Pablo Motos hace Wakeboard.

Pablo Motos hace Wakeboard.

Reportajes

El deporte adictivo que practica Pablo Motos en verano: un experto desvela todos sus beneficios

Todos los veranos hace Wakeboard en la playa. Antonio José Gutiérrez ‘Guthy’, instructor, habla con EL ESPAÑOL sobre cómo seguir los pasos del presentador de El Hormiguero.

7 agosto, 2022 01:51

La afición de Pablo Motos por practicar todo tipo de deporte para mantenerse en forma le ha hecho probar el boxeo o la musculación, pero en verano, el presentador de El Hormiguero prefiere otro tipo de deportes al aire libre, sobre todo si están relacionados con el agua para no pasar calor. “Distintas formas de probar el agua sin querer y la felicidad de saltar un poquito más alto”, comentó hace un par de veranos el valenciano en su cuenta de Instagram cuando mostró como practicaba Wakeboard, un deporte acuático que se puede realizar en lagos o en el mar.

EL ESPAÑOL ha contactado con Antonio José Gutiérrez ‘Guthy’, instructor de Xtreme Gene Watersports Spain, una de las escuelas más prestigiosas de este deporte en España que se encuentra en el embalse de la Breña (Almodóvar del Río, Córdoba), con multitud de clientes de dentro y fuera de nuestras fronteras, para que nos explique en qué consiste el deporte que ha cautivado al conductor del programa de Antena 3.

Empezó hace años

Aunque ya lo practicaba antes, fue en el verano de 2021, cuando Pablo Motos al concluir la temporada de El Hormiguero, lo primero que hizo fue acudir a un pantano para mostrar en redes la práctica del Wakeboard, una mezcla de esquí acuático y snowboard. El valenciano quiso compartir con sus seguidores de Instagram un vídeo donde se le podía ver deslizándose sobre el agua encima de una tabla mientras iba agarrado a una cuerda de la que tiraba una lancha.

Pero no se detuvo ahí. Cuando cogió un poco de confianza, no dudó en ponerse a realizar maniobras y saltos demostrando la soltura que había logrado en pocos días. También se animó con otra modalidad acuática, el Wakesurf, que para practicarla hace falta un barco específico que genere olas para poder surcarlas con la tabla.

El presentador colgó un vídeo donde se le podía ver surfeando tras la estela de una embarcación, pero en un momento de las imágenes soltaba la cuerda que le unía a la lancha para hacerlo él solo, siguiendo las instrucciones de Juan Ibáñez (la hormiga Trancas). "¿Se puede surfear la ola de un barco sin ninguna cuerda que te ayude? La respuesta es sí. Aprendiendo y disfrutando a tope", comentó el presentador.

Qué es

Pero bien, ¿qué es exactamene? Lo explica Antonio José Gutiérrez ‘Guthy’: “El Wakeboard es un deporte acuático que combina varios deportes en el cual te deslizas sobre el agua encima de una tabla siendo arrastrado por una cuerda (palonier). Se basa en el equilibrio y en conseguir la distribución correcta del peso sobre la tabla”.

El equipo necesario es un cabo especial que une el barco con el deportista y que debe tener cierta resistencia, ya que será la que tire de la persona y le permita desplazarse sobre la estela del barco. También hace falta un chaleco salvavidas por seguridad, pero tiene que tener unas características concretas, debe de ser ligero y cómodo, que no obstruya los movimientos para hacer piruetas y saltos. Por último, una tabla especial de espuma y resina que va recubierta de una capa de fibra de vidrio. Debe tener suficiente calidad para aguantar la presión ejercida por el agua y el cuerpo de la persona. Además, pueden llevar pequeñas aletas en diferentes configuraciones para lograr determinadas acrobacias.

Pero no solo consiste en una embarcación, un chaleco, una tabla y una cuerda, ya que el Wakeboard tiene dos versiones, la tradicional, con barco o lancha de arrastre y otra variante con un sistema de torres, poleas, cables y un motor. “En esta segunda modalidad no hay olas y estas se sustituyen por módulos en los que puedes hacer toda la serie de trucos, saltos y acrobacias que seas capaz”, explica Guthy.

