
Jeremy London, cirujano cardíaco.
Jeremy London, cirujano: "Cepillarse y usar hilo dental en España reduce el riesgo de enfermedad cardiovascular"
En España, una gran mayoría de personas de más de 60 años sufren síntomas relacionados con la periodontitis y otras afecciones de las encías.
Más información: Manuel Viso, médico: "Las bacterias del cepillo de dientes pueden provocarte infecciones de las válvulas del corazón"
España cuenta con numerosos factores positivos en materia de salud: un buen clima, una alimentación saludable, un entorno favorable a las relaciones sociales y un sistema sanitario de calidad, tanto en su dimensión pública como privada. Además, ostenta una de las mayores esperanzas de vida de Europa. Sin embargo, hay un punto negro que no se puede obviar: la salud bucodental. Según un estudio internacional elaborado por la farmacéutica británica GlaxoSmithKline, España es el país con peor salud bucodental de Europa.
Una de las enfermedades más comunes es la periodontitis. La Sociedad Española de Periodoncia y Osteointegración (SEPA) advierte que “es considerada una de las enfermedades más extendidas en el mundo”. En España, se estima que el 85% de la población mayor de 60 años presenta síntomas de esta enfermedad, con consecuencias que van más allá de la salud oral. “Aparte de provocar la pérdida de dientes, se asocia con trastornos sistémicos tan importantes como la diabetes, algunas enfermedades cardiovasculares o el parto prematuro”.
Sobre este asunto se ha pronunciado el cirujano cardiovascular Jeremy London en su cuenta de Instagram. En un breve vídeo dirigido a sus más de un millón de seguidores, explicó que “cepillarse y usar hilo dental puede disminuir su riesgo de enfermedad cardíaca en un 10 % a un 12 %”. La clave está en que una mala higiene bucal puede provocar una infección en las encías. El resultado, según London, es un “aumento de la inflamación en todo el cuerpo y, en casos graves, puede llegar a la corriente sanguínea con bacterias”.
Tal como explica el doctor, la inflamación crónica es un conocido impulsor de la arteriosclerosis, o endurecimiento de las arterias. Este es un factor de riesgo conocido para el ataque cardíaco y el accidente cerebrovascular. Además, si hay bacterias en la sangre, pueden adherirse a las válvulas, causando una infección grave. Esto podría requerir cirugía cardíaca abierta y reemplazo de válvula. Por eso, hace un llamamiento “haga las cosas fáciles: cepíllese y use hilo dental dos veces al día, y visite a su dentista dos veces al año”.
Una relación demostrada por la ciencia
La relación entre la salud de las encías y el corazón no es solo una hipótesis. Diversas investigaciones recientes han confirmado que la periodontitis no solo incrementa el riesgo cardiovascular, sino que lo hace de forma proporcional a su gravedad. El estudio sueco Periodontitis and Its Relation to Coronary Artery Disease (PAROKRANK) demostró que las personas con periodontitis tenían un 49 % más de riesgo de fallecer, de sufrir un infarto o un ictus no mortal o de desarrollar insuficiencia cardíaca grave.
“El riesgo de sufrir un evento cardiovascular aumentó en paralelo a la gravedad de la periodontitis”, explicó la doctora Giulia Ferrannini, del Instituto Karolinska, subrayando que este efecto fue especialmente claro en pacientes con antecedentes de infarto. El paso de bacterias desde los tejidos dañados hacia el torrente sanguíneo y la inflamación sistémica resultante podrían explicar este vínculo.
A esta evidencia se suma el consenso internacional alcanzado por la Federación Europea de Periodoncia (EFP) y la Federación Mundial del Corazón (WHF), publicado en Journal of Clinical Periodontology y Global Heart. Tras revisar la literatura científica más reciente, los expertos concluyen que existe una fuerte asociación entre periodontitis y enfermedad cardiovascular aterosclerótica. El informe recomienda informar a los pacientes con enfermedad de las encías de su mayor riesgo cardiovascular y aplicar estrategias preventivas tanto en clínicas dentales como en consultas cardiológicas.
Claves para prevenirlo
La Fundación Española del Corazón, admite que existe una relación clara entre encías y salud cardiovascular. “Los pacientes con encías enfermas tienen mayor riesgo de padecer un trastorno cardiovascular. Pero el tratamiento periodontal podría ayudar a reducir ese riesgo”, expone en su sitio web.
Por eso, ha lanzado una serie de recomendaciones para reducir los riesgos al máximo:
· Revisar el estado de las encías con frecuencia permite detectar signos de inflamación o sangrado que podrían indicar el inicio de una enfermedad periodontal con posibles repercusiones sistémicas.
· Acudir al dentista al menos dos veces al año contribuye a mantener a raya la placa bacteriana, detectar a tiempo cualquier alteración y prevenir complicaciones mayores.
· Cepillarse los dientes, como mínimo, dos veces al día durante al menos dos minutos ayuda a eliminar eficazmente los restos de comida y la placa acumulada, siempre dedicando unos 30 segundos a cada zona de la boca.
· Incorporar una limpieza interdental adecuada mediante el uso de seda dental o cepillos interproximales es fundamental para llegar a los espacios donde el cepillo convencional no alcanza. En algunos casos, puede ser útil complementar con colutorios antigingivitis.
· Entender que la periodontitis no tratada puede derivar en la pérdida de dientes permite tomar conciencia de la importancia del tratamiento precoz y del seguimiento profesional.
· Tener presente que las encías enfermas pueden agravar otras enfermedades como la diabetes o incrementar el riesgo de parto prematuro, ayuda a asumir la salud bucodental como una parte esencial del bienestar general.
· Prestar una atención especial en caso de diabetes resulta clave, ya que una encía inflamada dificulta el control de la glucosa y aumenta el riesgo de complicaciones.
· Adoptar hábitos de vida saludables como una alimentación equilibrada, evitar el tabaco y practicar ejercicio físico, no solo mejora la salud general, sino que también protege las encías y los dientes.