Image: La sabiduría de las brujas

Image: La sabiduría de las brujas

Poesía

La sabiduría de las brujas

John Giorno

3 julio, 2008 02:00

John Giorno. Foto: Archivo

Trad. de Martín Rdgez.-Gaona. DVD. Barcelona, 2008. 158 páginas, 20 euros.

"Que mi estómago ha aprendido del mito de Narciso / y ya silencia él solo su grito desgarrado". Mártir de la talla 36, la bella anoréxica de Elena Medel encarna la cultura del siglo XXI. Y no porque sus matemáticas consistan en contarse las costillas (que en eso consisten) o porque compre en Zara (que compra), sino porque domina el arte de manipular el conocimiento heredado. No es que ignoremos el mito de Narciso: es que entendemos su lección a nuestro gusto y conveniencia.

La sabiduría de las brujas es un libro perverso. Beatnik que los sobrevivió a todos, John Giorno (Nueva York, 1936) es el Ovidio neoyorkino de las metamorfosis postmodernas. Como ocurre con Narciso, todos conocemos a Nike, sólo que, en lugar de venerarla como diosa de la victoria, portamos orgullosos su logo como milicia que somos de Cristiano Ronaldo: "Just / do it, / just do it, / just don't / not do it, / do it" ("Simplemente di no a los valores familiares"). Giorno Derribos y Construcciones procede a la demolición del Parnaso y en su solar levanta un Gólgota: "Lo que iba en el ataúd de William Burroughs con su cuerpo muerto" parece el sueño de cualquier fetichista ("Vaqueros, los menos usados eran los únicos limpios"), pero es la pesadilla de una sociedad que subasta la basura de sus poetas en eBay. Y aquí llega Tirano Banderas (cualquiera de ellos), recreándose en su propia crapulencia: "La masacre de comunidades apartadas / es el pasatiempo de mis momentos de descanso, / la destrucción de nacionalidades / el negocio formal al que dedico mi vida. / La ilimitada vastedad del desierto de los Estados Unidos / es mi coto privado, / y entierro a mis muertos según mis convicciones". Pero el emperador sigue estando desnudo: "Soy el hombre al que llaman Muerte Súbita y también Desolación General. / Fui engendrado por un huracán, / y maldecido por un terremoto; / soy mediohermano del cólera, / y estoy estrechamente vinculado a la viruela por línea materna" ("Nada triunfa como el exceso"). Hilarante en su petulancia, este último verso derroca al dictador con la contundencia de mil ejércitos. Al Señor Matanza no nos sometemos. Del Señor Matanza nos reímos.

Con su apología de las drogas o la pornografía, Giorno corre el riesgo de ser hacinado con los demás falsos profetas de la contracultura. Sólo su brutalidad "Me dirijo a la muerte / voluntariamente / con la misma comodidad y alegría / que cuando reposo mi cabeza / en el pecho de mi amante") lo singulariza como ideólogo de la resistencia al Padre Poder: tan pronto como la revolución se estabiliza, el nuevo estándar debe ser cuestionado. Prescindimos de aquellos mitos porque hemos asistido a la caída de estos imperios. Políticamente incorrecto y poéticamente perfecto, La sabiduría de las brujas es un símbolo de estatus para las minorías rebeladas. Somos los malversadores de Narciso. Vamos hacia el caos a través de la poesía.