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La tribuna

Socorro, los funcionarios no pueden (tele)trabajar

5 enero, 2023 08:02

"Españoles, la rave de Granada... ha muerto". Lo ha hecho tras seis días. Tras acoger la visita de miles de personas. Pero sus allegados tienen la esperanza de la resurrección. Leo un titular del diario El País: "Los vecinos de La Peza piden que la fiesta ilegal vuelva el año que viene".

Hay dos escenas muy importantes en este reportaje. Una en el Bar Fernando, el bar del pueblo. Está puesta la televisión, donde aparece el siguiente rótulo: "Los vecinos, desesperados". Los parroquianos del Bar Fernando, con asombro, se quejan: "¡Pero si lo que queremos es que se queden". Segunda escena, en el mercadillo: entre bragas, toallas y sábanas, dos señoras, como salidas de Blade Runner, dicen: "Hemos visto muchas drogas". Luego restan importancia al ruido: "¡Más ruido hace un frigorífico viejo!". Al parecer, el hecho de que la fiesta ilegal fuera gratuita y de que los organizadores, muy limpios, se llevaran toda la basura ha encandilado a los vecinos de La Peza.

La fe, víspera del día de Reyes, se ha impuesto a lo terrenal. El especial de La Razón sobre Benedicto XVI ha durado más días que la rave de Granada. Pero el buen rollo de los hippies con los vecinos de La Peza no sucede entre los partidarios de Ratzinger y del Papa Francisco. Noticia de La Vanguardia: "El secretario privado de Ratzinger ajusta cuentas con Bergoglio antes del entierro. Georg Gänswein ataca abiertamente al actual pontífice por restringir las misas en latín que impulsó su predecesor".

Imagen de Benedicto XVI en la capilla ardiente.

Imagen de Benedicto XVI en la capilla ardiente.

En otro orden de cosas: hoy, 5 de enero, ha llegado la cabalgata de Juan Carlos I a los periódicos. El emérito cumple 85 años. El Mundo revela que lo va a celebrar en Abu Dabi con las infantas y algunos amigos. Es el tercer cumpleaños que pasa fuera de España. La Razón, por ejemplo, resalta que ya no tiene juicios pendientes en nuestro país. EL ESPAÑOL se ha puesto en contacto con él y ha obtenido una respuesta campechana: "Gracias por felicitarme por mis 85 tacos". Esta crónica revela que el Emérito no tiene horizonte para regresar definitivamente a Madrid.

Por ABC sabemos que la nueva ilusión de Juan Carlos I es una mudanza. Está a punto de dejar la residencia que le proporcionaba el emir y ya está acondicionando una nueva casa, probablemente en la misma urbanización, con las pertenencias que le han ido llevando desde Madrid.

Leo la siguiente noticia en El Confidencial: "Corregir la ley del sólo sí es sí. Un anuncio político que no frenará las revisiones a la baja de las penas". Pablo Gabilondo se ha entrevistado con varios expertos, que concluyen lo siguiente: los efectos de tal corrección se limitarán a las nuevas agresiones. "En lo que se refiere a las cometidas anteriormente, los reos seguirán apoyándose en la actual por serles más favorable. Ningún ajuste técnico puede quitarles ese derecho".

En el PP, mientras tanto, se preparan para las elecciones de mayo. Feijóo ha encomendado a Elías Bendodo que replique el "efecto Moreno" en las elecciones de mayo. Vamos, que broncee el partido como lo hizo el actual presidente de Andalucía. El líder gallego quiere dibujar los comicios autonómicos y locales como un "plebiscito a Pedro Sánchez". Los jóvenes, los que creemos en el oráculo de la rave de Granada, confiamos en que Feijóo encuentre una palabra distinta a "plebiscito" porque, si no, sólo podrá convencer a gente de vuestra edad.

Termino con una noticia muy llamativa, que nos toca a todos muy cerca: el teletrabajo. Dice EL ESPAÑOL: "María Jesús Montero avisa a los funcionarios. El teletrabajo "no es un derecho" y siempre será "temporal y reversible". Así queda el anteproyecto de ley de función pública, ya revisado por el Consejo de Ministros". No es baladí que esta información la firme un periodista de apellido "Socorro". Eduardo Ortega Socorro.

Dice el anteproyecto de ley: "La prestación del servicio mediante teletrabajo habrá de ser expresamente autorizada y será compatible con la modalidad presencial. En todo caso, tendrá carácter temporal, voluntario y reversible salvo en supuestos excepcionales debidamente justificados".

Pobres funcionarios: después de cuarenta años, se lanza una norma que promueve la revisión de su trabajo y ahora el Gobierno quiere que vayan a la oficina. Yo, si fuera ellos, me echaba a la calle.

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