Ayuso crea una convención contra la izquierda para bloquear a Vox y lograr la mayoría absoluta
La presidenta madrileña aspira a atraer, al mismo tiempo, al electorado de Rocío Monasterio y al "socialista desencantado".
2 mayo, 2022 02:45Noticias relacionadas
Isabel Díaz Ayuso quiere "ensanchar" su base electoral... a izquierda y, sobre todo, derecha, para lograr la mayoría absoluta —que ya roza, según la última encuesta de SocioMétrica para EL ESPAÑOL— en las próximas elecciones autonómicas de 2023. Para ello, organizará una convención en octubre en la que apretar filas, apostar por la firmeza de "ideas", y así bloquear a Vox en la región.
Ese será el objetivo principal del futuro encuentro con afiliados, del que todavía se conocen pocos detalles por tratarse sólo de una propuesta. Pero en el acto de este pasado domingo en Majadahonda, cuando lo anunció, ya dejó entrever que el rumbo del que será su partido el 21 de mayo estará marcado por la beligerancia contra la izquierda política; haciendo del "socialismo free" su nuevo lema para la región.
Atraer a los votantes de Rocío Monasterio es fundamental para gobernar "en libertad". La presidenta madrileña estaría, según la encuesta antes mentada, a tres escaños de la absoluta, pero la formación a su derecha no sólo resistiría, sino que crecería un 1,1% con respecto a los pasados comicios. Seguiría dependiendo, por tanto, de sus votos para sacar adelante cualquier iniciativa parlamentaria.
Para fagocitar a Vox es fundamental centrar los ataques en exclusiva hacia la izquierda política. Por eso la futura baronesa del Partido Popular, en Majadahonda, cargó duramente contra el Gobierno de Pedro Sánchez, a quien acusó de "promover la división entre españoles", y prometió una región "socialismo free" a partir de 2023.
Pero, pese a este duro discurso, y aunque pueda parecer paradójico, desde Puerta del Sol no renuncian al voto del "socialista desencantado" con la deriva del PSOE. Acaso porque, en palabras de la presidenta madrileña, ahora mismo "no hay socialismo, hay santidad y una persona [Pedro Sánchez] que lo único que hace es pactar con el diablo y destrozar España con tal de quedarse unos meses más".
Para lograr esta quimera, esta contradictio in terminis que es atraer a la vez al votante de Vox y al "socialista desencantado" desde el equipo de la presidenta creen haber encontrado la fórmula: apostar por "las ideas" para "seguir atrayendo" al simpatizante de Vox, por cuanto muchos migraron del PP, y confiar en que "la gestión económica y de los servicios públicos" convenza a algunos exvotantes del PSOE.
En este sentido, desde Puerta del Sol recuerdan a EL ESPAÑOL que la presidenta madrileña cimentó su contundente victoria electoral del pasado 4 de mayo sobre 100.000 votos procedentes del PSOE, que sigue cayendo en los sondeos. Pero su debacle beneficiaría sobre todo a Más Madrid, la nueva fuerza hegemónica en la izquierda regional. "El equilibrio es complicado, pero no imposible", zanja una persona con escaño cerca de la presidenta madrileña.
Congreso y convención
De ese equilibrio, el de atraer al votante de Vox y al socialista desencantado, dependerá la nota que Isabel Díaz Ayuso saque en los próximos comicios autonómicos, donde aspira a la mayoría absoluta. Un equilibrio que, por cierto, se ha demostrado en los dos enclaves escogidos para sus dos primeros actos de campaña.
Díaz Ayuso arrancó su campaña en Majadahonda, que es el municipio más populoso de España (72.000 habitantes) donde los populares gobiernan en coalición Vox. Y no olvidemos que la presidenta madrileña está dispuesta a dar entrada al partido a su derecha en "municipios importantes" tras el paso por las urnas en 2023.
Pero Ayuso continuará con su agenda el próximo miércoles en Fuenlabrada, que es la única del sur de la región que jamás ha sido gobernada por el Partido Popular, aunque desde Puerta del Sol esperan que eso cambie a partir de los próximos comicios municipales para que se una al "socialismo free".
Y su entorno tiene clara la fórmula para tan complicada empresa. "Muy buenos candidatos, ganadores, jóvenes, con ganas de renovar el partido" para municipios como Fuenlabrada, Alcorcón, Getafe, Móstoles y Parla, e incluso Rivas-Vaciamadrid, histórico enclave gobernado 30 años por Izquierda Unida.
Un nuevo PP de Madrid, en definitiva, que sea "callejero y pandillero", y que no se olvide de que "somos un partido que representa a la infancia, a la discapacidad, a los mayores, a las personas que triunfan y que muchas veces son perseguidas, a todos".
Este será concebido el 21 de mayo, cuando se clausure el XVII Congreso Autonómico Extraordinario que se celebrará en el IFEMA. De ahí saldrá un partido que no se parecerá a un "club de amigos", en obvia referencia a las imposiciones que Pablo Casado y Teodoro García Egea colaron en sus listas electorales.
El nuevo PP de Madrid tendrá una estructura orgánica relativamente pequeña, que sea "más ágil, cercana e ilusionante". En ella tendrán un papel protagónico sus afines, como Alfonso Serrano, su portavoz en la Asamblea de Vallecas, que goza de buena reputación como negociador y gestor interno, y suena como posible coordinador.
Este domingo Díaz Ayuso, desde Majadahonda, ha lanzado ya un primer mensaje a sus elegidos para 2023: "Os quiero ver a todos en los medios de comunicación, en las redes, con las asociaciones, con los ciudadanos, hablando con autónomos, escribiendo artículos, dando batallas, en las encuestas, en los medios, en todas partes y en la calle. Quiero que sea un partido callejero, pandillero, que está con la gente, que da esas peleas y que lo hace siempre con cabeza, con corazón y con humildad".