Álvaro Prieto murió electrocutado entre los vagones del tren, según revela la autopsia

Álvaro Prieto, cuyo cadáver fue hallado este lunes en un tren en movimiento en Sevilla, murió de manera accidental. Según el resultado definitivo de la autopsia, el joven cordobés de 18 años falleció electrocutado el mismo día de su desaparición en el propio lugar donde lo han encontrado, entre dos vagones.

Así lo avala el hecho de que el cadáver tiene las manos quemadas y no tenía pelo, una circunstancia que es compatible con ser víctima de una fuerte descarga eléctrica. Además, fuentes de la investigación piensan que este accidente pudo ocurrir el mismo día, dado que el cuerpo estaba en avanzado estado de descomposición tras cuatro días. Álvaro Prieto desapareció el 12 de octubre.

Los investigadores piensan que el joven futbolista del Córdoba C.F. pudo esconderse ahí después de haberse colado en las vías del tren, informa Diario de Sevilla. Además, que se haya levantado el secreto de sumario durante esta mañana es otro indicio de que la muerte ha sido accidental, y que no parece que haya habido un homicidio.

[El tren donde ha aparecido el cuerpo de Álvaro Prieto "no se había movido desde el 24 de agosto"]

Según explicó Renfe en un comunicado después de que la Policía Nacional confirmase la identidad del cuerpo en la mañana de este lunes, el tren donde se encontraba el cadáver estaba averiado y no se había movido desde el pasado 24 de agosto. Esto refuerza la hipótesis de la descarga eléctrica, quedando descartado que el joven muriera aplastado por el movimiento de los vagones en el espacio que separa uno de otro.

El tren se trata de una unidad de la serie 449 de media distancia convencional que Renfe usa para trayectos cortos y tan sólo se había movido para unas maniobras de prueba dentro de la estación este mismo lunes, cuando el cuerpo apareció ante las cámaras de Televisión Española en una escena del todo inusual.

Un tren de la serie 449 de Renfe como en el que fue hallado el cuerpo sin vida de Álvaro Prieto.

Según Miguel Bustos, experto en ferrocarriles y responsable de las páginas Trenvista y Viajar en Tren, “es un tren de ancho ibérico que Renfe usa para cortas distancias. Es un tren articulado con los bogies [el carro donde van las ruedas] compartidos entre dos coches”, prosigue.

Fue sobre uno de estos bogies donde apareció el cuerpo de Prieto, en un espacio sin conexión con el interior del tren. “A nivel interior hay pasillos de intercomunicación aislados del exterior. No es un tren antiguo cuya conexión entre vagones da al exterior. El paso entre coche y coche es súper seguro y no hay ninguna manera de acceder al exterior. Si este chico se subió ahí tiene tuvo que hacerlo desde fuera”, asegura Bustos.

El pasillo interior de la serie 449 de Renfe.

En el espacio exterior de separación entre vagones, Bustos explica que hay numerosos cables con corriente eléctrica de 3.000 voltios que conectan uno y otro vagón. “El tren estaba averiado y apartado, con lo que, en principio, no debería tener electricidad. Pero también puede ser que Renfe estuviese haciendo pruebas y los operarios conectasen la toma de corriente y que el chico sufriera una descarga, o que estuviese conectada la energía auxiliar por baterías”, dice el experto.

Pese a los primeros resultados de las pesquisas tras la inspección ocular, para Bustos “es todavía pronto” para especular con las causas de la muerte. “Hay muchas cosas que no cuadran: el tren estaba parado, hay que preguntarse por qué tenía corriente, estaba en una zona de taller de vías al aire libre que suelen tener videovigilancia. Cómo y por qué llegó hasta ahí sin que nadie viese nada raro es lo primero que hay que esclarecer. Hay que esperar a que concluya la investigación”, dice Bustos.

Cuatro días

Durante cuatro días con el joven desaparecido, ni la Policía ni la propia UME, que la tarde del domingo iba tras su pista en la estación con perros de búsqueda, dieron con ningún indicio sobre el paradero de Prieto. Fue en la mañana del lunes cuando las cámaras de los reporteros de TVE que cubrían la desaparición en uno de los andenes de la estación, registraron por casualidad el cadáver entre los vagones del tren averiado. Éste estaba en movimiento por unas pruebas que ejecutaban operarios de Renfe.

[Aparece el cuerpo de Álvaro Prieto entre dos vagones de un tren en marcha en Sevilla]

Prieto, estudiante de ingeniería y futbolista de los juveniles del Córdoba C.F., había viajado el miércoles 11 de octubre a Sevilla para ir a una fiesta. Al día siguiente tenía que coger el tren de regreso a casa. Al parecer, se había quedado sin batería en el móvil, de tal forma que, al no poder enseñar el billete, lo perdió. Se ha especulado con que intentó subirse a otro tren, extremo que no está confirmado. El último mensaje que envió a sus padres fue "Voy a la parada”.