Para el Wakesurf, en cambio, se necesita un barco específico (intraborda) para que genere un tipo de ola concreta. Sin embargo, el Wakeboard puede ir tirado por casi cualquier barco (siempre que no se quiera hacer a nivel profesional). “En el Wakesurf la cuerda solo se utiliza para salir y se suelta una vez se ha alcanzado la velocidad adecuada, en el Wakeboard se continúa agarrado a ella. Además, la tabla va libre bajo los pies mientras que en el Wakeboard va sujeta mediante cinchas y botas. Ambos son una combinación de varios deportes como el snowboard, el skateboard, el esquí y el surf”, comenta el instructor.

Xtreme Gene (3)

Xtreme Gene (3)

- Para alguien que está empezando: ¿Cuál recomendaría practicar primero?

- Para principiantes, personas que no hayan probado nunca un deporte de arrastre o de tabla, yo aconsejo comenzar con el Wakeboard (como hizo Motos) porque los pies van atados en las fijaciones, así van siempre en la posición correcta y es una cosa menos de la que preocuparse. Es verdad que al principio da un poco de agobio verse los pies sujetos e inmóviles, pero al poco te das cuenta de que facilita mucho las cosas, ya te centras en tus brazos, en repartir bien el peso y en tener las rodillas flexionadas.

- ¿Qué preparación física hace falta para practicarlo?

- Para iniciarte y pasar un buen rato no necesitas una forma física ni una preparación previa de ningún tipo. Tengo clientes que no han hecho en su vida ningún deporte y no pasa nada. Si quieres convertirlo en algo un poco más serio si tienes que entrenar para estar fuerte. Salir a correr, ir al gimnasio a hacer ejercicios específicos, hacer crossfit… Obviamente, cuanto más fuerte estés y en mejor estado físico, mejor aguantas porque un set, que suele durar unos 15 minutos, es duro y cansa mucho.

- Motos combina este deporte con otros como el boxeo y también practica yoga y meditación. ¿Es todo compatible?

- Claro que es compatible y combinable con otros deportes. Yo, por ejemplo, he jugado mucho al fútbol, voleibol, hago yoga y practico continuamente Wakeboard y Wakesurf. De hecho, he tenido y tengo aquí en el centro a deportistas de otras disciplinas, como jugadores de fútbol profesional. Además, el yoga te ayuda muchísimo tanto en la elasticidad y el equilibrio como en el tema mental de concentración, diría que no solo es compatible sino que es muy recomendable.

- Pablo Motos lo practica y supera los 50 años (56). ¿Es aconsejable para todas las edades?

- El abanico de edades es súper amplio, igual que te he dicho antes que no se necesita ningún tipo de preparación física previa tampoco está limitado a ninguna edad. Nosotros somos una escuela y como tal estamos para enseñar a cualquiera que quiera aprender. Tenemos niños muy pequeñitos que con dos o tres años comienzan a iniciarse poco a poco con un tipo de tabla especial en la que va sujeto directamente el palonier al barco. Luego, para rodar más libres, empiezan a los siete u ocho años hasta la edad que quieran. Tengo un alumno que se inició en los deportes acuáticos con 83 años.

- ¿Qué beneficios aporta este deporte a los que lo practican?

- Tiene numerosos beneficios para nuestro cuerpo. Por ejemplo, mejora el tono muscular, ya que necesitas fuerza para mantener el equilibrio en la tabla. Al hacer ese esfuerzo, por supuesto, tienes un gasto calórico importante; también potencia tus reflejos y la concentración al estar pendiente de coger las olas provocadas por el barco. Si intentas hacer saltos, tu coordinación motora y la flexibilidad aumentarán. También es fundamental que, al ser una actividad altamente física, te ayuda a liberar la tensión y el estrés generando gran cantidad de endorfinas. Por último, al practicarlo en un entorno de naturaleza, te produce sensación de bienestar y libertad.

Cuidado con las lesiones

Este verano, Motos ha vuelto a publicar un vídeo donde se le puede ver practicando este deporte, pero también estrellándose contra las olas tras una caída: “Llevo ocho años intentando saltarme las dos olas. Cuando me he levantado esta mañana, me he dicho: 'Es hoy'. Este es el resultado. Nunca es demasiado tarde para dar un último zarpazo”, afirmó en su cuenta de Instagram.

