Image: Sara Ramo, lo lleno y lo vacío

Image: Sara Ramo, lo lleno y lo vacío

Exposiciones

Sara Ramo, lo lleno y lo vacío

Simetrías.

14 enero, 2011 01:00

Avalancha concreta, 2010

Galería Estrany-de la Mota. Passatge Mercader, 18. Barcelona. Hasta el 12 de febrero. De 1.903 a 6.090 euros.

El eje central de la exposición es un vídeo a partir del cual parecen distribuirse simbólicamente las piezas de la muestra. Traslado, el trabajo en cuestión, se inicia con la presencia de una maleta cerrada y solitaria sobre el suelo de habitación vacía. Luego una persona de espaldas -la artista- va sacando infinidad de variados objetos, uno tras otro, hasta ocupar totalmente el espacio… Una vez que se supone que se han extraído los múltiples artefactos del interior de la maleta, la artista se introduce en ella y desaparece literalmente como si aquélla se la hubiera tragado.

Éste es el mundo de Sara Ramo (Madrid, 1975): el de las puertas entreabiertas, la trampilla que esconde algo, la caja cerrada en la que intuimos la presencia de cosas… Es también el mundo de los objetos, su vida secreta e íntima, que se expresa cuando éstos se liberan de la lógica de la vida cotidiana que los condena al silencio. No es un mundo evidente, el de Sara Ramo. En él hay una dimensión hermética y opaca pero, al mismo tiempo, intensamente poética. Y es que el gesto de sacar cientos de objetos inverosímiles de una maleta para, luego, desaparecer en la misma, posee la magia del prestidigitador.

El título de Simetrías responde a un motivo recurrente en la artista. Sin que este aspecto agote el contenido de su obra, muy a menudo en ella se juega con un sistema de contrarios o inversiones del que el dispositivo lleno/vacío es el más visible. Así, por ejemplo, Ramo plantea espacios vacíos que, por un efecto de reflejo opuesto, son simétricamente invadidos por objetos o materias en un segundo tiempo y viceversa. Éste también es el caso del vídeo Traslado antes mencionado: en él se desarrolla un sucesivo movimiento que oscila entre la ausencia y la presencia. Tal vez ambos estados sean complementarios, como las dos caras de una misma moneda. Y quizás, en esta simetría se exprese la idea de metamorfosis y tránsito con todas las asociaciones simbólicas vinculadas a ella.

Hay un aspecto al que todavía no hemos aludido y que posee una gran importancia en la obra de esta artista, que es el mundo de la fábula. Y es que su mundo remite al de la magia de los cuentos infantiles. Estos objetos que invaden el lugar casi como seres animados, el nombrar el misterio del universo con cosas cotidianas -como es el caso de la obra Algunos días pasados en el espacio- es una poética que, reelaborada, está inspirada en el universo de la infancia. No resulta extraño pues, que Sara Ramo sea como una sonda en las profundidades de las emociones.