Gran parte del consumo energético del hogar tiene lugar en la cocina pues suele ser la zona de la casa donde mayor cantidad de aparatos eléctricos se concentran.

Y aunque todos sepamos cómo se usan los electrodomésticos, es interesante adquirir ciertos hábitos que nos permitirán utilizarlos de manera más eficiente sin malgastar recursos. Seguro que muchos ya los conocéis u os suenan, pero nunca está de más recordar estos trucos para ahorrar energía en la cocina, pues al fin y al cabo, ahorrar energía se traduce en ahorrarnos unos euros en la factura de la luz y eso siempre es bienvenido.

 

Trucos para ahorrar energía en la cocina

Aparte de elegir electrodomésticos con una buena clasificación energética (A o superior) es interesante seguir algunas recomendaciones a la hora de utilizarlos.

Ahorrar energía en la nevera

  • No te pases el día abriendo y cerrando la puerta de la nevera y, cuando tengas que hacerlo procura que sea el menor tiempo posible. Lo mismo para el congelador.
  • Descongela la nevera con regularidad y no dejes que se forme una capa enorme de hielo que obligará al motor a funcionar más tiempo del necesario.
  • No guardes comida caliente, si tienes sobras o has hecho túpers para varios días, espera a que se enfríen antes de meterlos dentro, así evitarás también que el motor tenga que trabajar de más para compensar el exceso de temperatura en el interior.

Ahorrar energía al usar el lavavajillas

  • Aunque hay lavavajillas que permiten lavar a media carga, ahorrarás más si lo llenas por completo antes de utilizarlo.
  • Si tu lavavajillas dispone de él, utiliza el programa económico, pues utiliza menos cantidad de agua y se calienta a poca temperatura.

Ahorrar energía en el horno y la zona de cocción

  • Elige siempre el tamaño de fuego adecuado a la olla que estás utilizando.
  • Si tienes una cocina vitrocerámica, puedes aprovechar el calor residual para terminar de cocinar tus platos apagándola unos 5 minutos antes de que la comida esté lista.
  • No estés abriendo la puerta del horno constantemente mientras lo estás utilizando.
  • Si sueles preparar a menudo galletas o bizcochos, un buen momento para hacerlo es antes o después de usar el horno para otros platos, así ahorrarás la energía correspondiente al tiempo de precalentamiento.
  • Cuando quieras calentar sopas o guisos, o mismo hervir agua, tapa siempre los cazos y ollas.

Ahorrar energía al usar las luces en la cocina

  • Invierte un poco en colocar bombillas de bajo consumo si tu cocina está iluminada con lámparas, aunque si tienes opción, lo que menos energía consume son los tubos fluorescentes.
  • Si tu cocina es muy grande, puede resultar interesante colocar iluminación sobre la encimera que te permitirá trabajar con mayor comodidad sobre ella iluminando solo la zona en la que estés trabajando en ese momento.