Publicada

Diego Domínguez Almudévar (Zaragoza, 1996), más conocido como 'Diegodoal', su nombre como creador de contenido gastronómico, es famoso por compartir recetas de cocina en su canal de YouTube e Instagram.

Los platos que publica son muy variados: desde elaboraciones tradicionales de España, pasando por cocinas internacionales hasta preparaciones algo más elaboradas.

A menudo busca opciones que sean asequibles para gente sin experiencia en cocina, con explicaciones sencillas, pero con un toque personal (le gusta entender el por qué de las técnicas).

Entre sus vídeos más populares, se encuentra el de cómo hacer las pastas más clásicas de Italia, con un millón y medio de visualizaciones, el mejor método para hacer café en casa, o cómo preparar 12 tapas típicas españolas.

Las mejores patatas fritas del mundo

En otro de sus vídeos, Diego también explica cómo hacer las que él define como "las mejores patatas fritas del mundo". "Estas no son unas patatas cualquiera", advierte. "Estas son las patatas fritas de J. Kenji Lopez-Alt, desarrollador de recetas americano y uno de mis referentes en el mundo culinario", agrega.

"Hace unos años publicó uno de sus obsesivos ensayos investigando la mejor forma de replicar las patatas fritas del McDonalds", cuenta. Y acabó con la receta que compartimos hoy de Diego.

Eso sí, no es un plato rápido: "Es un proceso largo, pero se pueden congelar y tenerlas preparadas para freír, así que si te pones, puedes hacer varios kilos. Y te garantizo que serán las mejores patatas fritas que jamás probarás, de eso no tengo ninguna duda".

Ingredientes

  • Patatas, 2 kg
  • Vinagre blanco, 60 ml
  • Agua, 3 litros
  • Aceite neutral (de girasol)
  • Sal, al gusto

Paso 1

Pela y corta todas las patatas, dándoles forma larga. Ponlas en una cacerola y cúbrelas con el agua y el vinagre blanco. Calienta a fuego alto y lleva el agua a ebullición. Cuando comience a hervir, pon un temporizador de 10 minutos.

Paso 2

Pasado ese tiempo, saca las patatas a una bandeja con papel de cocina para escurrirlas.

Paso 3

Ahora calienta aceite de girasol a 200 grados en una sartén y fríe todas las patatas en tandas. Fríelas únicamente durante 50 segundos, moviéndolas un poco para que no se peguen entre ellas.

Paso 4

Hecho esto, escúrrelas en papel de cocina y ponlas en bandejas. Luego congélalas durante, al menos, una noche entera, o hasta que necesites.

Paso 5

Llegado el momento, calienta aceite de girasol a 200 grados, añade las patatas, en tantas, directamente del congelador. Fríelas durante 3 minutos y medio, removiendo de vez en cuando.

Paso 6

Ponlas en un bol con papel de cocina e inmediatamente añade sal y zarandéalas un poco. Sirve.

Diego utiliza estas patatas fritas como acompañamiento de una parmesana de pollo, un plato que él considera "confort food", es decir, esa comida que te hace sentir bien, en casa, "que te hace sonreír con cada bocado y alegrarte de haberte quedado en casa el viernes por la noche".

Junto al pastel de carne, la parmesana de pollo es uno de sus platos favoritos del confort food, sobre todo si se sirve junto a unas patatas tan deliciosas como estas.

Otros trucos

Para conseguir unas patatas maravillosas, de 10, hay también otros métodos que podemos seguir:

Elige la patata correcta. Una patata harinosa, tipo agria o Kennebec.

Corta las patatas de forma uniforme. Intenta que todas tengan el mismo grosor para que no se frían mal.

Lávalas para quitar el almidón. Esto evita que se peguen o queden gomosas.

Doble fritura. Esto es clave: haz una 1ª fritura a unos 140-150 ºC durante 6 u 8 minutos, sin dorar. Luego déjalas reposar 10 minutos y haz una 2ª fritura a unos 185-190 ºC uno o dos minutos, hasta que estén doradas y crujientes.

No pongas demasiadas a la vez. Si llenas la sartén en exceso, las patatas pueden quedar blandas.

Sal al final. Si salas antes, sueltan agua y se ablandan.

Aceite limpio y suficiente. Es importante que estén sumergidas completamente y que se use un aceite de girasol alto oleico.

Además, también puedes rebozarlas ligeramente en maicena (una capa finísima) antes de freírlas para conseguir un extra de crujiente.