Ella visitó España y se enamoró. Así lo cuenta la chef ucraniana Olena Ros quien, en su primera visita, no dudó en que volvería para trabajar de primera mano con nuestro mejor producto de temporada. Avalada por sus restaurantes en Kiev, Moscú y Odessa, la joven cocinera volvió para realizar un curso en la prestigiosa escuela Le Cordon Bleu de Madrid para hacer realidad su sueño más ambicioso: Rolenka, un restaurante para 100 comensales situado en la emblemática calle Mayor.

Las estaciones son clave en la propuesta de Rolenka, ya que Olena quedó fascinada por los productos que mes tras mes van cambiando en cualquier mercado español. Una cocina honesta, elaborada con el mejor género disponible, de sabores tradicionales e influenciada por las enseñanzas que su abuela le transmitió cuando era pequeña, son las claves de este proyecto tan personal de la chef ucraniana.Diseñar un concepto de restaurante que uniera la esencia de la mejor cocina con una experiencia única, fue el objetivo que se fijó Olena cuando decidió crear Rolenka. Puede parecer ambicioso pero, cuando experimentas sin descanso hasta dar con la carta perfecta y te rodeas del mejor equipo de profesionales, es perfectamente alcanzable.

Rolenka - sala 2

Ficha y detalles del restaurante Rolenka

  • Rolenka propone una experiencia gastronómica con la que es posible viajar con el paladar y los sentidos a un escenario de perfecta armonía: platos tradicionales de la comida española y mediterránea, con un toque vanguardista que los actualiza a los gustos de hoy, y exalta la esencia natural de los alimentos. A todo ello se le suma la herencia entre fogones que Olena aporta gracias a las enseñanzas familiares que fue adquiriendo desde bien pequeña en su casa.
  • Lo mejor: el confit de pato con salsa de naranja y puré de patatas y su original y divertida carta de cócteles.
  • Dirección: Calle Mayor, 30. 28013 Madrid
  • Horario:  M–D: de 9:00h a 02:00h; Comidas de 13:30h a 16:30h. Cenas de 19:30h a 23:30h. Cerrado lunes.
  • Reservas: En el teléfono 91 685 91 22
  • Precio: 30 euros. Menús especiales 25 y 35 euros.
  • Nota: 3.5/5

Tradición mediterránea y vanguardia en la propuesta de Rolenka

El objetivo de Rolenka ha sido diseñar un restaurante en el que se fusionaran la mejor cocina de antaño con los toques más vanguardistas, una suma que tuviera como resultado una experiencia gastronómica única. El trabajo y la pasión de la joven chef han sido clave para presentar una carta en la que no hay ningún plato que no me encante o no tenga sentido, confiesa Olena Ros. Ella ha sabido escoger a su equipo y, rodeándose de profesionales, ha conseguido alcanzar la meta que siempre tuvo en mente.

Rolenka - croquetas

Para comenzar en Rolenka, nada como sus entrantes para compartir, entre los que se encuentran las croquetas de carabinero o de ave de corral al estilo de la abuela; un irresistible queso Camembert al horno con fresas y bayas; el singular rabo de toro en patata rösti al chocolate, uno de los platos más demandados por sus comensales; o unas tortitas de patata con crème fraîche y variedad de pescados ahumados, a modo de blinis.

Las ensaladas -bien originales y apetecibles- y los entrantes para no compartir continúan la propuesta. Entre ellos destaca la vieira con foie gras de pato, fresas y coulis de mora; los boquerones fritos con alioli de azafrán; o la ensalada Rolenka de queso de cabra, tomates cherry, remolacha, piñones y fruta, perfecta para tomar ahora que el calor aprieta en la capital.

Rolenka - vieira con foi gras de pato

En los principales merece la pena probar la carrillera de ternera con polenta cremosa y salsa de trufa negra, el plato favorito de Olena. Pero no se puede perder de vista el confit de pato con salsa de naranja y puré de patatas, la paletilla de cordero lechal con puré de patatas y salsa de tres vinos, o la siempre apetecible hamburguesa de ternera con trufa y cebolla caramelizada. Para los que prefieran optar por el pescado, imprescindible la dorada fresca crujiente con tiernas verduras de temporada; el guiso de rape con gambas; el salmón alga nori  con espárragos y arroz cremoso; o, una vez más, la hamburguesa, pero esta vez de salmón.

Rolenka - confit de pato con salsa de naranja

Con una cocina non-stop, Rolenka tiene también algunas propuestas que se sirven durante todo el día fuera de los horarios de comida y cena. De esta manera se pueden degustar platos como la ensaladilla rusa, el salmorejo, los huevos rotos trufados o la ensalada de corazón de buey con ventresca de atún. Recetas frescas, ligeras y muy apetecibles para la época estival. De cara a otoño, Olena Ros cambiará esta oferta centrándose de nuevo en el mejor producto de temporada.

En cuanto a los postres, su carta casera es irresistible para cualquier buen goloso. La crème brûlée es sin duda mi favorita, pero esta opción se  complementa con una perfectamente ejecutada tarta tatin de manzana con helado de vainilla o el ravioli de piña con mango y salsa de lima.

Rolenka - creme brulee

Una coctelería de autor en la barra de Rolenka

No podemos rematar la visita sin un cóctel, todos ellos elaborados por el bartender Claudio Cracco. Rolenka propone combinados singulares que aúnan creatividad, arte y los mejores ingredientes, siempre con el objetivo de sorprender al comensal y proponerle un fantástico viaje por el mundo. La música de ambiente, su insinuante espacio en la barra, y una decoración de ensueño en la que ha trabajado el estudio de interiorismo Proyecto Singular, hacen dela visita un momento dedicado al disfrute y la desconexión.

Un Tiki Rolenka, con el que viajar hasta la Polinesia; el Moji-Té, que nos lleva hasta Cuba haciendo escala en Marruecos; el Taste of Cinema, con palomitas y Coca-Cola, ideal para tomarlo como postre; o el Japan Sour, con el que descubrir nuevos aromas y sabores asiáticos y del que dicen que quita todos los males, son sólo algunas de las nueve propuestas cocteleras que sorprenden en Rolenka desde el aperitivo hasta el remate final de la visita.

Rolenka - cóctel

Noticias relacionadas