
Imagen de archivo de una tostada con aguacate. IStock.
Ni aguacate ni aceite de oliva: la tostada saludable que ayuda con la pérdida de grasa y está lista en 5 minutos
Incluir una proteína en el desayuno siempre es una buena idea para que tengamos una buena vitalidad y un buen estado de ánimo durante todo el día.
Más información: Ni tostadas ni café: este es el desayuno antiinflamatorio que recomienda la nutricionista Sandra Moñino
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Las tostadas son uno de los desayunos más tradicionales en España. Son rápidas de preparar, versátiles y ofrecen una base perfecta para combinar distintos ingredientes. No obstante, no todas las elecciones que solemos hacer al acompañarlas son las más acertadas desde el punto de vista nutricional, sobre todo si hablamos de la primera comida del día, que es clave para marcar el ritmo metabólico y energético.
Conservas como la mermelada, que aunque tradicional, suele ir cargada de azúcares añadidos y conservantes, o la popular crema de cacao, son dos de las opciones más habituales; sin embargo, no son las más recomendables. Algo de lo cual se ha hecho eco en los últimos años, en los que ingredientes como el aguacate han ganado popularidad.
El aguacate y el tradicional aceite de oliva son grasas saludables, cargadas de antioxidantes y nutrientes que benefician al corazón, el cerebro y la salud en general. Sin embargo, como ocurre con todo, también es positivo variar y no depender exclusivamente de estos alimentos, por buenos que sean.
En este sentido, muchos nutricionistas coinciden en que una de las mejores formas de romper el ayuno matutino es con proteína. Este nutriente, además de ser esencial para el mantenimiento y desarrollo muscular, favorece la saciedad y estabiliza los niveles de glucosa, evitando así picos de energía seguidos de caídas bruscas que nos hacen sentir cansados a media mañana.
Entre las opciones proteicas más completas y accesibles se encuentra el huevo, que no solo aporta una proteína de altísima calidad, sino que además contiene vitaminas del grupo B, minerales como el hierro y colina, un nutriente fundamental para el cerebro.
A pesar de todo esto, es sorprendente cómo muchas veces relegamos el huevo a preparaciones más tradicionales, sin explorar todo su potencial en platos como las tostadas. Por eso, la opción de hoy no solo engloba todos esos beneficios, sino que es muy fácil de hacer y no vas a manchar nada. Para ella, solo necesitamos pan, huevo, pavo y queso.
Ingredientes
1 rebanada de pan (mejor si es integral, de masa madre o de centeno)
1 huevo
2-3 lonchas de pavo (fíjate que tenga al menos un 85% de carne)
Queso rallado o en trocitos (puede ser fresco, bajo en grasa, o el que prefieras)
Opcional: sal, pimienta, especias (pimentón dulce, cúrcuma, orégano...)
Paso 1
Coloca la rebanada de pan sobre una tabla. Con la parte de atrás de una cuchara, presiona suavemente el centro de la rebanada hasta formar un hueco, sin romper el pan por completo. Este espacio será el "nido" para el huevo.
Paso 2
Rompe con cuidado el huevo y viértelo en el hueco del pan. Si es muy grande, puedes retirar un poco de clara para que no rebose.
Paso 3
Añade las lonchas de pavo troceadas sobre el huevo, y luego esparce el queso por encima. Puedes incorporar otros ingredientes si lo deseas, como unas hojas de espinaca cruda, unos trocitos de tomate o atún.
Paso 4
Agrega una pizca de sal y pimienta, y si te gusta, espolvorea alguna especia.
Paso 5
Coloca la tostada con cuidado en la bandeja de la airfryer. Cocina a 180 °C durante 5 minutos. El tiempo puede variar ligeramente según el modelo de tu freidora y el punto que prefieras en el huevo (puedes dejarlo un poco más si lo quieres más hecho).
Paso 6
Saca con cuidado la tostada caliente, colócala en un plato y lista para comer.
Los beneficios de desayunar huevos
Según explica la Fundación Española de Nutrición (FEN), los huevos son bajos en calorías, combaten la anemia y tienen un gran aporte vitamínico e incluyen vitaminas de los grupos A y B.
Según explicó a EL ESPAÑOL Laura Arranz, doctora en Alimentación y profesora de la Universidad de Barcelona, el huevo es una fuente importante de proteína e incluir una proteína en el desayuno siempre es una buena idea para que tengamos una buena vitalidad y un buen estado de ánimo durante todo el día.
El huevo, por su contenido nutricional en todo su conjunto, es un alimento muy saciante, por lo que incluir, por ejemplo, un lácteo, una tostada y un huevo hace que el desayuno sea una comida muy saciante e indirectamente, nos ayuda a regular el apetito que podamos tener durante la mañana, hasta la hora de la comida.
Imagen de unas tostadas con huevo.
"En el caso de las personas que están haciendo dieta viene muy bien porque se evita el picoteo entre horas y el apetito está, por tanto, mucho más controlado", apunta la profesional.
Además, consumir proteína en el desayuno favorece una respuesta glucémica más estable, evitando los picos y bajones de azúcar que suelen aparecer tras desayunos ricos en carbohidratos simples. Esto se traduce en niveles de energía más constantes, mejor concentración y menor ansiedad por la comida durante las primeras horas del día.
Según informa en su web la Fundación Española del Corazón (FEC), en el caso de sufrir sobrepeso se debe incluir el huevo en la dieta preferentemente cocido o pasado por agua; si se padece de trigliceridemia (exceso de triglicéridos en la sangre) se debe restringir el consumo de yemas y decantarse mejor por las claras; y si se tiene el colesterol alto, se pueden tomar 2-3 huevos completos (clara + yema) o bien 2-3 yemas y 4-5 claras a semanales.