No suelo publicar muchas recetas de batidos porque son tan sencillas que casi no tienen nada que explicar, pero aún así, de vez en cuando considero que es necesario compartir algunas para que os sirvan de inspiración a la hora de preparar vuestros propios batidos, como pasa con este batido de avena.

Ingredientes

  • Avena en copos, 4 cucharadas
  • Plátano en rodajas, 1
  • Crema de cacahuete, 1 cucharadita
  • Miel, 1 cucharadita
  • Agua o bebida vegetal sin azúcar, unos 50 ml (opcional)

Preparación del batido de avena

Lo dicho, no hay mucho misterio, todo lo que hay que hacer se reduce a un único paso.

Paso 1

Poner todos los ingredientes en una batidora de vaso o en un procesador de alimentos hasta que tengamos una textura fina. Si queda muy espeso para vuestro gusto, podéis conseguir una textura más líquida añadiendo un poco de agua o de bebida vegetal.

Notas

Para conseguir una textura aún más cremosa se pueden hacer tres cosas.

La primera consiste en hidratar previamente la avena, y para eso la dejaremos la noche anterior en un vaso con unos 50 ml de la bebida vegetal sin azúcar que más os guste. De esta manera, a la hora del desayuno será mucho más fácil de triturar.

La segunda es moler la avena hasta convertirla en harina usando un molinillo de café o algún robot potente estilo Thermomix. Podemos moler cierta cantidad y guardarla en un bote y tenerla lista para varios días, así ahorramos tener que molerla a diario.

La tercera, es usar el plátano congelado que hará que nuestro batido sea una deliciosa crema helada, aunque eso sí, esta opción tiene mucho más éxito en verano.

Con los ingredientes que te hemos propuesto lo que se consigue es una base de batido de avena cremoso que, aunque así solo ya está riquísimo, se puede personalizar añadiendo otros ingredientes, como semillas de chía o de amapola en el último momento para dar un toque crispy, podemos añadir otras frutas como piña, fresas, frambuesas, arándanos, melocotón, mango...

Esta última es una de mis favoritas, y si al mango además le añades unas gotitas de esencia natural de vainilla o, mejor aún, raspamos el interior de una vaina de vainilla y lo añadimos a nuestro batido de avena y mango, el resultado es espectacular.