El escritor Ignacio Aldecoa. A la derecha, el mecanoscrito de su novela inédita 'El Gran Mercado'.

El escritor Ignacio Aldecoa. A la derecha, el mecanoscrito de su novela inédita 'El Gran Mercado'.

Letras

Descubiertas dos novelas inéditas de Ignacio Aldecoa en el año de su centenario

Los textos se han encontrado en el archivo de la censura franquista, y uno de ellos se mostrará en una exposición de la Biblioteca Nacional dedicada al escritor.

Más información: Ignacio Aldecoa y el realismo de los 50

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Las envió a la censura, fueron aprobadas pero nunca se publicaron. Tampoco fue nadie a recoger las copias enviadas. Nadie sabe por qué.

Ese es el misterio de las dos novelas inéditas de Ignacio Aldecoa (1925-1969) que han sido descubiertas por el profesor Álex Alonso Nogueira en la Sección de Censura del Archivo General de la Administración.

El hallazgo se produjo mientras este profesor titular de Literatura Hispánica en el Brooklyn College de la City University of New York se documentaba para preparar la exposición que la Biblioteca Nacional de España dedicará al escritor próximamente para conmemorar su centenario. Uno de los dos mecanoscritos encontrados se podrá ver en ella.

Aldecoa, uno de los grandes escritores de la generación del 50 —a la que también pertenecen autores como Carmen Laforet, Carmen Martín Gaite, Rafael Sánchez Ferlosio, Jaime Gil de Biedma o Ana María Matute—, envió estos dos textos a la censura para su evaluación en 1952 y 1953.

Uno de ellos es el mecanoscrito la novela corta Ciudad de tarde, con la que Aldecoa había quedado finalista del premio de novela Café Gijón en 1952.

El otro es el mecanoscrito de una extensa novela de más de trescientos folios, titulada El Gran Mercado y que, a tenor de la documentación conservada en el mismo expediente, iba a ser publicada por la editorial Planeta, informa la BNE en un comunicado.

"Esos dos textos, cuya publicación fue autorizada por la censura, y de los que no se conoce ninguna otra copia, nunca fueron recogidos del archivo, ni por el autor ni por los editores, y allí han permanecido hasta ahora".

Aunque fueron parcialmente reaprovechados y sirvieron de material para alguno de sus relatos (como “Vísperas del silencio” o “El mercado”), las novelas como tales "pueden y deben considerarse textos inéditos", afirma la nota de la Biblioteca Nacional.

Estas dos obras son anteriores a su primera novela publicada, El fulgor y la sangre (1954), que fue finalista del Premio Planeta. Entre sus novelas más importantes también figuran Con el viento solano (1956) y Gran Sol (1958), ganadora del Premio de la Crítica.

El mecanoscrito de El Gran Mercado —que, a diferencia del de Ciudad de tarde, se conserva en muy buenas condiciones— podrá verse, junto con la documentación que le acompaña en el expediente de censura, en la exposición Ignacio Aldecoa. El oficio de escribir, que se inaugurará el próximo 18 de diciembre en la BNE y podrá visitarse hasta el 14 de junio de 2026.

Para el profesor Alonso Nogueira, se trata de “dos textos relevantes en la trayectoria del autor, en los que Aldecoa demuestra una madurez de estilo y de composición que merecen ser destacadas”.

Esto sucede especialmente en El Gran Mercado, "una novela ambiciosa y coral en la que, al estilo de La colmena [de Camilo José Cela], se entrelazan diversas historias y se ofrece un recorrido detallado por múltiples escenarios de un Madrid de posguerra en el que conviven la miseria con el bienestar de unas clases medias acomodadas con ventaja a las nuevas circunstancias", explica la BNE.

Según el profesor, es también “significativa para entender la evolución de la novela española de la época, ya que se trata de un texto que abre camino al nuevo realismo objetivista y social, signo de identidad de las jóvenes promociones de escritores en la década de los años 50”.

El profesor José Ramón González, comisario de la exposición y catedrático de Literatura Española en la Universidad de Valladolid, subraya que “se trata de un descubrimiento importante y no meramente anecdótico, porque permite profundizar en la trayectoria del autor y entender mejor cuál fue su proyecto narrativo desde su arranque, ya que se trataría de sus dos primeras novelas”.

En su opinión, en la segunda de ellas, El Gran Mercado, está contenido en germen todo el programa narrativo que el autor desplegará en su narrativa breve y en sus novelas hasta el momento de su fallecimiento.

“Por ella circulan los personajes humildes y desposeídos que protagonizan muchos de sus cuentos, pero también esas clases medias inanes y egoístas que emergen de cuando en cuando en sus relatos, especialmente en los de la última época, y que el autor retrata con una ironía y una distancia en la que nunca está ausente una leve ternura un tanto burlesca”, señala.

Para la Biblioteca Nacional de España, "este descubrimiento viene a enriquecer la muestra del centenario y es un excelente ejemplo de la riqueza documental de las bibliotecas y archivos nacionales, en los que es todavía posible profundizar para el mejor conocimiento de nuestro pasado y de nuestro presente".