Image: Leonor Watling: “Marlango es un vicio, un lujo y una necesidad para mí”

Image: Leonor Watling: “Marlango es un vicio, un lujo y una necesidad para mí”

Escenarios

Leonor Watling: “Marlango es un vicio, un lujo y una necesidad para mí”

3 julio, 2015 02:00

Leonor Watling, junto a Alejandro Pelayo, los componentes de Marlango.

Marlango, el grupo de Leonor Watling, celebra una década sobre el escenario este sábado en el Teatro Circo Price, dentro de la programación de Los Veranos de la Villa.

Leonor Watling (Madrid, 1975) acaba de llegar a Madrid desde Montevideo, último destino hasta la fecha de la extensa gira en la que se encuentra inmerso el grupo Marlango, que forma junto al músico Alejandro Pelayo. "No sé muy bien ni donde estoy", confiesa la actriz y cantante, que pese al jet lag no pierde el buen humor ni un solo momento a lo largo de la entrevista. No es para menos porque Marlango celebra sus diez años sobre los escenarios este sábado con un concierto en el Teatro Circo Price, que se enmarca dentro de la programación de Los Veranos de la Villa. En el show repasarán canciones de todos sus discos con la colaboración de invitados especiales como Coque Malla y Bebe y el trompetista Roqui Albero, que tratará de paliar la ausencia de Oscar Ybarra, el tercero en discordia dentro del grupo hasta que hace dos años decidiera buscar un nuevo rumbo en Chicago. Con Waitling repasamos la trayectoria del grupo.

- ¿Qué tal los conciertos en Argentina y Uruguay?
- Muy bien la verdad... Es la quinta vez que tocamos en Buenos Aires y la primera vez que íbamos a Uruguay. Siempre es una gozada sacar las canciones de contexto y tocar en otros sitios, aprendes y disfrutas mucho.

- ¿Genera mayor incertidumbre tocar en otros países?
- Realmente no. La gente que va al concierto normalmente nos conoce pero sí es algo distinto porque el público a lo mejor no te ha visto nunca. Por eso la emoción es diferente.

- ¿Cómo va a ser el concierto del sábado en el Teatro Circo Price?
- Tenemos la ilusión de que sea especial. Hace dos años que no tenemos trompeta sobre el escenario porque Óscar se fue a vivir a Chicago pero el sábado contaremos con la presencia de Riqui Albero, un trompetista maravilloso que nos aportará un plus para las canciones de los primeros discos. Después, vamos a secuestrar un ratito a Coque Malla y a Bebe que son dos artistas a los que admiramos muchísimo. Tenemos muchas ganas de tocar en el Circo Price por tercera vez y hacerlo en el marco de Los Veranos de la Villa siempre es una alegría.

- ¿Recuerda con que espíritu comenzó este proyecto?
- Sí, claro. El espíritu es el mismo que seguimos teniendo a día de hoy. Es un vicio, un lujo y una necesidad y la verdad es que sigue siéndolo, en ese sentido no ha cambiado nada.

- ¿Pensaban llegar tan lejos con el grupo, ya con seis discos publicados?
- Nunca nos hemos marcado objetivos concretos... Que es lo mismo que decir que teníamos millones de objetivos cuando empezamos. Al final lo que siempre hemos hecho Alejandro y yo es inventarnos un mundo mejor y curarnos la heridas. Aunque es un punto de partida bastante egoísta es algo que haríamos aunque estuviera prohibido. Con las primeras canciones lo único que queríamos era grabarlas bien, con buenos músicos y que salieran adelante. Pero unas canciones te llevan a otras y, cuando te vas de gira, quieres más. Es algo parecido a lo que le ocurre al jugador de póker que siempre encuentra una manera de echar unas manos ya sea en un piso secreto o en un gran casino.

- Al principio les llegó el éxito de manera casi instantánea. ¿Cómo vivieron esa experiencia?
- Fue muy raro. Esta repercusión nos llevó a dejar de hacer planes y nos olvidamos de intentar encontrar lógica a todo lo que nos pasaba.

- ¿El cambio de idioma en los dos últimos discos se puede considerar un punto de inflexión en la trayectoria del grupo?
- Por un lado sí, porque el idioma modifica las reglas del juego a la hora de componer. Cambia la manera de trabajar, la artesanía... Una vez que has encontrado la armonía o la melodía, el acabado es muy distinto del inglés al español. Sin embargo, la esencia sigue siendo la misma y de no ser así no hubiésemos cambiado de idioma. Hemos tardado cuatro discos en encontrar nuestra voz en castellano aunque en la primera gira ya hacíamos versiones de Nacho Mastretta, Los Amaya, Radio Futura, Golpes Bajos... Ha sido muy gradual.

- Beben de influencias musicales muy variadas... ¿Cómo hacen para que cuadre todo en su justa medida dentro del disco?
- En realidad es más fácil y más inconsciente de lo que parece. Las canciones se dirigen hacia el sitio en el que suenan bien de una manera natural. Puedes intentar que un tema sea un blues pero si no quiere da igual cuanto empujes que no va a caer de ese lado. En el estudio respetamos mucho el lugar natural de la canción. Además tenemos la suerte de colaborar con grandes músicos. Nuestro último disco, El Porvenir, lo grabamos en Los Ángeles y los músicos eran increíbles aunque cuando trabajamos en España también son maravillosos. Al final todo es bastante orgánico, cuando algo funciona se nota enseguida. No hay nada premeditado a la hora de trabajar.

- Más allá de la propia música, ¿qué inspira a Marlango?
- La literatura, el cine... Alejandro y yo muchas veces nos comunicamos por imágenes. También la vida, por ejemplo, las cosas que dice una señora que está sentada a tu lado en un café...

- ¿En todos estos años cuál ha sido el momento más especial del grupo?
- Es muy difícil responder a esta pregunta porque hemos tenido mucha suerte, en 10 años hemos hecho casi 1.000 conciertos... Uno de los primeros, en Sevilla, fue muy especial y el último en el Lunario en México, que subió a cantar Miguel Bosé, o el último en Buenos Aires con Fito Páez... También hay conciertos a los que vas muy relajado, como en Plasencia hace un mes, que acaban siendo muy especiales. Siempre estamos muy abiertos a experimentar en los directos, no llevamos un setlist clavado. Las canciones tienen una estructura pero no nos cerramos a nada, en un momento dado nos miramos y seguimos tocando. Cada concierto está vivo.

- ¿Qué consejo le daría a la Leonor Watling de hace 10 años?
- Tantas cosas... Que disfrutara más el momento.

- El Porvenir os está dando todavía muchas alegrías. Su título parece indicar que no os gusta mirar al pasado...
- Realmente no sirve de mucho. En nuestro día a día tenemos una sensación más de ahora, de presente y de un futuro a corto plazo.

- ¿Cómo ve el porvenir de la música en España?
- La música es una necesidad humana y hay músicos maravillosos haciendo cosas maravillosas, con más o menos dificultad, con más o menos IVA, con más o menos público... Siempre vamos a estar tocando porque no te queda más remedio, eres lo que eres. Hay cosas maravillosas sucediendo en la música ahora mismo en España.

- ¿Vamos a verla pronto en la gran pantalla?
- Ahora no estoy rodando nada pero en enero estreno Risen, una película con Joseph Fiennes. Estoy leyendo guiones. El cine me encanta, me sigue gustando muchísimo.

@JavierYusteTosi