Bob Woodward. Foto: Jay Godwin

Bob Woodward. Foto: Jay Godwin

Letras

Woodward contra el caos: Biden, Trump y la guerra que define una era

El veterano periodista disecciona la política exterior de Estados Unidos bajo la presidencia de Biden, con Putin, Netanyahu y Trump como antagonistas.

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A. O. Scott
Publicada

Una de las consecuencias modernas de ser presidente de Estados Unidos es que Bob Woodward (Illinois, 1943) escriba al menos un libro sobre tu administración. En los últimos 30 años, Clinton y Obama han protagonizado dos cada uno, mientras que las presidencias de George W. Bush y Donald J. Trump completan sendas trilogías.

Guerra

Bob Woodward

Traducción de José C. Vales. La Esfera, 2025. 400 páginas. 23,90€

Como senador y vicepresidente, Joe Biden fue un actor secundario en muchos de esos libros y el coprotagonista de Peligro, el último volumen sobre Trump, que Woodward escribió con Robert Costa y que cubría las elecciones de 2020 y los disturbios del 6 de enero en el Capitolio.

Ahora, con Guerra, Biden tiene su propia crónica. Es un libro extraño: menos seguro de lo narrado, repleto de incidentes y, sin embargo, extrañamente distante del caos del mundo tal como lo conocemos.

La presidencia, un cargo famoso por su soledad, es todo menos solitario para Woodward. En cada libro, el presidente aparece rodeado de funcionarios, asistentes y asesores, algunos de los cuales son fuentes del periodista. Sin embargo, Biden comparte sobre todo el escenario con otros jefes de Estado: Putin, Netanyahu y, sobre todo, Donald Trump.

Guerra comienza en 1989 con Trump —un hombre de negocios de 42 años— charlando con Woodward y Carl Bernstein. Una transcripción de esa entrevista, descubierta en 2023, revela, según Woodward, "el origen del trumpismo en palabras del propio Trump". Entonces, como ahora, "su personalidad se centraba en ganar, luchar y sobrevivir". En un libro dedicado a la diplomacia de la era Biden, la historia de la última campaña presidencial de Trump es una subtrama que amenaza con convertirse en el evento principal.

El talento de Woodward es imponer un arco argumental y una moraleja del caos y la expansión de la historia 

Muchos de los titulares que ha generado Guerra se han centrado en sus afirmaciones de que Trump, siendo presidente, envió pruebas de covid a Putin y, tras dejar el cargo, mantuvo varias conversaciones telefónicas con el presidente ruso. Pero la verdadera noticia que Woodward quiere presentar es cómo Biden trató con Putin antes y después de la invasión de Ucrania y con Netanyahu tras los ataques de Hamás del 7 de octubre, y cómo "preservó la seguridad nacional" durante tres tumultuosos años.

La acción se extiende desde principios de 2021 hasta el verano pasado, desde las agitadas semanas previas a la investidura de Biden hasta las turbulentas consecuencias de su retirada de la campaña de 2024. Pero a Woodward no le interesan las elecciones ni la ideología. Su tema es la alta política, el ejercicio del poder en sus más altas esferas. En Guerra, la presidencia de Biden se define por su gestión de Ucrania y Oriente Medio.

En el caso de Ucrania, tras un sorprendente acierto de la inteligencia estadounidense, que reveló el plan de guerra de Putin, la Administración tuvo que convencer a sus aliados —y al presidente Zelenski— de la gravedad de la amenaza. Una vez que las tropas rusas avanzaban hacia Kiev, la tarea consistió en reforzar a Ucrania, evitando la participación directa de las fuerzas de la OTAN y previniendo una posible escalada nuclear.

Desde que se publicó el libro en EE. UU., Rusia ha vuelto al ataque en Ucrania. El conflicto en Oriente Medio se ha extendido para incluir a Hezbolá e Irán, un desenlace que Biden y su equipo intentaron evitar.

El impulso —el talento— de Woodward es imponer un arco argumental y una moraleja al caos y la expansión de la historia reciente. En esta ocasión, sus conclusiones son inequívocas: "Donald Trump no solo no es el hombre adecuado para la presidencia —escribe—, sino que no es apto para dirigir el país". En cambio, "Biden y su equipo serán ampliamente estudiados en la historia como un ejemplo de liderazgo firme y decidido". Esos juicios suenan autoritarios. También ilusorios.