Gabriel Cañadas, encargado de B&M Árboles de Navidad.

Gabriel Cañadas, encargado de B&M Árboles de Navidad. Antena 3

Sociedad

Gabriel Cañadas, dueño de una empresa de árboles de Navidad con 30 años de antigüedad: "De marzo a verano está parado"

En la antesala de las fiestas navideñas, se produce un auge del alquiler de árboles naturales para darle un toque especial a la casa para las fiestas.

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Las claves

Gabriel Cañadas dirige una empresa madrileña de alquiler de árboles de Navidad con 30 años de experiencia, cuyo negocio es estacional.

La actividad principal se concentra en la campaña navideña, aunque los contactos y pedidos comienzan desde septiembre para preparar la temporada.

Durante el resto del año, la empresa diversifica su oferta con otros productos y servicios, como el alquiler de árboles para bodas y producciones audiovisuales.

El servicio de alquiler permite a los clientes disfrutar de árboles naturales durante las fiestas, devolviéndolos tras el Día de Reyes.

Se acerca la Navidad y mucha gente ya ha colocado el tradicional árbol navideño en el salón de su casa. Otros, prefieren esperarse al último momento. Así, los negocios de alquiler de árboles de Navidad están en el momento del año más importante para su facturación.

Este tipo de establecimientos juega con la desventaja de que sus productos son estacionales, por lo que el resto del año no pueden vivir de ello. Esto es lo que le ocurre a Gabriel Cañadas, dueño de B&M Árboles de Navidad, ubicada en Madrid y que cuenta con 30 años de historia a sus espaldas.

"El resto del año tenemos otros negocios. Es verdad que desde marzo hasta verano esto está prácticamente parado", revela el encargado de la tienda a los Servicios Informativos de Antena 3.

Empiezan a cerrar pedidos en septiembre

En consecuencia, el resto de meses del año tienen que reinventar su oferta porque el alquiler de abetos se reduce de forma imparable, por lo que tienen que vender otro tipo de productos.

Relata que la estrategia de ventas arranca en septiembre, en la recta final del verano porque comienzan los pedidos y es clave tener todo listo de cara a las fiestas de la Natividad. "Empezamos a hacer campaña en Navidad, pero los contactos telefónicos comienzan en septiembre".

Durante el año, como excepción, "uno o dos árboles salen para producciones audiovisuales, pero el resto nada", afirma. Eso sí, insuficiente para generar ingresos suficientes en primavera y verano. Otra opción de monetización son las bodas, ya que muchas parejas optan por alquilar árboles para decorar el evento donde se va a tener lugar su enlace.

La empresa de decoración navideña que gestiona Gabriel muestra en su catálogo de la página web figuras, centros de mesa o belenes, siendo los árboles, disponibles en distintos colores, el buque insignia del negocio.

Existen muchos comercios que también dependen expresamente de la estación del año en la que nos encontremos. En heladerías o en empresas de contratación de socorristas, por ejemplo, el estar en verano o en invierno supone una diferencia sustancial.

El alquiler de árboles consiste en la oferta de piezas naturales para uso temporal, es decir que el cliente paga por tener el árbol durante unos días o semanas y después lo devuelve al finalizar el contrato, en este caso probablemente en enero después del Día de Reyes el 6 de enero.