Image: El infinito en la palma de la mano

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Novela

El infinito en la palma de la mano

Gioconda Belli

28 febrero, 2008 01:00

Foto: Domenec Umbert.

Premio Biblioteca Breve. Seix Barral, 2008. 321 pp., 21,90 e.

Gioconda Belli obtuvo, con esta novela -si así puede catalogarse-, el premio Biblioteca Breve de 2008, 50 años más tarde de que el primero se concediera en Sitges el 14 de junio de 1958. De aquel primer jurado resta sólo con vida Josep Mª Castellet. La novela premiada fue entonces Las afueras, de Luis Goytisolo. Un paréntesis, entre 1971 y 1999, evidencia los avatares del mítico premio que descubrió a algunos escritores del llamado boom y de dicha editorial. La autora premiada, nacida en Managua (Nicaragua), es poeta reconocida, con un variado repertorio de libros, iniciados con Sobre la grama (1974) y alguno que alcanzó, ya en España, el premio Ciudad de Melilla en 2006, Espada puesta lejos. En De la costilla de Eva (1986), que desconozco, tal vez muestre ya el interés de la autora por el símbolo femenino. Su primera novela, La mujer habitada (1988) parece incidir en esta cuestión. Con El país bajo mi piel (2001) reúne sus memorias del período sandinista.

Como señala al inicio del libro en una "Nota" (al final se precisan algunas fuentes utilizadas, incluida Wikipedia), la idea de reconstruir el drama de Adán y Eva en el Paraíso Terrenal fue "el resultado de un hecho fortuito". Según asegura, investigó más tarde en fuentes y diversos libros interpretativos, aunque predomine la inspiración bíblica. Pero ¿puede calificarse este relato como novela, según precisa su autora? Parece inútil a estas alturas discutir la naturaleza de un género tan híbrido como voluble. El texto de Gioconda Belli destaca por su imaginación, por algunas indagaciones psicológicas, por el estilo poético de sus descripciones, a veces casi surrealistas, no sólo cuando sus personajes habitaron el Paraíso, ni en sus relaciones con Elokin, nombre con el que designa a Jehová. Sin embargo, la trama nos resulta de sobra conocida, puesto que sigue el desarrollo bíblico: Eva procede físicamente de Adán e incitada por la serpiente come de la fruta prohibida. La pareja humana es castigada con la pérdida del Paraíso y la muerte. El descubrimiento del propio cuerpo y sus necesidades, de cuanto les rodea, la necesidad de supervivencia, el amor, la ira y el problema con los hijos e hija vienen a constituir la trama fundamental con unas originales páginas que cierran el relato por las que tal vez se pretenda justificar una narración construida mediante personajes-símbolos, convertidos en mitos por la religión judeo-cristiana.

El lector conoce, pues, la trama de antemano. Lo que añade la autora son descripciones líricas, reflexiones morales, un procedimiento narrativo que enlaza con los arquetipos. Todo en Adán, Eva, sus hijos e hijas es previsible, salvo las últimas páginas. ¿Pueden justificar el libro? Bien es verdad que los personajes se mueven en un ámbito que enlaza con la prehistoria humana: las pinturas de la cueva por parte de Eva, el afán cazador de Adán o las dudas que su propia existencia les impone. La mítica se implica en una historia imaginaria. La autora se mueve en los vagos ámbitos de una poética personal femenina.

Determinante resultará la figura de Luluwa, hija de Eva, que se aparejará con Caín, porque ha de servirle para introducir una reflexión sobre la belleza femenina, frente a Aklia, su otra hija, la más interesante de las claves. La muerte de Abel, presentada desde la perspectiva de Luluwa, disminuirá el sentido de una culpabilidad, de la que no queda exenta el incesto. La desaparición del jardín del Paraíso observada por Adán y Eva es una eficaz muestra de surrealismo poético. Pero el conjunto del libro de Belli, designado como novela, no deja de ser una muestra de prosa lírica, de psicologías tópicas, de artificiosidad. Queda a mucha distancia de aquellos renovadores premios de antaño. Se trata de una elaboración sobre textos, lo que no cabe entender como negativo. Sin embargo, el resultado no escapa de una versión almibarada del asunto. La imaginación no permite experiencias tan radicales, salvo en autores excepcionales, pero el texto de Gioconda Belli posee escaso interés. El lector puede recurrir al libro del Génesis y, pese a la brevedad con que se resume la aparición de la pareja humana, dispondrá de la mítica suficiente, como puede observarse en la pintura y hasta en el teatro que han derivado. No ha sido este premio Biblioteca Breve un hallazgo.