Los peores presagios se confirmaban esta semana: RTVE se ha hecho con los derechos de retransmisión del polémico Mundial de Qatar 2022 tras haber puesto sobre la mesa una oferta de entre 35 y 40 millones de euros y haber superado a Atresmedia y Mediaset España. 

Según publicaba Invertia, esta operación se ha llevado a cabo a petición del Gobierno, que habría aconsejado a la dirección de la Corporación realizar una oferta tan elevada que, dentro de las limitaciones, fuese casi imposible de alcanzar por el resto de participantes.

RTVE no puso impedimento alguno debido a que, en el caso de ofertar una millonada por la competición, no sería el ente el encargado de pagar la totalidad de la fiesta, sino que desde el Gobierno se le otorgaría una aportación extra, como ha sucedido en otras ocasiones.

El objetivo es claro: levantar las maltrechas audiencias de La 1, que firmó en 2021 su peor dato histórico anual con un 8,8% de cuota de pantalla. Y es que, de media, la Selección Española consiguió reportar a Telecinco en Rusia 2018 un 70,8% y 11.797.000 espectadores. Así, la principal cadena de Mediaset España consiguió promediar un 15,8% en junio de 2018. 

Sin embargo, esta controvertida compra no deja de ser un producto altamente envenenado. Y es que, por una parte, este Mundial es un contenido perecedero que sólo servirá para mejorar los datos durante esos dos meses con espectadores 'infieles' y no para atraer nuevas audiencias al canal. Tal y como lleguen esas semanas a la cadena, se marcharán. 

Con esos 35 millones de euros, RTVE podría producir entre 20 y 30 programas, con una media de 20 trabajadores, que sin ninguna duda le ayudarían a construir una parrilla más sólida y estable que atrape a nuevas audiencias. 

Pero, por otra parte, esta competición no suma imagen de marca para RTVE sino que ayuda a destruirla, ya que Qatar es una monarquía absoluta donde no se respetan los derechos humanos, las mujeres siguen siendo discriminadas, se han reanudado las ejecuciones tras un paréntisis de 20 años, se condena a prisión a homosexuales y donde han muerto 6.500 trabajadores en las obras de los estadios.

Se ponen además en entredicho los valores que propugna su presidente, José Manuel Pérez Tornero, quién esta misma semana defendía que "RTVE tiene que dar un mensaje de defensa de la mujer, de igualdad, de respeto a su dignidad" al defender la letra de Slo Mo, la canción con la que Chanel acudirá a Eurovisión.

Como ya publicamos, la anterior directiva de RTVE, con Rosa María Mateo al mando, se negó a pujar por los derechos de la Supercopa de España celebrado en Arabia Saudí en enero de 2020 debido a la situación de la mujer en dicho país. "Si en RTVE apostamos por el deporte femenino, ¿qué hacemos en un país donde las mujeres son encarceladas por defender sus derechos?", defendieron entonces desde RTVE.

[Más información: RTVE pujará por los derechos del Mundial de Qatar 2022: ¿ya no importan los derechos humanos?]