Cristina Banegas y Maricel Álvarez en  'La llegada del hijo'

Cristina Banegas y Maricel Álvarez en 'La llegada del hijo'

Cine

¿Puede una madre amar a su hijo asesino?: Atán y Pivato plantean la pregunta en 'La llegada del hijo'

En la película, que podría servir como complemento al fenómeno 'Adolescencia', el duo de cineastas argentino cuestiona el instinto materno con una historia incómoda de culpa, silencio y vínculos tóxicos.

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En los últimos tiempos, varios filmes han cuestionado la idea de la maternidad como territorio de dicha y felicidad, ofreciendo una mirada más honesta y compleja, como ocurría en la reciente Salve María (2024), en donde Mar Coll aborda con misterio y riesgo un tema tan peliagudo como la depresión postparto.

La llegada del hijo, segunda película del dúo argentino conformado por Cecilia Atán (Buenos Aires, 1978) y Valeria Pivato (Buenos Aires, 1973) tras La novia del desierto (2017), arranca precisamente con el alumbramiento por cesárea de Sofía (Maricel Álvarez) en plano subjetivo, acompañado por su voz en off, que explica sus sensaciones al ver a su bebé: "Sentí alegría y horror a la vez". Una línea bastante reveladora.

La película salta 20 años en el tiempo para introducir en este retrato de la maternidad la variante del hijo criminal, por lo que podría servir de complemento al fenómeno de Netflix Adolescencia (Stephen Graham, Jack Thorne; 2025), más allá de que los rasgos estilísticos de una y otra obra estén notoriamente alejados.

Si la serie apostaba por la pirotecnia del plano secuencia y la explotación de lo emocional desde la visceralidad –ese último capítulo– para tratar de ofrecer una visión de conjunto del tema (familia, escuela, policía, servicios sociales…), Atán y Pivato optan por un estilo frío que trata de capturar el estado psicológico de una madre que tiene que lidiar con un duelo secreto.

La llegada del hijo arranca con Sofía recogiendo en coche a su hijo Alan (Ángelo Mutti Spinetta) de la cárcel. La comunicación brilla por su ausencia, lo que remarca que el silencio entre ambos es la punta del iceberg de un enfrentamiento sin resolver.

Atán y Pivato, con un guion que se sostiene más en lo que se calla que en lo que se dice, y con la inestimable ayuda del director de fotografía Sergio Armstrong, construyen una película asfixiante con aire de thriller, que juega con la estructura temporal para dosificar los detalles de una trama que se interna por realidades realmente incómodas.

Todo es líquido, viscoso y contradictorio en la manera en la que las directoras ponen en cuestión las ideas de responsabilidad, fidelidad y protección maternal.

Retrocediendo en el tiempo, vemos primero a una mujer que no es capaz de retomar el vínculo con su hijo asesino, perseguida tanto por la culpa como por el miedo y el asco; después, a una mujer incapaz de afrontar que su vástago haya cometido un atroz asesinato; y, por último, a una mujer que no sabe poner límites en su relación con su hijo, que se nos presenta como ligeramente incestuosa.

"La película podría servir de complemento al fenómeno de Netflix 'Adolescencia', al abordar la variante del hijo criminal"

Esto se completa con el retrato de una clase social de posición elevada, fuertemente conservadora, en la que algo como una relación homosexual puede generar el peor de los estigmas.

Todo ello resulta convincente gracias al misterio que emana de la interpretación de Maricel Álvarez, omnipresente durante todo el metraje.

La llegada del hijo

Dirección y guión: Cecilia Atán y Valeria Pivato

Intérpretes: Maricel Álvarez, Angelo Mutti Spinetta, Greta Fernandez, Cristina Banegas

Año: 2024

Estreno: 9 de mayo