Editorial EDITORIAL

Castilla-La Mancha afronta el verano político más intenso y decisivo

26 junio, 2017 00:00

Dos razones fundamentales convierten a este verano en el más intenso y decisivo en Castilla-La Mancha. Por un lado, el Gobierno de Emiliano García-Page necesita urgentemente aprobar los Presupuestos regionales que llevan bloqueados varios meses, cerrando así la crisis institucional y política que vive la comunidad, y por otro, el propio presidente de la Junta y secretario regional del PSOE necesita despejar cuanto antes su propio futuro político, ensombrecido por la victoria de Pedro Sánchez en las primarias socialistas.

En ambos casos, el proceso parece iniciado para culminarlo de manera mínimamente satisfactoria, aunque en el ánimo de buena parte de la política regional pesa la idea de unas posibles elecciones autonómicas anticipadas que pondrían fin a esta legislatura que tanto se le ha complicado a Page. El presidente de la Junta ha puesto en marcha ya los mecanismos de negociación de unos nuevos Presupuestos, ya veremos finalmente si con el apoyo de algún grupo de la oposición o no, a la vez que empieza a diseñar su futuro político con vistas al congreso del PSOE castellano-manchego que se celebrará en el otoño y en el que quiere ser el candidato único a la reelección. A Page ambas cosas pueden salirle bien, como es previsible, o no..., pero no cabe duda de que el escenario es complejo. 

El verano, por tanto, se presenta políticamente con una intensidad desconocida en este periodo del año y más interesante que nunca. De lo que pase en los próximos tres meses dependen muchas cosas en Castilla-La Mancha, entre ellas el propio futuro político del presidente Page, actualmente situado en uno de los momentos más complicados de su carrera política y lleno de incertidumbres.