Image: Fernando Benzo sustituye a Lassalle como secretario de Estado de Cultura

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Letras

Fernando Benzo sustituye a Lassalle como secretario de Estado de Cultura

El nuevo 'número dos' de Méndez de Vigo es un experimentado gestor que ejercía hasta ahora como subsecretario de Educación. Tiene por delante retos como el IVA cultural, la Ley de Mecenazgo y el canon digital

18 noviembre, 2016 01:00

Fernando Benzo

El secretario de Estado de Cultura, José María Lassalle, ha sido relevado de su cargo este viernes. En su lugar, el Ministro de Educación, Cultura y Deporte, Íñigo Méndez de Vigo, ha designado durante el consejo de ministros a Fernando Benzo, que hasta ahora ejercía como subsecretario de Educación. Desde ese puesto, fue uno de los hombres de confianza del anterior ministro, José Ignacio Wert, y continuó en el cargo tras la llegada de Méndez de Vigo en junio de 2015. Hoy toma las riendas de Cultura ahora que el ministro ha sumado a sus responsabilidades la portavocía del Gobierno. Benzo (Madrid, 1965) es licenciado en Derecho por la Universidad Pontificia de Comillas, miembro del Cuerpo Superior de Administradores Civiles del Estado y tiene una dilatada carrera como gestor. Ha trabajado anteriormente en los Ministerios de Justicia e Interior. En el Ministerio del Interior, entre los años 1996 a 2000, ocupó sucesivamente los puestos de asesor de Gabinete del Ministro, director de Gabinete del Secretario de Estado de Seguridad y secretario General Técnico. En el año 2002, en el marco del Pacto por las Libertades y contra el Terrorismo, PP y PSOE acordaron encargarle la puesta en marcha de la Fundación de Víctimas del Terrorismo, de la que fue su director hasta el año 2007. Tras dirigir durante año y medio el estudio de arquitectura de Santiago Calatrava, fue asesor en el Grupo Popular del Parlamento Europeo hasta enero de 2012, cuando fue nombrado subsecretario del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. Durante la pasada legislatura ha estado permanentemente involucrado en la actividad de la Secretaría de Estado de Cultura y ha formado parte del Patronato de instituciones culturales como el Museo Nacional del Prado, el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, el Teatro Real, el Museo Thyssen o la Biblioteca Nacional de España. También fue el encargado de coordinar el plan estratégico de tauromaquia que ha conseguido derogar en los últimos meses algunas prohibiciones taurinas locales y autonómicas. Junto a su actividad en la Administración Pública ha escrito varias novelas y una colección de relatos breves con las que ha obtenido premios literarios, entre los que destacan el Premio Max Aub de Relatos Breves o los premios de novela Kutxa-Ciudad de Irún, Ciudad de Majadahonda o Castilla-La Mancha, así como una obra de teatro.

El palmarés de Lassalle

En el entorno de Lassalle se especula con la posibilidad de que conserve algún cargo dentro del Gobierno. Durante la mayor parte de su etapa como secretario de Estado -fue nombrado en diciembre de 2011-, Lassalle se ha dedicado a interceder por los intereses del sector cultural estrellándose invariablemente contra los obstáculos impuestos por el anterior ministro, José Ignacio Wert, y sobre todo por el de Hacienda, Cristóbal Montoro. Al mismo tiempo, le tocó la papeleta de defender ante el sector, los ciudadanos y los medios los drásticos recortes presupuestarios ejecutados por el Gobierno en materia de cultura. La primera vez fue en abril de 2012, cuando tuvo que anunciar un recorte del 15% en los Presupuestos Generales del Estado con respecto a los del ejercicio anterior. En aquella ocasión trató de suavizar el golpe argumentando que Cultura mantenía intacta su importancia relativa porque seguía representando un 0,3% del total de los PGE, y que además el Estado sólo gestionaba un 16% de todo el dinero público destinado a la cultura, administrado mayoritariamente por las comunidades autónomas y los ayuntamientos. Poco después del primer recorte en el presupuesto de la Secretaría de Estado de Cultura, Lassalle anunció otro tijeretazo de 20 millones de euros en julio de 2012. También en 2012 Lassalle anunció un plan estratégico para la cultura cuyo hito principal sería una Ley de Mecenazgo que nunca llegó. El secretario de Estado se pasó media legislatura retrasando la fecha de su redacción a la espera de que Hacienda diera luz verde al proyecto. Llegó a decir en marzo de 2013 que el semáforo ya estaba "parpadeando en ámbar", pero finalmente tuvo que reconocer en septiembre de 2014 que no habría ley. En su lugar se aprobaron una serie de medidas dentro de la Ley de Reforma Fiscal. Al principio Lassalle prometió desgravaciones de impuestos de hasta el 70 % del dinero destinado por empresas y particulares al mecenazgo cultural, pero finalmente se quedaron en una estrecha franja comprendida entre el 25 y el 35 %. Lassalle también fue el heraldo de la polémica subida del IVA aplicado a los espectáculos, que pasó del 8% al 21% en septiembre de 2012 y que afecta sobre todo al cine, al teatro, a la danza y a la música. Los representantes de las industrias culturales pusieron unánimemente el grito en el cielo y actualmente esta cuestión sigue constituyendo la principal causa de enfrentamiento entre los profesionales del sector y el Gobierno. Antes de las elecciones del 20 de diciembre de 2015, Lassalle anunció que el PP bajaría el IVA cultural al 10 %, una promesa de la que ahora tendrá que hacerse cargo Fernando Benzo. El último fracaso político de Lassalle ha llegado hace una semana, con la sentencia del Tribunal Supremo que declara "nulo" e "inaplicable" el sistema que se aplica desde 2012 para compensar económicamente a los autores por las copias privadas de sus obras. Este modelo sustituyó el canon digital -el gravamen aplicado a los dispositivos electrónicos- por un cargo directo a los Presupuestos Generales del Estado. El fallo del Supremo considera que este método penaliza a todos los contribuyentes, cuando solo debería afectar a los usuarios de las copias. Tras conocer la sentencia, Méndez de Vigo anunció que el Gobierno estudiará un sistema alternativo, que será otra de las primeras tareas que deberá asumir Fernando Benzo.