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Política

Alianza Cívica, el partido que nació durante el confinamiento y quiere acabar con la clase política

Ni de izquierdas ni de derechas ni de centro, Alianza Cívica se define como "el partido de las ideas, no de las ideologías".

22 enero, 2021 17:48

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La idea surgió durante el confinamiento duro. Mientras unos se las ingeniaban para convertir el salón de su casa en un gimnasio improvisado y otros padecían una fiebre pastelera repentina que les llevó a agotar las existencias de levadura en los supermercados, un pequeño grupo de ciudadanos indignados dijo basta. “Hasta aquí de esta clase política”. Con el tiempo que les ofrecía el encierro a causa de la crisis sanitaria, comenzaron a despertar de su letargo político y acabaron creando un partido. Así se gestó Alianza Cívica

Cuando la primera ola del coronavirus golpeaba con dureza a una España sin material sanitario suficiente para hacer frente a la pandemia, surgieron distintos chats de ayuda organizados por personas de la sociedad civil: ¿cómo se cobra un ERTE?, ¿cómo se pide un préstamo? Detrás de uno de esos grupos de WhatsApp, de inspiración altruista, trataba de responder a miles de dudas Herennia Trillo, hoy portavoz del partido político Alianza Cívica.

A Herennia le da “alergia” hablar de partido –prefiere usar el término proyecto- y evita a toda costa la palabra “líder” –“soy el último mono”- aunque ella representa la cara visible de esta nueva iniciativa política que nació precisamente un día después de que decayera el primer estado de alarma. “En el registro me dijeron que es el partido que más rápido se ha legalizado en democracia”, cuenta la portavoz de Alianza Cívica en conversación con EL ESPAÑOL. 

La formación emergente pide volver a una “democracia real que respete a los ciudadanos y deje de infantilizarles”. Su mensaje regeneracionista recuerda a los inicios de Podemos, Ciudadanos o Vox: gente harta de los de siempre que pide ser escuchada. Pero tienen claro que no son lo mismo. O que no han venido a hacer lo mismo.

“Nosotros no somos un movimiento orquestado por un profesor de Ciencias Políticas de la Complutense, somos gente que está en el sector privado cansada del maltrato institucional que se ha reunido de forma espontánea”. 

¿Otra diferencia? Prometen extinguir el partido en el momento en el que cumpla sus fines. “Es un partido para hacer carrera de la causa, no carrera en la causa. Aquí no hay nadie agarrado como una garrapata a un puesto”, afirma Herennia, en referencia a esa “clase política” con la que quieren acabar. “Han pervertido nuestro sistema”, lamenta.

En un mercado político saturado y donde la crispación te da el mejor titular, la noticia ahora es que surja un partido como Alianza Cívica. “El Congreso es tristemente un ring de boxeo donde la falacia hacia el contrario, la mentira, el interés propio o partidista conviven”. Esquivan el insulto parlamentario y piden “sensatez” y moderación, “recabando siempre la opinión de los expertos y técnicos” para dar solución a las necesidades que se planteen desde la sociedad.

Tampoco dicen moverse al servicio de un líder nacional, como funcionan el resto de partidos, denuncian desde Alianza Cívica.

El partido “pragmático”

¿De izquierdas o de derechas? “Ni izquierda, ni derecha, ni centro”. Alianza Cívica rehúye de las etiquetas, y sólo compran dos adjetivos: “Somos pragmáticos y transversales”. Son, según se definen, “el partido de las ideas, no de las ideologías”. “Nuestra base son los principios cívicos y escuchamos, no adoctrinamos”, se presentan en su manifiesto fundacional.

¿Concurrirán a las elecciones catalanas? “Preferimos ir sin prisa y en principio nuestra idea es concurrir a las próximas generales”, explica Herennia.

Aún en fase embrionaria, Alianza Cívica debate una a una las propuestas que van planteando los afiliados. Entre todas ellas destaca una “ley de responsabilidades y pactos políticos electorales” que, de ponerse en práctica, podría inhabilitar al mismo presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que prometió antes de las elecciones que no pactaría con Podemos ni dejaría descansar la gobernabilidad en formaciones independentistas. La iniciativa de Alianza Cívica pretende castigar a quienes en campaña electoral digan una cosa y tras abrirse las urnas y contar los votos no cumplan. 

UPyD y Cs 

El “aire fresco” con el que arranca Alianza Cívica ya está atrayendo a algunos ex de Unión Progreso y Democracia y de Ciudadanos, que miran con buenos ojos lo que empiezan a construir Herennia Trillo y su equipo. “Retoma en gran medida el aire fresco de UPyD porque surge como algo nuevo y parte de la sociedad civil, como los de Rosa Díez nacieron del colectivo ¡Basta ya!”. Quien escribe esto es Gonzalo Sichar, que militó en las filas de UPyD para después recalar en el partido de Albert Rivera. Tras convertirse en diputado provincial, dimitió y dejó todos sus cargos en 2019. Acusó a Rivera de utilizar Cs como una “plataforma electoral personal”. 

Varios exdirigentes del partido magenta y del naranja están llamando a la puerta de Alianza Cívica, según ha podido saber este periódico. Pero Herennia avisa: para ellos el mejor fichaje significa atraer a “ciudadanos de verdad que trabajan”. “Esto no es la Liga, aquí no hay puestos ni dinero”.