Carolina Darias en una rueda de prensa en La Moncloa.

Carolina Darias en una rueda de prensa en La Moncloa. Archivo.

España CORONAVIRUS

España elimina la mascarilla en interiores: "No resultará obligatoria" en el trabajo

Los centros escolares y estadios de futbol, tanto en pabellones como al aire libre, serán espacios donde no habrá que usar el método de protección. 

19 abril, 2022 13:43

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La mascarilla en interiores ya es cosa del pasado. El Consejo de Ministros ha aprobado, previa petición de la ministra de Sanidad, Carolina Darias, eliminar la obligatoriedad de su uso en espacios cerrados, a excepción de centros sociosanitarios y transporte público.  

Darias ha explicado en rueda de prensa que esta medida se ha tomado basándose en la situación epidemiológica que hay en España. "Las mascarillas dejan de ser obligatorias porque nos encontramos en un contexto favorable". 

La "altísima cobertura vacunal", el descenso de la gravedad de la enfermedad y los indicadores favorables han sido los detonantes para tomar esta decisión. "El Real Decreto dispone la eliminación de la obligatoriedad de las mascarillas, salvo en determinados entornos", ha puntualizado. 

En los centros, servicios y establecimientos sanitarios será obligatorio llevar mascarilla salvo para las personas que están ingresadas en su habitación del hospital. "En las residencias de mayores no será obligatoria para las personas que vivan en ella, pero sí para las visitas y trabajadores". En las excepciones también está el transporte público, tanto trenes, aviones como barcos, siempre que no sea posible guardar la distancia de seguridad. 

Con la nueva norma, el Ministerio aconseja no utilizar la mascarilla por parte de los alumnos en el ámbito escolar y realizar un uso responsable de la misma entre la población vulnerable en cualquier situación en la que tenga contacto prolongado con personas a distancia menor de 1,5 metros; y profesores con factores de vulnerabilidad.

En relación con el entorno laboral, con carácter general, "no resultará obligatoria". Esto no exime que los responsables de riesgos laborales sí pueden ponerla como una medida "extra".  "Si los servicios de prevención hacen una análisis del riesgo y deciden poner la mascarilla, se pondrá. Pero la norma es que con carácter general no sea obligatoria", ha apuntado Darias. 

Además, las mascarillas ya no serán obligatorias ni en el interior ni en el exterior de partidos de futbol.

"Seguimos superando etapas. La medida es un paso más en la evolución de la pandemia y lo hacemos desde la prudencia y la gradualidad. Las mascarillas han sido una de las medidas más identificables en estos dos años", ha enfatizado la ministra.

Reacciones

La medida va a afectar a todas las regiones del país, tanto si estaban a favor de quitarlas como si no. Es por eso por lo que las reacciones no se han hecho esperar. El consejero de Educación, Universidades y Ciencia y portavoz del Gobierno de la Comunidad de Madrid, Enrique Ossorio, ha considerado que el momento es "favorable" para quitar las mascarillas en interiores, tal y como prevé aprobar el Gobierno este martes, aunque hay que "estar pendientes" de la evolución del Covid-19.

Por su parte, el presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, ha defendido que el hecho de que la mascarilla no sea obligatoria en interiores, a partir de este miércoles, "no quiere decir que en espacios interiores siga siendo conveniente llevarla", como en los que se concentran muchas personas o en los que no hay ventilación.

Desde la sala de La Moncloa, la ministra de Política Territorial y portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, ha celebrado la medida, que "ha sido posible gracias a un trabajo conjunto y un esfuerzo colegiado en el que ha tenido que ver mucho la estrategia de vacunación".

"Es un día muy especial para el Gobierno y el conjunto de los españoles en la lucha contra el virus. Estamos avanzando en la normalidad. Mañana podremos desprendernos en interiores de las mascarillas y mostrar nuestros rostros y nuestras sonrisas", ha aplaudido.

Mientras, el Govern balear ha celebrado "el éxito social" de poder eliminar la obligación de la mascarilla. La consejera de Presidencia, Función Pública e Igualdad, Mercedes Garrido, ha confirmado que en las Islas se mantendrá la obligación de la mascarilla exclusivamente en los centros de trabajo sanitarios y sociosanitarios y en el transporte público.

Dos años

La decisión de este Consejo de Ministros llega 699 días después de que el 21 de mayo de 2020 el Gobierno estableciera, por primera vez, el uso obligatorio de esta protección tanto en espacios cerrados como al aire libre.

Desde entonces, la entrada a los bares, centros comerciales, bancos o supermercados ha estado ligada a la utilización obligatoria de una mascarilla para evitar contagios de Covid-19. Una necesidad que, a partir de este miércoles y tras su publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE), será historia.

No es la primera vez que el Gobierno anuncia la retirada de las mascarillas, aunque sí se estrena en interiores. Tras obligar a su uso en todo tipo de espacios con la primera desescalada, el Ministerio eliminó las mascarillas al aire libre el 26 de junio de 2021.

Fue el anunciado como "el decreto de las sonrisas" y retiraba su obligatoriedad al aire libre siempre que se pudiera guardar una distancia de 1,5 metros. Para poder adaptarse a la ley de nueva normalidad, el Gobierno decidió legislar mediante un Real Decreto ley que debía de ser posteriormente aprobado en el Congreso de los Diputados.

Fue la misma técnica que utilizó cuando las volvió a imponer en exteriores hace apenas unos meses. El inicio de la sexta ola a las puertas de las Navidades y la presión de varias CCAA llevó a Pedro Sánchez a eliminar el decreto de las sonrisas con un nuevo Real Decreto Ley lleno de polémica.

Los expertos no apoyaban al Gobierno ni tampoco varios gobiernos autonómicos que llevaban meses pidiendo que se flexibilizaran las medidas cuando la población apenas estaba vacunada. Aun así, el Ejecutivo siguió adelante y, ante la crispación política, tomó dos decisiones.

Primero anunció en un Consejo de Ministros extraordinario previo a Navidades la norma de la vuelta de las mascarillas a la calle. Era similar al que se había redactado para quitarlas en junio, pero con un apunte: si se aprobaba este Real Decreto ley, el Gobierno no debería de volver a pasar por el Congreso de los Diputados para quitar o poner la mascarilla.

La medida fue controvertida, aunque coló. Y es que el Ejecutivo presentó un RD Ley que obligaba a los grupos contrarios a imponer la mascarilla a votar a favor de ello. Lo hizo uniendo a la medida Covid, otra que beneficiaba a los más vulnerables: una paga extra a las pensiones para compensarlas con el IPC de 2021.

Dos meses después, el 8 de febrero, el Consejo de Ministros usó el poder que había conseguido en el Congreso para eliminar (de nuevo) el empleo de mascarillas al aire libre. Lo hizo previo paso por el Consejo Interterritorial y obteniendo su bendición pese a no le era necesario.

Igual que ocurrió en el Consejo Interterritorial del pasado 6 de abril, Darias sólo tiene obligación de dejar constancia de la decisión ante las CCAA para, posteriormente, llevar al Consejo de Ministros su aprobación. Es por eso por lo que el punto no estaba incluido en el orden del día, no precisaba de votación alguna.