Pero este, como en todos los deportes, hay que tener mucho cuidado con las lesiones que pueden producirse practicándolo, ya que según los estudios realizados por diversas revistas médicas, el porcentaje más elevado de lesiones en los deportes acuáticos ocurren en las extremidades inferiores. Pueden ir desde contusiones a heridas, cortes, contracturas, latigazos cervicales, luxaciones, esguinces y problemas de oídos, entre otros.

- ¿Qué ejercicios de calentamiento previos hay que hacer para no lesionarse?

Hay que hacer una serie de estiramientos previos para evitar las lesiones. El Wakeboard está considerado un deporte de riesgo y, a pesar de ello, no es tan lesivo como por ejemplo el fútbol o el tenis. Yo llevo 20 años practicándolo y la única lesión que he tenido ha sido una rotura de nariz. Si es cierto que las rodillas son la parte que más sufre con este deporte y he visto a algún alumno al que se le ha salido un hombro, otro que se ha dado un golpe en la cabeza con la tabla… pero lesiones como tal, solo rodillas (ligamentos y meniscos) y pocas, la verdad. Es cierto que si ruedas mucho te acaba pasando como a los pilotos de motocross, que el cuerpo se resiente a la larga, pero eso a niveles muy profesionales.

El agua, la pasión de Motos

Como buen valenciano, a Motos le encanta el mar y todo lo que tenga que ver con el agua. En otras ocasiones, el presentador ha mostrado en sus redes sociales vídeos practicando submarinismo entre bancos de barracudas en la localidad valenciana de Jávea y señalando “como estaba hoy el mar de vida”, o navegando mientras le acompaña un grupo de delfines.

También ha usado el medio acuático para practicar deporte de fuerza, ya que en uno de los vídeos se le podía ver caminando por una piscina bajo el agua con unas pesas en las manos, haciéndose un largo sin respirar e intentando hacer unas flexiones antes de emerger. Al final de las imágenes también aparecía Juan Ibáñez (la hormiga Trancas) lanzando burbujas, haciendo gala de su amistad y de que no se separan ni en vacaciones. 

Los orígenes del Wakeboard

Quizá fue en Nueva Zelanda, no se sabe a ciencia cierta, pero sí que fue en los años 80, en distintos lugares del mundo, donde mucha gente comenzó a practicar este deporte. En cualquier caso, fueron los surfistas los que, al no encontrar olas adecuadas, comenzaron a surfear la estela que dejaban las motos de agua, vieron que era divertido y comenzaron a fabricar unas tablas más específicas para ello. “Aunque aquí se conoce más el Wakeboard, su predecesor es el Wakesurf, que fue el primer deporte de agua de arrastre”, afirma Guthy.

- ¿Tiene muchos seguidores en España?

- Yo llevo unos veinte años metido en el mundillo y es verdad que ha ido aumentando. Cuando yo empecé prácticamente nos conocíamos todos los raiders y todas las escuelas, ahora cada vez hay más participantes y más personas con ganas de aprender a practicar. Es cierto que la mayoría de nuestros clientes son extranjeros, un gran número ingleses, porque el Wakeboard es muy conocido y practicado de Francia para arriba, pero no tanto de Francia hacia abajo.

- ¿Es un deporte caro o lo puede hacer cualquiera?

- Es un deporte en el que dependes de un barco y ya solo por eso barato, barato no puede ser (risas), aún así no es algo desproporcionadamente caro. Nuestra escuela tiene uno de los precios más económicos del mercado, son unos 40€ el set para principiantes y unos 45-50€ para medio-avanzado. El set es, en teoría, de 15 minutos de duración, si bien es cierto que yo eso no lo llevo ni mucho menos a rajatabla, voy viendo y, dependiendo de cómo vea al alumno, me adapto. Siempre digo que el paso más complicado del Wakeboard es conseguir levantarse por primera vez, pero en nuestra escuela más de un 95% de los alumnos consigue mantenerse en pie en la primera clase.

- Se practica en lagos, pero ¿también se puede hacer en el mar?

- Se puede practicar en el mar, pero lo ideal es hacerlo en aguas cerradas y planas como las de un embalse o pantano. El viento es el peor enemigo de este deporte; si hay demasiado, es impracticable.