Matt Smith y Austin Butler en 'Bala perdida'.
'Bala perdida', Aronofsky se divierte en la Nueva York de los 90 con un homenaje a la joya olvidada de Scorsese
El director de 'La ballena' y 'Cisne negro' estrena una comedia negra que recoge el espíritu de 'Jo, qué noche', protagonizada por un sobresaliente Austin Butler.
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Nueva York a finales de los 90. La sombra de Rudy Giuliani sobrevuela implacable por la ciudad mientras el olor a basura se cuela por las esquinas como un mal presagio del nuevo milenio.
La gentrificación ya hace de las suyas en barrios como el Lower East Side y la gran manzana lucha por su autenticidad.
Hasta ahí nos lleva el arriesgado cineasta Darren Aronofsky (Nueva York, 1969) con su última película. Acostumbrados a su filmografía basada en el sufrimiento más retorcido con La ballena (2022), Madre (2017), Cisne negro (2010) o Réquiem por un sueño (2000), se podría decir que Bala perdida, que se estrena este viernes, es su filme más comercial y también el más divertido.
Especialmente para aquellos que siempre han creído que Jo, qué noche (1985), que ha cumplido cuatro décadas este año, este es una de las grandes joyas olvidadas de Martin Scorsese.
Porque la película de Aronofsky, aunque basada en la novela homónima de Charlie Huston, funciona como una secuela noventera de esa epopeya nocturna protagonizada por Griffin Dunne.
Solo que ahora Dunne no es el pringado protagonista, sino el dueño de un bar donde trabaja una nueva víctima de los vicios neoyorquinos: Hank Thompson (Austin Butler), un exjugador estrella de béisbol.
Tras un traumático accidente, el personaje deja el deporte en la soleada California y se da a la bebida en Nueva York. Su vecino, un punki inglés aparentemente inofensivo (Matt Smith, excéntrico por naturaleza) le pide que le cuide el gato mientras está fuera.
Lo que Hank no sospecha es que el felino lleva tras de sí a la mafia rusa, a un puertorriqueño (Bad Bunny apuntándose otro pinito en el cine) y a dos sanguinarios gángsteres judíos (Vincent D’Onofrio, el recluta patoso de La chaqueta metálica y Men in Black, y Liev Schreiber).
Parece un chiste, pero acaba siendo una pesadilla de la que no puede despertarse. El caos y la violencia, también un símbolo inequívocamente neoyorquino, terminan por apoderarse tanto de su sexi romance con Yvonne (Zoë Kravitz), como de esa vida ordinaria entregada a los partidos de los Giants.
'Bala perdida' funciona como una secuela noventera de 'Jo, qué noche', la epopeya nocturna de Scorsese protagonizada por Griffin Dune
Mientras que Scorsese filmó el disparatado frenetismo de la ciudad en los ochenta, Bala perdida presta más atención a la sordidez de la corrupción policial, uno de los males que trajo la alcaldía de Giuliani.
Sin despegarse de su nuevo amigo felino, Hank encuentra en esta aventura involuntaria una forma de resarcirse de su tormentoso pasado y alzarse como antihéroe de la película.
Como protagonista, Butler esquiva estoico cada bala y demuestra de nuevo por qué es uno de los grandes actores de su generación. Por primera vez, le vemos encarnando a una persona “normal”, sin necesidad de desplegar los altos niveles de intensidad que vimos en Elvis (Baz Luhrmann, 2022).
Con guiños al universo de Scorsese, persecuciones al estilo de Guy Ritchie, una muy buena banda sonora a cargo de Idles e inteligentes giros de guion, Aronofsky se estrena en la comedia (negra) con un thriller sin su habitual virtuosismo indulgente, pero efectivo. Por fin, ha decidido divertirse.
Bala perdida
Dirección: Darren Aronofsky. Guion: Charlie Huston. Intérpretes: Austin Butler, Matt Smith, Zoë Kravitz, Griffin Dunne. Año: 2025. Estreno: 10 de octubre