbre que la acción volcánica genera en La Palma. En las próximas horas podría haber nuevos derrumbes, poniendo el foco en la cara sur del cono, "al igual que en el nacimiento de nuevas bocas", explica García Cañada. 

"El derrumbe (del flanco norte) ha hecho que salga más lava que está llegando a nuevas zonas". "Lo normal es que continúe y es probable que nuevas coladas vuelvan a llegar al mar", añade la experta.

Nueva colada sur en La Palma.

Nueva colada sur en La Palma. Reuters

"Desde el derrumbe de ayer hemos tenido una colada de lava con bastante material que ha rebosado en tres puntos a lo largo de su recorrido hacia el mar", indica Stavros Meletlidis, también vulcanólogo del IGN. Aunque el experto afirma que "no hay preocupación sobre el volcán" en sí, parece que "toda la actividad está concentrada en el cono, las coladas son lo más importante ahora y hay que ver cómo transcurren en estos próximos días", añade.

Aunque todas las coladas están monitorizadas, los palmeros, la UME y los expertos que viven el día a día del Cumbre Vieja siguen en vilo. "La verdad es que no se puede descartar nada ahora mismo", confirma García Cañada. El domingo, los expertos monitorizaban la actividad del flanco sur del cono del volcán, situado cerca de la colada principal y con una masa de lava contundente.

La portavoz científica del Plan de Emergencia Volcánica de Canarias (Pevolca), María José Blanco, ha indicado que la cantidad de magma arrojada varía entre los 39,6 millones de metros cúbicos, según un cálculo del Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan).

Imagen del Cumbre Vieja desde la distancia.

Imagen del Cumbre Vieja desde la distancia. Reuters

Noches infernales

Las horas nocturnas preocupan en La Palma. Son las de mayor actividad y las que han vuelto a poner el foco en la destrucción. Nieves Arroyo las considera "horribles, no podemos dormir". "No solo son los terremotos, también el ruido que tiene el volcán, parece que las casas se mueven", añade la consejera.

Como bien afirma Arroyo, las noches se convierten en las horas más críticas en La Palma, pues son los momentos de mayor actividad volcánica. En las últimas 24 horas, dicha ha alcanzado un nivel superior de intensidad. 

El director técnico del Pevolca, Miguel Ángel Morcuende, ha agradecido "el civismo" de los habitantes del Valle de Aridane, que están muy cerca del volcán y están sometidos diariamente estos a ruidos y explosiones.

De las infraestructuras dañadas por la lava, 1.186 han sido destruidas y 95 han sufrido daños. Hasta 38,3 son los kilómetros de vías destruidas. La lava sale ahora "por el sitio donde anoche hizo más daño", asegura Arroyo.

Los gases emitidos, "controlados"

Morcuende ha explicado que la calidad del aire en La Palma es razonablemente buena al no superarse los umbrales máximos de dióxido de azufre, ni del tamaño de las partículas en suspensión.

"Del control de la calidad del aire se está encargando el Gobierno de Canarias y cuando éste no es bueno la gente no puede entrar a trabajar", indica Laura García Cañada. "Lo único que se puede hacer es medirla, usarla", apostilla. Aunque, afirma, de momento "los gases están controlados". 

La situación en La Palma es cambiante, principalmente en lo que al viento se refiere. Se prevé que dicho gire a compononente oeste este lunes, lo que ocasionará un desplazamiento del penacho de cenizas y dióxido de azufre desde su posición actual, con una configuración norte-sur, hasta una distribución oeste-este a lo largo de mañana.

"Los cambios esperados en el régimen de vientos podrán afectar a la operatividad del Aeropuerto de La Palma a partir mañana y no es descartable que afecte también a los aeropuertos en Tenerife", añadía la portavoz del Pevolca, María José Blanco.