Este aperitivo de cestitas de morcilla vegana, cebolla y manzana es muy vistoso y fácil de elaborar. Tiene varias preparaciones pero todas las podemos realizar con antelación. Vamos a elaborar las cestitas con pasta filo y a rellenarlas con una falsa morcilla o morcilla vegana elaborada principalmente con berenjena y cebolla. Coronaremos la morcilla con un poco de cebolla pochada, y unos daditos de manzana salteada.

Ingredientes

Ingredientes para la manzana salteada

  • Manzana reineta cortada en taquitos, 1
  • Mantequilla o margarina, 20 g
  • Azúcar moreno, 1 cucharada

Ingredientes para elaborar las cestitas de morcilla vegana

  • Necesitaremos unos moldes para magdalenas para dar la forma a las cestitas

Elaboración de las cestitas crujientes de morcilla vegana con cebolla y manzana

01: Quitar el amargor de la berenjena

Vamos a comenzar preparando las berenjenas. Es importante que elijamos berenjenas de piel firme y sin imperfecciones. Lavamos bien las berenjenas.

Para que no nos repita y quitar el amargor de la berenjena te propongo dos métodos: con sal gorda, y con agua, leche y sal. Elige el que más te guste.

  • Con sal gorda: cortamos las berenjenas en trozos regulares con piel y colocamos los trozos por capas en un colador. Espolvoreamos con abundante sal gorda en la primera capa de berenjenas, luego colocamos una segunda capa y repetimos el proceso con el resto de berenjenas. Dejamos reposar entre 15 y 30 minutos. Veremos que las berenjenas comienzan a soltar líquido a medida que pasan los minutos. Una vez transcurrido el tiempo enjuagamos con agua fría, escurrimos, secamos y continuamos con la receta.
  • Sumergida: otra forma efectiva de quitar el amargor de las berenjenas es cortarlas como necesitemos y sumergir los trozos en un recipiente lleno de agua con sal gorda -preferiblemente- y un poco de leche durante 30 minutos. Como las berenjenas tienden a flotar, suelo poner un plato del diámetro del recipiente y algo de peso encima para que queden sumergidas completamente. Pasado este tiempo, las enjuagamos, escurrimos y secamos.

02: Elaborar las cestitas crujientes

Mientras quitamos el amargor a las berenjenas, vamos a ir preparando y horneando las cestitas, ya que para rellenarlas necesitamos que estén frías.

Lo primero que hay que tener en cuenta es que la masa filo se reseca enseguida, por lo que tenemos que intentar tardar lo menos posible en preparar las cestitas.

Fundimos la mantequilla en el microondas. Ponemos 3 láminas de masa filo sobre la encimera y guardamos el resto en la nevera.

Vamos a superponer 3 capas de masa filo untadas de mantequilla fundida entre sí. Puedes hacerlo de una en una; pincelando una y poniendo la siguiente encima, o como ves en la fotografía, poniendo las tres ya bien colocadas y pincelando por mitades.

Seguidamente tenemos que cortar la masa en 12 cuadrados, para ello cortamos la parte más ancha en 4 tiras y luego el lado corto en 3 cuadrados. De esta manera nos saldrán 12 cuadrados, que encajaremos dentro de los moldes para magdalenas.

Con el horno precalentado a 200ºC con calor arriba abajo, horneamos durante unos 5 minutos o hasta que las veas doraditas.

Sácalas del molde cuando estén frías y ten cuidado con las puntas que son muy frágiles.

03: Elaborar la morcilla vegana con Thermomix

Cortamos las chalotas en cuartos y las introducimos en el vaso de la Thermomix. Las picamos programando 10 seg/vel 4. Sacamos y reservamos.

Añadimos los trozos de berenjena bien secos al vaso de la Thermomix y troceamos programando 8 seg/vel 5.

Añadimos al vaso las chalotas reservadas, el aceite, los piñones, el orégano, la sal, el pimentón y la pimienta y 2 cucharadas de tomate natural triturado. Cocinamos el conjunto programando 15 min/Varoma/Giro a la izquierda/vel cuchara.

Comprobamos si quedan restos en las parades del vaso de la Thermomix y los bajamos. Programamos de nuevo 15 min/Varoma/Giro a la izquierda/vel cuchara.

Dejamos escurrir el conjunto sobre un colador, para escurrir el aceite.

Si quieres darle un color más negro al conjunto puedes usar colorante, pero la verdad es que yo los evito si no es imprescindible, tú decides.

04: Saltear la manzana

Pelamos la manzana, le quitamos el corazón y la cortamos en dados pequeños.

Ponemos la mantequilla a fundir en una sartén y añadimos los dados de manzana. Los alteamos y espolvoreamos con el azúcar moreno. Cocinamos hasta que la manzana caramelice y quede blandita. Reservamos.

05: Elaborar la cebolla pochada con Thermomix

Cortamos la cebolla en juliana. Este paso no me gusta hacerlo en la Thermomix porque queda triturada y la cebolla queda más bonita en tiras.

Ponemos la mariposa en las cuchillas y vertemos la cebolla, el aceite y la mantequilla. Programamos 30 min/Varoma/giro a la izquidara, vel 1. Colocamos el cestillo en la tapa, en lugar del cubilete, para que evapore.

Agregamos el azúcar moreno, el vinagre de Módena y salpimentamos al gusto. Programamos 3 min/100ºC/vel 1.

También puedes caramelizar la cebolla en el microondas.

06: Servir las cestitas de morcilla vegana, cebolla y manzana

Es importante montar las cestitas no mucho antes de servirlas para que no se ablanden y pierdan su crujiente. De todas formas, alguna vez las he tenido que rellenar un buen rato antes de servirlas y justo antes las he calentado en el horno y el crujiente se ha recuperado bastante bien.

Para servir las cestitas las rellenamos con la morcilla vegana (como si fuera una morcilla desmigada), ponemos sobre ella la cebolla caramelizada y encima unos dados de manzana salteada y caramelizada. Opcionalmente en el fondo de la cestita podríamos poner unos trozos de queso de cabra que combinan muy bien con el conjunto.

Resultado

Tenemos que admitir que por supuesto no tiene el sabor de la auténtica morcilla, pero de alguna manera sí se aproxima bastante a su sabor, y tiene la ventaja de que es mucho más ligera y digestiva que la verdadera morcilla. Además los ingredientes que necesitamos son los que normalmente tenemos en casa.

Con estos mismos ingredientes podríamos también presentar la morcilla vegana en forma de tosta. Poniendo una capa de cebolla caramelizada sobre un pan tostado, sobre ella la rodaja de morcilla, y encima el queso de cabra y los daditos de manzana. Para hacer la rodaja de morcilla puedes utilizar un aro de emplatar, o envolver la masa de la falsa morcilla en papel film y dejarla reposar minutos en el congelador hasta que se endurezca lo suficiente como para poder cortarla en rodajas.

Esta morcilla vegana también es un perfecto relleno para unos pimientos del piquillo, empanadillas, empanada, lasaña, canelones, etc.