A la izquierda, Georgina Rodríguez y Cristiano Júnior durante la comida y, a la derecha, Germán Franco posa en La Casa de María.

A la izquierda, Georgina Rodríguez y Cristiano Júnior durante la comida y, a la derecha, Germán Franco posa en La Casa de María. Netflix | Cedida

Reportajes

Los secretos de Germán, el dueño del restaurante favorito de Georgina, novia de Cristiano Ronaldo

En el documental 'Soy Georgina', la 'influencer' visita La Casa de María, un exitoso local de Sevilla también propiedad de Óscar Vega y Rafael Cebolla.

27 febrero, 2022 02:24

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Cristiano Ronaldo ha regresado esta semana a España para disputar un partido de Champions League con el Manchester United, que ha empatado 1-1 contra el Atlético de Madrid. No obstante, no es la primera vez que el futbolista ha vuelto a este país desde que abandonara el Real Madrid en 2018. El pasado verano, de hecho, el astro portugués acudió a Sevilla a disputar un partido entre Portugal, su selección, y Bélgica. Durante esa estancia, su novia, la toledana Georgina Rodríguez, aprovechó para comer en La Casa de María, su restaurante favorito de la capital hispalense.

Lo hizo con Cristiano Júnior, el periodista de El Chiringuito Eduardo Aguirre, su mujer, y otra pareja. Y allí, en el ático del restaurante situado en el barrio de Triana, la comitiva encabezada por la influencer Georgina Rodríguez disfrutó de unas impresionantes vistas de la ciudad de Sevilla y del río Guadalquivir mientras Los Rebujitos les ofrecían un pequeño concierto privado. Previamente, eso sí, habían disfrutado de una completísima “comida tradicional” que EL ESPAÑOL detallará a continuación. Esta secuencia, de hecho, se ha mostrado en la serie documental Soy Georgina, estrenada y emitida por Netflix este mes de febrero.

Pese a ello, no es la primera vez que Georgina Rodríguez o, incluso, el propio Cristiano Ronaldo, se dejan caer por alguno de los dos restaurantes que regenta el Grupo Trifulca. Por ejemplo, casi un año antes, el 3 de noviembre de 2019, la pareja cenó en el restaurante Mariatrifulca durante una visita que hicieron a Sevilla en el marco de una invitación a los MTV Awards celebrados ese año. Las conexiones entre Georgina Rodríguez y este grupo hostelero ya existían –y continúan– hasta el punto en el que tanto ella como su entorno eligieron a La Casa de María, el otro restaurante del Grupo, para pasar una agradable tarde inmortalizada por Netflix.

“Fue un placer que nos eligieran para grabar una escena para la docuserie”, agradece Germán Franco (Los Palacios y Villafranca, Sevilla, 1982), hostelero y socio fundador del Grupo Trifulca. De hecho, este experimentado profesional se aventura a decir que, a su juicio, muchas personalidades y famosos recurren a los restaurantes sevillanos del grupo por “la privacidad y el buen trato” que pueden ofrecerles. “A nosotros, además, nos gustan los retos. No es la primera vez que hacemos alguna producción en las terrazas de Mariatrifulca: ha sido un plató de entrevistas, documentales… o grupos como El Barrio han presentado discos, etc. Además, ahora, una plataforma digital está grabando una serie en la que el 80% de la trama ocurre en Mariatrifulca”, explica a este medio el hostelero.

Los restaurantes de 'María'

A pesar de ello, que Georgina Rodríguez haya confiado en La Casa de María ya no sólo para comer, sino para grabar su documental autobiográfico, tiene que ver con la buena labor de los hosteleros de este grupo. Según Germán Franco, hijo de “una familia de hosteleros de toda la vida”, “la vocación” que siempre ha tenido por conseguir sus metas en el mundo de la hostelería fue lo que le empujó a abrir Mariatrifulca en 2016. Una vocación hostelera que fortalece los servicios que presta este grupo sevillano.

Eso sí, no lo hizo solo. Sus socios Óscar Vega y Rafael Cebolla han sido fundamentales en el auge de La Casa de María y Mariatrifulca. “Ellos son dos experimentados empresarios que tenían un grupo independiente que se dedicaba al ocio nocturno, pero, cuando tuvieron la oportunidad, quisieron entrar en el mundo de la restauración. Por ello, al necesitar a alguien con cierta experiencia en hostelería, me llamaron y montamos entre los tres Mariatrifulca”, recuerda Germán Franco.

Germán Franco en una de las terrazas de La Casa de María, en Sevilla.

