Image: Nuria Espert es Lear

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Escenarios

Nuria Espert es Lear

El director Lluís Pascual se atreve con El rey Lear, la gran tragedia de Shakespeare, en el Teatro Lliure y brinda el papel principal a Nuria Espert

15 enero, 2015 01:00

Nuria Espert caracterizada como el Rey Lear. Foto: Ros Ribas

El rey Lear ha comparecido sobre los escenarios del teatro español reciente en muy contadas ocasiones. Calixto Bieito, Miguel Narros y Gerardo Vera han sido los nombres destacados entre los pocos valientes que se han atrevido en los últimos años con la gran tragedia del bardo inglés. Ahora, Lluís Pascual se une a la lista con un montaje casi desnudo que otorga el papel protagonista a Nuría Espert y que se podrá disfrutar a partir de este miércoles en el espacio Montjuïc del Teatro Lliure de Barcelona. "El rey Lear es un imposible, casi una utopía", explica Pascual, actualmente director de este prestigioso espacio escénico catalán. "Es como una montaña que hay que escalar y uno sube y sube y no sabe si llegará arriba pero, en el caso de que lo haga, seguro que llegará reventado".

La obra de Shakespeare, compendio de su genio, ha mantenido a lo largo de los siglos su alcance y trascendencia. No envejece pues funciona como una representación perfecta de las miserias y la grandeza que encierra el ser humano en toda su complejidad. El rey Lear nos descubre la crueldad, el dolor, la pérdida, el vacío... "Es como esos libros sagrados que hablan por sí mismos como El Cantar de los Cantares o el Libro de Job. De esa altura poética...", explica el director de la obra. "Por eso no he querido poner mi mirada personal pero sí que hay un aspecto en el que he insistido mucho durante los ensayos: El rey Lear es una gran obra sobre el amor y sobre cómo el amor puede acarrear en un momento dado una catástrofe enorme".

Pascual ha optado en este montaje por desnudar el escenario y dejar que el peso de la obra recaiga sobre los actores y las intensas relaciones entre los personajes. En consecuencia, era esencial afinar en la elección del actor principal para alcanzar el éxito con la propuesta. Lear, ese rey hastiado y despótico que con la inflexibilidad de un péndulo transita de la cordura al delirio, requiere un gran despliegue de matices y la elección final de Nuria Espert quizás sorprenda, aunque más por el género del interprete que por las posibilidades que ofrece. "Simplemente busqué al mejor actor para el papel y resulta que era una mujer", explica el director del Teatro Lliure. "Rosa María Sarda lo dice de una manera muy graciosa: 'antes lo hacían todo los hombres y nadie preguntaba nada'. Las actrices tienen además una capacidad de dolor mayor, algo fundamental para hacer del Rey Lear".

Nuria Espert, a los 79 años, encadena un Shakespeare con otro tras La violación de Lucrecia y regresa así al catalán en compañía de actores como Teresa Lozano, Jordi Bosch, Laura Conejero, Julio Manrique o Andrea Ros. "En la obra hay personajes buenos y malos. Las hermanas son malas al igual que Edgar... Pero son malos de Shakespeare. No son nunca un esquema sino que desprenden una gran riqueza humana y una cantidad enorme de contradicciones. Tienen razones poderosas para defender el mal y Shakespeare hace que lleguemos a entenderlas", puntualiza Pascual, que tan solo se apoya en la luz para dar empaque la acción que transcurre en el escenario.

Nuria Espert en un momento del montaje. Foto: Ros Ribas

El director acaba de ser refrendado para un segundo mandato al frente del Teatro Lliure, institución que gestiona desde 2011y de la que es miembro fundador. Los números cosechados por el escenario barcelonés le avalan: un 89 % de ocupación y 103.558 espectadores convierten 2014 en el mejor año de su historia. Una realidad sorprendente teniendo en cuenta el momento de crisis que atraviesa el teatro y la cultura en general. "La personas que trabajan en el mundo del teatro han reaccionado bien a la crisis", expone Pascual. "Se nos acusa muchas veces de plañideros y de lloriquear pero esta vez creo que hemos cogido músculo y tirado hacia adelante. Además, la gente tiene la necesidad de salir y en momentos de trauma social la cultura es de gran ayuda". Sin embargo, el Premio Nacional de Teatro de 1984 insiste en la necesidad de "acabar con el 21 % de IVA".

Por último, Lluís Pascual se muestra cauto con la posibilidad de que la obra que presentan puede viajar a otros escenarios. "Los espectáculos tienen vida propia. Primero hay que estrenar y comprobar como responde el público. Además es una compañía difícil de mover con 25 personas... Esperemos que crezca y se pueda ver en muchos sitios", finaliza.