Un 'peaje' para entrar en Venecia: este es el costoso impuesto que tendrán que pagar los turistas en 2024

Italia es uno de los países más bonitos de Europa. Por ello, decenas de millones de turistas lo eligen cada año como uno de sus destinos preferidos. Y dentro del estado transalpino, existen varios puntos que cuentan con especial interés. Uno de ellos es Venecia, ciudad famosa por sus canales, por sus paseos en góndola y, sobre todo, por su belleza. 

Sin embargo, a partir del año 2024, los turistas que quieran viajar hasta Venecia tendrán una muy mala noticia. Para entrar en la bonita urbe italiana habrá que pagar un impuesto extra. Algo así como una especie peaje solo por el hecho de ser turistas.

El ayuntamiento de Venecia aprobó el pasado mes de septiembre la puesta en marcha de este pago a todo turista que quiera visitar la ciudad. Este impuesto es conocido como "contribución de acceso" tal y como referencian las autoridades. Ahora, se ha dado a conocer cómo se gestionarán estos pagos que marcarán el inicio de la temporada alta de turistas en Venecia. 

Un impuesto para los turistas que quieran visitar Venecia

Visitar Venecia nunca será lo mismo. Eso es lo que ha decidido el Ayuntamiento de la ciudad italiana, el cual aprobó el pasado mes de septiembre que todos aquellos visitantes que quieran hacer entrada en sus fronteras tendrán que abonar un pago a modo de "contribución de acceso". 

Esta especie de peaje, aunque no es muy caro, sí ha resultado abusivo para algunas personas que se han quejado de tener que abonar parte de sus ahorros solo por el hecho de poner un pie en la ciudad. El coste es de 5 euros y empezará a cobrarse el 25 de abril del próximo año. 

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Hasta entonces, esta medida se encontrará en pausa. Aún así, la introducción de este peaje tendrá un proceso gradual. Después de entrar en vigor el 25 de abril, durará de manera ininterrumpida hasta el 5 de mayo. Este es el periodo de tiempo en el que el Ayuntamiento de Venecia espera una crecida de los turistas. 

Después, solo se cobrará los fines de semana hasta que llegue la parte dura de la temporada alta del verano, marcada para el 14 de julio. Solo se hará una excepción, los días 1 y 2 de junio, con motivo de la celebración del día de la República de Italia. Este es el plan marcado por el consistorio para organizar este particular impuesto cada vez más asentado en algunas de las ciudades más turísticas de Europa. 

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"No es una revolución, sino el primer paso de un camino para regular el acceso de los visitantes diarios. Un experimento que tiene como objetivo mejorar la habitabilidad de la ciudad, de quienes viven en ella y de quienes trabajan en ella". Así lo explicaba el alcalde del municipio, Luigi Brugnaro. 

Este pago será obligatorio de 08:30 horas de la mañana a las 16:00 horas de la tarde. Las personas que tendrán que pagar este impuesto serán los mayores de 14 años y quedarán exentos, obviamente, los residentes, los trabajadores y quienes estudian en la ciudad. 

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Un apunte muy importante es que no tendrán que pagar este impuesto aquellos turistas que tengan una reserva de alojamiento en Venecia realizada antes de la entrada en vigor de esta norma. Además de la obligatoriedad de este pago, también se ha dado a conocer las multas para aquellos que intenten evitarlas. Estas irán desde los 50 hasta los 300 euros. 

El Ayuntamiento de Venecia creará una sala de control en la que recibirán datos de los sensores que se encargarán de contar el número de personas en la ciudad, pero también datos llegados desde establecimientos como museos, muelles o embarcaderos. El pago estará en vigor en la ciudad antigua, que acoge la emblemática plaza de San Marcos, y no estará presente así en las islas más pequeñas a su alrededor. 

"Venecia es la primera ciudad del mundo en implementar este camino que podría ser un ejemplo para otras ciudades frágiles y delicadas que necesitan ser protegidas. Desde los años 1950 se viene diciendo que Venecia es una ciudad moribunda. Hoy reiteramos que Venecia es una ciudad viva, que seguirá abierta a los turistas que vienen de todo el mundo a visitarla con respeto". 

Una medida rodeada por la polémica

Esta medida fue aprobada en septiembre, aunque no sin dificultad, ya que la polémica que generó provocó protestas de centenares de ciudadanos que se oponían a ella. El pleno municipal en el que recibió luz verde fue de lo más bronco. Venecia recibe unos 30 millones de visitantes al año, pero sufre una enorme sangría demográfica. En su centro viven menos de 50.000 personas, la cifra más baja desde 1871. 

Desde el año 1987, Venecia es Patrimonio Mundial de la Unesco y ahora se ha recomendado su inclusión en la lista de patrimonio en peligro. El propio Comité de la Unesco ha visto con buenos ojos la aprobación de este peaje como una medida de conservación de la ciudad para así atraer más visitantes.