Germán Franco en una de las terrazas de La Casa de María, en Sevilla. Cedida

Pero no montaron sus negocios en un sitio cualquiera. El enclave donde se alzan tanto Mariatrifulca, como La Casa de María, abierto en 2020, es fundamental y parte del éxito de los restaurantes. Ambos se hallan a cada lado de la conocida calle Betis y a escasísimos metros del puente de Isabel II, más conocido como el puente de Triana. Son, en consecuencia, casi los primeros locales que los sevillanos pueden divisar nada más cruzar el famoso puente que atraviesa el río Guadalquivir.

Sus vistas de ensueño, por tanto, son parte del reclamo de Mariatrifulca y de La Casa de María, los dos restaurantes hermanos que apasionan a Georgina Rodríguez. Hasta el punto de que, como se ha indicado, los ha visitado en varias ocasiones. La comida, por otra parte, también juega un papel importante. “En Mariatrifulca se ofrece una gastronomía más internacional y quizá, más enfocada al turismo, mientras que en La Casa de María ofrecemos una comida más tradicional española. Por ejemplo, paellas a la brasa, ensaladilla rusa, pescados a la brasa, o platos tradicionales de cuchara”, desgrana Germán Franco.

Georgina Rodríguez, junto a Cristiano Júnior, Eduardo Aguirre y otros comensales, en La Casa de María.

Georgina Rodríguez, junto a Cristiano Júnior, Eduardo Aguirre y otros comensales, en La Casa de María. Netflix

–¿Y recuerda qué comieron Georgina Rodríguez y sus acompañantes durante su estancia en La Casa de María?

–Varias cosas. Entre ellas recuerdo que pidieron una ensalada de tomates y ventresca, tortillas de patatas con trufa, paella a la brasa, croquetas… y, por supuesto, el postre estrella: una versión de torrijas que hacemos con pan brioche que está caramelizada y tiene crema de mascarpone. Es otro de nuestros platos estrella.

Un edificio tradicional

Aunque La Casa de María ya tiene el honor de salir en una producción de Netflix, lo cierto es que es un restaurante muy joven. Tanto que sólo tiene dos años de vida, pues se inauguró en 2020. “Enfrente de Mariatrifulca, había un bar regentado por un señor mayor que ya quería retirarse por su edad y por la pandemia. Por ello, hablamos con él y mis socios y yo optamos por emprender un negocio nuevo”, rememora Germán Franco.

El hostelero, no obstante, reconoce que abrir un negocio hostelero en tiempos de pandemia “fue una apuesta arriesgada”, pero que lo hicieron con la mayor de las ilusiones posibles. Es más, Germán Franco cuenta que la “disposición” del negocio les ayudó a afrontar los peores momentos de la pandemia de la Covid-19.

Vista exterior de La Casa de María.

Vista exterior de La Casa de María. Cedida

¿Por qué? “Porque La Casa de María se encuentra en un edificio rehabilitado de 1920. Eran dos casas independientes y tradicionales de la época, que hemos unido, pero manteniendo su estructura. Por ello, tiene salones independientes y privados que hacen que los comensales se sientan cómodos y ésto nos ha venido genial para separar a los grupos en esta pandemia”, explica Germán Franco.

Estos salones y todos los espacios de La Casa de María, de hecho, se han decorado intentando respetar el arte y los estilos arquitectónicos propios de la capital hispalense. En todo caso, el edificio del restaurante cuenta con 300 metros cuadrados, divididos en tres plantas más ático. En todas ellas “hay salones privados en los que hemos intentado recuperar el valor arquitectónico de la finca”, expresa el hostelero.

Georgina Rodríguez, Cristiano Júnior y compañía, en este sentido, reservaron el ático, que según fuentes de la empresa, es “un espacio al que únicamente podrás acceder bajo la autorización de La Casa de María. Un salón con mesa imperial para 12 comensales con una terraza privada con vistas al Altozano, que ponen la guinda del pastel del proyecto”. Esa misma mesa y ese mismo espacio aparecen en el documental Soy Georgina durante la comida de la influencer en su restaurante favorito de Sevilla.

El puente de Triana visto desde los salones de La Casa de María.

El puente de Triana visto desde los salones de La Casa de María. Cedida

Tras esta comida, y para orgullo y agradecimiento de Germán Franco y el resto del equipo del Grupo Trifulca, la influencer, el hijo mayor de Cristiano Ronaldo y el resto del elenco pudieron disfrutar de la terraza privada con vistas al río Guadalquivir. Ahí pasaron la sobremesa mientras Yerai Blanco, junto con Los Rebujitos, amenizaban la velada con sus canciones. Es más, al final, la cosa se animó y Georgina Rodríguez comenzó a cantar Todos los besos, una de las canciones más importantes del grupo gaditano.

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