A Samuel lo mataron en un ajuste de cuentas por drogas al llevar en su coche a un amigo ‘narco’

Samuel Vizcaya, uno de los asesinados en Huelva el pasado martes, lo fue por error. O, mejor dicho, por estar en el peor lugar en el momento equivocado. Él no era el objetivo –como confirman a EL ESPAÑOL amigos de la víctima–. Era su amigo Manuel Granado, apodado el Sevillano o el Gitano, al que llevó al encuentro con los dos autores confesos del crimen para un ajuste de cuentas por narcotráfico. Uno de los cadáveres presentaba un tiro y el otro lesiones en la cabeza, según publica Huelva Información.  

“Él era un buen chico. Es una pena”, lamenta Pepe, familiar de Samuel, en conversación con este periódico. Trabajaba en el campo recolectando arándanos, estaba casado y tenía una hija de dos años. “Nunca se había metido un lío. No tenía enemigos, que nosotros supiéramos”, prosigue. Sin embargo, la fatalidad le llevó por el camino equivocado. Se ofreció a llevar a su amigo Manuel al encuentro en su Seat Ibiza rojo. Los dos se dieron cita con los detenidos y, tras asesinarlos, los tiraron en el interior de un pozo en una finca abandonada en Cartaya. 

Samuel, a sus 25 años, desapareció el domingo a las 22:00 horas. Fue cuando lo vieron por última vez. “Le perdimos la pista y el lunes por la mañana nos avisaron de que había aparecido su coche quemado”, contaba entonces Pepe a este periódico. Era la única pista que tenía su familia, que se puso en contacto con los medios de comunicación para comenzar la búsqueda. En menos de 24 horas después, encontraron su cuerpo junto al de otra persona. 

Samuel, 27 años.

Él fue identificado rápidamente. La familia, en conversación con este periódico, lo confirmó poco después del hallazgo. Se ha tardado más en dar el nombre de Manuel Granado, que también desapareció el domingo, como él. Ambos habrían ido juntos al encuentro con los dos asesinos confesos del crimen para un ajuste de cuentas por drogas. Los mataron. 

Hasta el momento, sólo han sido detenidas dos personas de 30 y 45 años. Pero, según Huelva Información, podría estar implicada también una tercera, pareja de uno de ellos, por encubrimiento. Lo que parece claro es que Samuel, que tan solo había acudido para ayudar a su amigo, falleció circunstancialmente por un ajuste de cuentas.