Image: R. H. Quaytman, profeta en su tierra

Image: R. H. Quaytman, profeta en su tierra

Arte internacional

R. H. Quaytman, profeta en su tierra

Es una de las pintoras más interesantes de la escena norteamericana. Su obra puede verse simultáneamente en dos centros estadounidenses

8 diciembre, 2010 01:00

I Love The Eyelid Clicks I See Cold Poetry, Chapter 18, 2000.

Neuberger Museum of Modern Art, New York y San Francisco Museum of Modern Art, EE.UU.

R. H. Quaytman fue una de las artistas destacadas en la pasada Whitney Bienal, con un trabajo que, desde la pintura, entablaba un diálogo con el espacio y la arquitectura de Marcel Breuer. Y no lo hacía, como en principio podría se podría esperar de un site specific pictórico, a través del mural, sino desde una perspectiva mucho más conceptual. Como si, de algún modo, cada cuadro absorbiera todo cuanto encontrase en torno a sí, las pinturas de Quaytman reúnen referencias a multitud de medios. Su trabajo funciona en series, o, mejor dicho, capítulos de un enorme libro en los que las diferentes pinturas tienen una nítida y certera razón de ser, y todas tienen relación con las que le preceden y a las que anteceden.

Un buen ejemplo de las inquietudes de Quaytman pudo verse en su Iamb, Chapter 12, un conjunto de cuadros que jugaban con un motivo bien sencillo: la relación entre una bombilla y el cuadro que iluminaba. De ahí parte una narrativa que tiene que ver con cuestiones perceptivas, con juegos de opuestos (luz-oscuridad, representación-abstracción...), con las nuevas aportaciones de las herramientas digitales en sintonía con el acervo analógico, y, por supuesto, con las leyes de la perspectiva aplicadas a la construcción y percepción de espacios expositivos. La artista residió en Roma a principios de los noventa gracias al Prix Rome recibido en 1992 y ahí diseñó un buen número de maquetas de salas de exposición. Quaytman ponía pequeños espejos en su interior, con los que se magnificaba toda perspectiva. En este conjunto de experiencias primeras se basa buena parte del trabajo de la artista y es la base para una premisa central en su libreto: la representación de espacios vacíos solo puede percibirse si el espectador se encuentra ahí. Pero recuerden: los espacios están vacíos. Es algo así como fotografiar frontalmente un espejo y conseguir no estar presente en la imagen resultante.

Dos exposiciones simultáneas arrojan buena luz sobre el creciente interés que la obra de Quaytman viene suscitando en fechas recientes. El Neuberger Museum, una institución perteneciente al State University de Nueva York, es el escenario en que se muestra Spine. Chapter 20. Es un trabajo "raro" en la trayectoria de la artista, que se desarrolla más en el tiempo que en el espacio. Esto es, no está tan centrado en el espacio expositivo que lo acoge como en su relación con otras pinturas o momentos de su carrera. Tomando prestadas sus palabras estaríamos asistiendo a una "retrospectiva formada íntegramente por trabajos nuevos". Todos los trabajos en la muestra son atravesados por una franja (o espina) de color rojo, verde y azul, los colores primarios, en referencia al modelo de color RGB. Es una franja que otorga a la serie una unida conceptual y temporal. El montaje de la exposición tiene una gran pared diagonal que sesga el espacio en dos como si fuera la página de un libro y también una flecha, en alusión al carácter evolutivo de su trabajo.

La muestra del MoMA de San Francisco, una de las grandes instituciones americanas, se enmarca en su ciclo "New Work". I Love-The Eyelid Clicks-I See-Cold Poetry, Chapter 18 es el nombre de la serie, basada en la colección de fotografía del SFMOMA, y centrada en una figura interesante de la cultura californiana de los cincuenta, el poeta Jack Spicer. Quaytman prosigue aquí esa investigación que hermana el contexto (físico o conceptual, como es este caso) con esa dualidad tan marcada entre figuración y abstracción, tendencias que tensan un sugerente diálogo en este conjunto de trabajos. Ambas series, esta de San Francisco y la del Neuberger Museum de Nueva York estarán documentadas en el catálogo-libro que recorre todos los capítulos de la artista y que será publicado en la primavera del próximo año.