Vamos hoy con una receta muy rápida y muy rica, aprovechando lo que tenía sobrante de otros días o algunos congelados que no podía aprovecharse para un plato entero. Es una buena técnica.

Con todo ello he recordado una antigua receta que me gustaba hacer antes por su sencillez y rapidez, y la voy a compartir con vosotros para vuestro disfrute. Es muy variable, así que el espíritu Cocinillas, estará a lo largo de toda la receta. Fideos chinos a la cazuela, un lujo asiático, pero no caro ni complicado.

Vamos que en teoría es una receta china, pero si queréis probarlo “a la española” no hay problema alguno, aunque sí que es cierto que cuanto más fina sea la pasta, mejor sabe en este caso.

Lo primero de todo es que si no tenéis fideos frescos (como en mi caso de hoy), lo pongáis a cocer, esto aumenta el tiempo total, ya veis que va a ser poco entonces… Se hace muy rápido de todas formas con este tipo de pasta, en 2-3 minutos está listo, tampoco es bueno que estén blandos. En mi caso le he añadido un poco de curry al agua de cocción, manías mías, le da un toquecito.

En una sartén (preferiblemente wok), echáis unas gotitas de aceite y salteáis las gambas y las setas primero, y a los dos minutos añadís los brotes de soja, y treinta segundo después la pasta, mezcláis un poco, y ponéis el fuego a tope. 2 minutos más.

Ahora toca la cazuela de barro, ponéis el chorrito de vino de arroz (si lo hacéis con vino blanco podéis añadir una cucharadita de salsa de soja), las dos cucharadas de caldo si queréis o agua, que es lo que he hecho yo porque no tenía caldo de pescado a mano.

Ponéis a fuego vivo, dejáis que se caliente el líquido un poquito (no llega al minuto) y añadís lo de la sartén. Tapamos la cazuela de barro, y seguimos a fuego máximo durante 2-3 minutos. Y listo (cuidado que quema). ¡A comer!

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Tiempo: 10-12 minutos

Dificultad: 2/10

Digestión: 6/10

Precio: 3€