Penélope Cruz y Javier Bardem en una foto de archivo. Foto: Europa Press

Penélope Cruz y Javier Bardem en una foto de archivo. Foto: Europa Press

Cine

Premios Óscar: ¿Una oportunidad perdida para el cine español?

Llegamos a la gala de los Óscar con cuatro españoles nominados, pero no es descabellado pensar que hubieran sido cinco si la Academia de Cine hubiera apostado por 'Madres paralelas'

27 marzo, 2022 04:29

La 94 edición de los Premios Óscar tiene grandes alicientes para el espectador español, ya que entre los nominados se encuentran cuatro compatriotas: los intérpretes Penélope Cruz y Javier Bardem, el compositor Alberto Iglesias y el cortometrajista Alberto Mielgo. En cualquier caso, no es descabellado pensar que si nuestra Academia de Cine hubiese optado por Madres paralelas para el galardón a mejor película extranjera, en vez de por El buen patrón (Fernando León de Aranoa), tendríamos, como mínimo, una nominación más. Y es que tanto Cruz como Iglesias optan a estatuilla por sus respectivos trabajos en el filme de Almodóvar, sin haber contado con apoyo institucional, lo que certifica una vez más el enamoramiento de Hollywood con el cineasta. Curiosamente, en 2003 ocurrió algo similar con los mismos protagonistas: la Academía de Cine seleccionó Los lunes al sol por delante de Hable con ella, pero la película de León de Aranoa no consiguió colarse en la gala y el director manchego sumó dos nominaciones por su cuenta: a mejor dirección y a mejor guion original, premio que acabó conquistando.

Penélope Cruz y Javier Bardem llegarán al Kodak Theatre para afrontar ambos su cuarta nominación y con la esperanza de conseguir cada uno de ellos su segunda estatuilla. Bardem logró su primera mención en 2001 en la categoría de mejor actor por interpretar al poeta cubano Reinaldo Arenas en Antes que anochezca (Julian Schnabel), pero fue Russell Crowe el que se llevó el gato al agua por Gladiator (Ridley Scott). En 2006 Cruz se estrenaba en la categoría de mejor actriz por su trabajo en Volver (Pedro Almodóvar), pero sucumbió ante Hellen Mirren y su interpretación de la reina Isabel II de Inglaterra en The Queen (Stephen Frears).

En sus segundas nominaciones, ambos intérpretes conquistaron el galardón, en ambos casos como actores de reparto: primero Bardem, en 2007, por No es país para viejos (Joel y Ethan Cohen) y, despues Cruz, en 2008, por Vicky Cristina Barcelona (Woody Allen). En 2010, Cruz se colaría de nuevo entre las nominadas a mejor actriz de reparto por el musical Nine (Rob Marshall), siendo vencida por Mo’nique (Precious, Lee Daniels). Bardem volvería a la categoría de mejor actor en la gala de 2011 por su papel en Biutiful (Alejandro González Iñárritu), pero el premio fue a parar a manos de Colin Firth (El discurso del rey, Tom Hooper).

Ninguno de los dos parte como favorito en la madrugada del lunes. En la categoría de mejor actriz las quinielas apuntan a la victoria de Kristen Stewart por su mímesis con Lady Di en Spencer (Pablo Larraín), mientras que el resto de candidatas son pesos pesados de la industria: Nicole Kidman (Being the Ricardos), Olivia Colman (La hija oscura) y Jessica Chastain (Los ojos de Tammy Faye). Más claro todavía parece el Óscar al mejor actor para Benedict Cumberbacht por su magistral trabajo en El poder del perro, aunque la competencia es también feroz: Andrew Garfield (tick, tick… Boom!), Denzel Washington (Macbeth) y Will Smith (El método Williams).

En cualquier caso, las nominaciones de Cruz por su Janis en Madres paralelas y de Bardem por el Desi Arnaz de Being the Ricardos (Aaron Sorkin) ya son un alto reconocimiento para el desempeño de ambos intérpretes. Además, se han convertido en el sexto matrimonio de actores que opta a una estatuilla en la misma gala de los Óscar tras Lynn Fontanne y Alfred Lunt (1932), Frank Sinatra y Ava Gardner (1954), Elsa Lanchester y Charles Laughton (1958), Rex Harrison y Rachel Roberts (1964) y Richard Burton y Elizabeth Taylor (1967).

Para el compositor Alberto Iglesias, ganador de once premios Goya, la de Madres paralelas también es su cuarta nominación, aunque en su caso todavía no ha recibido el Óscar. La primera le llegó en 2005 con El jardinero fiel, del brasileño Fernando Meirelles; la segunda en 2007 con Cometas del cielo, del suizo Marc Foster; y la tercera en 2011 con El topo, del sueco Tomas Alfredson. Está, sin embargo, resulta la más especial de todas ellas ya que es un reconocimiento a su indispensable trabajo en el cine del director manchego desde que unieron sus caminos en Todo sobre mi madre (1999). Habrá que ver si es capaz de robarle la gloria a los favoritos Jonny Greenwood (El poder del perro) y Hans Zimmer (Dune). Aunque Germaine Franco (Encanto) y Nicholas Britell (No mires arriba) también cuentan con posibilidades.

Todas las esperanzas están depositadas por tanto en Alberto Mielgo, ganador de dos premios Annie y tres Emmy, y su magnífico corto de animación El limpiaparabrisas. Su victoria sería además un bonito homenaje a aquellos directores españoles que con sus cortos se quedaron a las puertas de la victoria: Juan Carlos Fresnadillo (Esposados, 1996), Nacho Vigalondo (7:35 de la mañana, 2004), Javier Fesser (Binta y la gran idea, 2006), Borja Cobeaga (Éramos pocos, 2006), Esteban Crespo (Aquel no era yo, 2013), Juanjo Giménez (Timecode, 2016) y Rodrigo Sorogoyen (Madre, 2019) en la categoría de mejor cortometraje y Javier Recio (La dama y la Muerte, 2009) y Núria González Blanco (Late Afternoon, 2018) en la categoría de mejor corto de animación.