Tomás Serrano

Política

Sánchez se convertirá hoy en Malta en el primer presidente español que da un mitin con un exministro suyo en la cárcel

El presidente del Gobierno aún no se ha pronunciado sobre la entrada en prisión del que fue su titular de Transportes durante tres años.

Más información:El PSOE arremete contra la estrategia de defensa de Ábalos y Koldo basada en "mentiras", "difamaciones" y "chantajes"

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Las claves

Pedro Sánchez dará un mitin en Malta como presidente de la Internacional Socialista, mientras su exministro José Luis Ábalos está en prisión.

Ábalos, exministro de Transportes y aún diputado, ingresó en la cárcel por orden del Supremo junto a su asesor Koldo García, lo que ha generado tensiones en el PSOE.

La dirección socialista acusa a Ábalos y Koldo de intentar implicar a otros políticos para beneficiarse judicialmente y exige a Ábalos que renuncie a su acta de diputado.

Actualmente, solo cuatro países europeos están gobernados por partidos de la Internacional Socialista, liderada por Sánchez: España, Noruega, Malta y Albania.

Pedro Sánchez pronunciará este sábado en Malta un mitin ante el Consejo de la Internacional Socialista (IS), que preside desde 2022.

Sánchez se convierte así en el primer presidente del Gobierno de la Democracia que protagoniza un acto político de estas características, mientras tiene en la cárcel a un ministro de uno de sus gabinetes: José Luis Ábalos.

Ni cuando José Barrionuevo entró en la cárcel Felipe González presidía el Gobierno de España, ni cuando lo hicieron Jaume Matas, Rodrigo Rato y Eduardo Zaplana, José María Aznar presidía el Consejo de Ministros. 

Sánchez aún no se ha pronunciado sobre la entrada en prisión del que fue su titular de Transportes durante tres años.

No lo hizo el jueves, cuando acudió junto al ministro Óscar López a la firma del acuerdo con los sindicatos para subir el sueldo de los funcionarios un 11% hasta 2028. Y este viernes no tuvo agenda pública.

La entrada en la cárcel de Ábalos y el que fue su asesor, Koldo García, ha desatado una guerra de nervios en el PSOE.

Porque ambos aprovecharon las horas previas para enviar varios mensajes a la dirección socialista.

La vicepresidenta de Hacienda María Jesús Montero atribuyó este viernes las palabras de Ábalos y Koldo a la "estrategia de personas que, estando ya en la cárcel, piensan que intentar implicar a otros políticos les puede aportar un beneficio en términos de su sentencia".

Y les advirtió de que "este Gobierno jamás se va a dejar chantajear por nadie".

En la misma línea, el PSOE difundió un comunicado en el que denuncia la "estrategia de defensa basada en mentiras y difamaciones" del que fuera su secretario de Organización, José Luis Ábalos.

La dirección de la calle Ferraz anunció que reclamará de nuevo a Ábalos que renuncie a su acta de diputado y advirtió de que "no va a dedicar ni un minuto más a desmentir sus falsedades".

Porque Ábalos ya está en prisión, pero mantiene el acta de diputado sin poder participar en las votaciones, lo que deja aún más en el aire la precaria mayoría del Gobierno en el Congreso. En el Pleno del jueves, PP, Vox y Junts tumbaron la senda de gasto, primer paso para tramitar los Presupuestos de 2026.

El Consejo de la Internacional Socialista que Pedro Sánchez presidirá este sábado en Malta es un reflejo del retroceso que estas fuerzas políticas han registrado en Europa en los últimos años.

En la actualidad, sólo cuatro países europeos están gobernados por partidos de la Internacional Socialista que preside Sánchez: España, Noruega, Malta y Albania.

Los laboristas del Reino Unido abandonaron la Internacional Socialista en 2013. Y los socialdemócratas de Dinamarca, hoy en el Gobierno, lo hicieron en 2020.

De este modo, la Internacional que preside Sánchez tiene hoy el grueso de sus miembros en países de África y América Latina.

Pedro Sánchez pidió el pasado 18 de octubre, durante la cumbre del Partido de los Socialistas Europeos (PES) celebrada en Ámsterdam, "una movilización de todas las fuerzas progresistas del mundo" para frenar a la extrema derecha, cuyos discursos de "odio y mentiras", dijo, "socavan los cimientos de la democracia".