El partido entre el Atlético de Madrid y el Real Madrid no dejó mucho que reseñar en lo deportivo. El equipo de Carlo Ancelotti, plagado de suplentes y jugadores a medio gas, se dejó ir en favor de los de Simeone, que arañaron una victoria tras un penalti dudoso de Vallejo sobre Cunha que les sirve para amarrarse a la Champions. 

Sin embargo, si dio mucho de qué hablar en las gradas, especialmente con un suceso lamentable que tuvieron que vivir dos aficionados blancos. Un padre y su hijo pequeño tuvieron que sufrir los insultos y las amenazas de parte de la hinchada rojiblanca durante un momento del partido que, además, terminó de la peor manera posible. 

Los dos aficionados blancos fueron expulsados del Estadio Wanda Metropolitano por la seguridad para evitar males mayores a pesar de que ellos estaban siendo los agredidos verbalmente. El padre llevaba al cuello una bufanda del Real Madrid mientras que su hijo portaba una camiseta de Cristiano Ronaldo durante su etapa en el club blanco. 

Simplemente por eso, la zona de la grada del Atlético de Madrid ya consideraron su presencia como una provocación y empezaron a insultar a los dos aficionados hasta que consiguieron su propósito, echarles de la zona que estaban ocupando. Una situación lamentable y ante la que muchos esperan que el club colchonero dé explicaciones. 

Tras unos momentos de tensión y de incertidumbre, las imágenes captadas por las cámaras de televisión que cubrían la retransmisión del partido evidenciaron la gravedad del asunto. Se puede ver como el padre coge a su hijo y le acompaña escaleras arriba mientras un agente de seguridad les invita a abandonar el estadio. 

Ambos suben por las escaleras de uno de los pasillos del graderío del Wanda Metropolitano mientras son increpados por el resto de la grada. Al grito de "¡vikingos no!" y "¡madridistas hijos de puta!", tal y como se escucha en los vídeos del momento, la hinchada rojiblanca prosiguió con su acoso y derribo de estos dos madridistas que pretendían seguir el partido de su equipo en casa uno de los máximos rivales. 

Otro hecho lamentable

Sin embargo, en lugar de encontrar la cordialidad que debe reinar en este tipo de partidos, se encontraron hostilidad, insultos y faltas de respeto. Una situación lamentable además teniendo en cuenta que el partido tenía una cierta calma en cuanto a lo deportivo al llegar ya el Real Madrid como campeón de Liga y sin nada que jugarse en la competición doméstica. 

Esta polémica se une a las protagonizadas por el conjunto rojiblanco en las últimas horas cercanas al Derbi. Desde la decisión de no realizar el tradicional pasillo a los campeones hasta la provocativa e insultante pancarta que se pudo exhibir en el Estadio Wanda Metropolitano en los instantes previos al inicio del choque. Ahora se une el mal rato que tuvieron que pasar este padre y este hijo en otro bochornoso espectáculo protagonizado por parte de la afición atlética. 

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