Luis Medina, a su llegada este lunes a los Juzgados.

Luis Medina, a su llegada este lunes a los Juzgados. Efe

Tribunales CASO MASCARILLAS

El juez cita como testigo a la amiga de Luis Medina que le dio el teléfono del primo del alcalde Almeida

El magistrado también pide a las partes que aclaren en calidad de qué piden la citación de Carlos Martínez-Almeida. Podemos solicitó su imputación.

28 abril, 2022 13:00

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El juez Adolfo Carretero, encargado de investigar el caso Mascarillas, ha citado como testigo a María Díaz de la Cebosa, la amiga de Luis Medina Abascal que le facilitó el teléfono del primo del alcalde José Luis Martínez-Almeida para que el aristócrata pudiese hacer llegar su oferta de material sanitario al Ayuntamiento de Madrid.

Así consta en una providencia del Juzgado de Instrucción número 47 de la capital, a la que ha tenido acceso EL ESPAÑOL. Díaz de la Cebosa deberá acudir el próximo día 9 de mayo, a las 10.30 horas, a la madrileña Plaza de Castilla.

En su primera declaración ante el juez, este lunes, Medina aseguró fue ella quien le facilitó el móvil de Carlos Martínez-Almeida, al que, según dijo, no conoce ni conocía "de nada". Este último le entregó el correo electrónico de la responsable de las compras municipales y fue así como Luis Medina pudo ofrecer material sanitario a la Administración.

"A mí me pasan el contacto de Carlos Martínez-Almeida. Una amiga en común (...), María Díaz de la Cebosa, directora de una universidad en la que yo estuve año y medio. (...) Esta señora me dio el teléfono (...). No le conocía de nada a este señor (...). Hablando con María, le dije que quería contactar con el Ayuntamiento o con la Comunidad [de Madrid]. Llamé a Carlos Martínez-Almeida, le dije que teníamos material sanitario para vender. Al ser el primo del alcalde, imaginé que me podía dar un contacto en el Ayuntamiento. (...) Carlos Martínez-Almeida me dio un e-mailque creo que era de Elena Collado, responsable de compras en ese momento", manifestó a las preguntas del magistrado Adolfo Carretero. 

Precisamente, Collado también deberá acudir como testigo ese mismo 9 de mayo. Otras dos personas más también están citadas esa fecha: Cristina Sierra Daimiel y Javier Martín Moreno. Ambos son trabajadores en entidades bancarias.

900.000€ por el contacto

Según declaró ante el juez el empresario Alberto Luceño, socio de Luis Medina en esta operación, el hijo de Naty Abascal cobró más de 900.000 euros por facilitarle, a su vez, el contacto con Elena Collado. El encargado de negociar ese contrato con la funcionaria encargada de las compras fue, desde ese momento, Luceño.

En dicha providencia, fechada este miércoles, el magistrado también insta a las partes a especificar al Juzgado en calidad de qué solicitan que declare el primo del alcalde, el abogado Carlos Martínez-Almeida. El partido Más Madrid lo ha pedido como testigo y Podemos, como imputado. Ambas formaciones ejercen la acusación popular, junto al PSOE, también personado en el caso Mascarillas.

Tal y como ha informado EL ESPAÑOL, en un escrito enviado al juez, el fiscal Luis Rodríguez Sol ya se ha opuesto a su imputación. Y pide al magistrado ceñir la investigación, únicamente, a los dos únicos querellados: Luis Medina y Alberto Luceño.

'Caso Mascarillas'

A principios de abril, la Fiscalía Anticorrupción presentó una querella contra ambos. En ella, el Ministerio Público relataba que "inflaron" el precio de tres contratos sanitarios con la funeraria municipal: para guantes, mascarillas y test contra la Covid-19.

Lo habrían hecho "de común acuerdo y con ánimo de obtener un exagerado e injustificado beneficio económico". Y entregaron al consistorio material defectuoso o que no cumplía lo acordado, en los peores meses de la pandemia de coronavirus. La empresa municipal pagó por todos los artículos unos 11 millones de euros de dinero público.

Luis Medina cobró 912.742 euros como comisión, a razón de un dólar por cada mascarilla entregada. Así lo reconoció este lunes ante el juez y, antes, al fiscal del caso. Luceño, en total, más de cinco millones de euros por los tres contratos.

Según la querella de Anticorrupción, los comisionistas usaron, supuestamente, documentos falsificados para justificar estos abultados ingresos en sus entidades bancarias. Y, con la compra de bienes de lujo —entre ellos, un piso en Pozuelo, un velero o varios coches deportivos—, habrían tratado de reintroducir este dinero en el circuito legal.