Castilla-La Mancha se encuentra a la cabeza de las comunidades autónomas con mayor número de viviendas para alojamiento de mayores y con mayor número de plazas de atención residencial por cada 10.000 habitantes de 65 años o más.

Así lo ha determinado el estudio "Ránking de territorios por la economía sénior 2021” que ha presentado este miércoles la Fundación Mapfre, en el que la región destaca también por ser la segunda comunidad, después de Madrid, con mayor número de ciudadanos atendidos por el servicio de teleasistencia.

El informe pone de manifiesto que no todas las regiones ofrecen las mismas condiciones y oportunidades a las personas mayores de 55 años en términos de empleo, acceso a servicios sociales y sanitarios y esperanza de vida, entre otros.

Tasa de actividad

Respecto al empleo, Castilla-La Mancha ocupa la novena posición en cuanto a la tasa de actividad de personas de 55 años o más, entendida como el porcentaje de activos de población en esta franja de edad, que en su caso es del 27,54 por ciento.

Además, el 18,60 % de los castellano-manchegos de 55 años o más tienen un trabajo por cuenta ajena o ejercen una actividad por cuenta propia, en este último caso el 27,26 por ciento de los autónomos de la región se encuentran en esta franja de edad, un total de 27.626 personas.

En cuanto al desempleo, Castilla-La Mancha es de las comunidades que presenta un mayor porcentaje de personas de 55 años o más que están en paro, con un 15,68 %.

Pensión media de jubilación

La pensión media de jubilación en la región es de 1.104,17 euros y la media de edad de jubilación son los 62 años.

Por otro lado, Castilla La-Mancha se encuentra entre las comunidades con menor esperanza de vida al nacimiento (81,2 años) y presenta la peor esperanza de vida a los 65 años, con 19,32 años.

Sobre la participación social de las personas de 55 años o más, el 21,21 % de los diputados en las Cortes regionales tienen esta edad, es la segunda comunidad con menos porcentaje de parlamentarios de esta edad.

La cifra se eleva al 27,27 % respecto a los consejeros de 55 años o más en el Gobierno autonómico, mientras que baja al 20 % en cuanto al porcentaje de alcaldes de esa edad en las primeras cinco ciudades de las comunidades