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El biólogo Ricardo Beiras sobre los pellets en Galicia: "Esto no es comparable al Prestige"

El investigador del Centro de Investigación Mariña de la Universidade de Vigo lamenta la falta de información sobre los componentes de los pellets y señala que para saber el riesgo que suponen es preciso conocer de qué material están hechos y si sueltan o no sustancias químicas
Imagen de archivo de pellets en la playa de Sabón
Gustavo de la Paz – Europa Press
Imagen de archivo de pellets en la playa de Sabón

Numerosas playas de Galiciai amanecen con pequeñas bolas de plástico en sus arenales desde el pasado mes de diciembre. Una situación que se debe al vertido de un buque frente a la costa de Portugal y que ha generado alarma pero que, según explica el investigador del Centro de Investigación Mariña (CIM) de la Universidade de Vigo, Ricardo Beiras Sabell, "non é comparable ao Prestige".

Y es que para saber el alcance y el riesgo de este desastre ambiental, es preciso conocer primero de qué material en concreto están hechos los pellets que cientos de voluntarios se afanan por retirar, así como si sueltan o no sustancias químicas. Al respecto, hay informaciones contradictorias: la Xunta dice que no son tóxicos, mientras que la Fiscalía de Medio Ambiente detecta "índices de toxicidad".

"Normalmente os obxectos de plástico na auga, como unha bolsa ou unha botella, fragméntanse e fórmanse microplásticos, pero depende do tipo de plástico. En principio os pellets non necesitan fragmentarse para formar microplásticos porque xa son microplásticos: unha partícula de 2-3 milímetros, xa está definida como un microplástico", indica Beiras.

Falta de información sobre la composición de los pellets

"Non sei o que son, porque esa información non está circulando", lamenta el biólogo, señalando que estos datos deberían ser públicos. Así, el investigador del CIM añade que el Intecmar dijo en un primer momento que los pellets eran polímeros vírgenes pero poco después matizó que el informe era "moi preliminar", por lo que es preciso ser cauto.

"Os pellets de plástico normalmente non son tóxicos, pero dicir pellets é non dicir nada, porque o pellet é a forma, non a composición. O importante non é a forma que teña senón as sustancias químicas, e iso é o que non sabemos", explica el biólogo, que añade que cualquier barco que lleve una mercancía tiene las hojas de seguridad con las sustancias químicas, información que no ha trascendido hasta el momento.

Beiras señala que su equipo cuenta con varias muestras en el laboratorio y que prevén realizar pruebas en los próximos días para determinar la composición de los pellets que llegan a las playas gallegas desde hace casi un mes. El Toconao perdió 26.250 kilos de este material que iba almacenado en un contenedor que se cayó, junto a otros cinco, al mar frente a la costa de Viana do Castelo, en Portugal.

Los organismos marinos podrían ingerirlos

"Unha cousa é a toxicidade nos seres humanos e outra os efectos sobre os organismos mariños. Hai moitas substancias que son totalmente inocuas para os seres humanos pero poden ser perxudiciales para os organismos mariños", indica Beiras. El biólogo lo ejemplifica con los filtros solares, usados para la elaboración de las cremas que nos protegen del sol y que inicialmente se barajaron como la naturaleza de los pellets.

Respecto al peligro que suponen para los peces y aves que podrían llegar a ingerirlos, algo sobre lo que se ha hablado en los últimos días, Beiras señala: "Evidentemente, calquera partícula que estea flotando na auga pode ser inxerida por calquera organismo mariño, sexa a propósito sexa accidentalmente. Pero mentres non saibamos que leva, non podemos saber se inxerila é un problema ou non".

El biólogo explica que, "en principio", que los animales se coman estas pequeñas bolas no debería ser un problema, ya que podrían expulsarlas de la misma forma que las han ingerido. "A non ser que inxerira cantidades enormes e tivera obstrución do aparato dixestivo, pero normalmente non debería ser o caso", concreta el investigador del CIM de la UVigo.

Complicado recoger los pellets dispersos en el agua

Beiras señala que no es realista pensar en recoger uno a uno estos pellets debido a su pequeño tamaño: "É moi complicado unha vez se dispersan na auga. Non me imaxino ningún medio técnico realista para recoller eso da auga unha vez saen dos sacos". Este desastre ambiental, sin embargo, no es comprable en dimensión a lo ocurrido en 2002 con el Prestige.

"Como as autoridades están actuando con tanta opacidade, a xente pensa mal, pero esto non é comparable ao Prestige, que era un petroleiro con 70.000 toneladas e neste caso estamos falando dun contenedor de 26 toneladas. No único no que se parece ao Prestige é que unha vez máis, non nos están dicindo o que pasa, pero o impacto ecolóxico non ten nada que ver", explica Beiras.

El Toconao perdió, además del contenedor con los pellets, otros cinco que llevaban pasta de tomate, neumáticos, barras de aluminio y rollos de papel film. Algo que ha llevado a varias voces vinculadas al sector de la pesca y marítimo en general a pedir un control más riguroso del tráfico de mercancías para evitar que este tipo de situaciones vuelvan a producirse.

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