Escenarios

Fernanda Orazi

"Lo difícil es dar con directores singulares"

1 junio, 2012 02:00

La actriz argentina afincada en Madrid desde hace seis años protagoniza con Barbara Lennie Las criadas y dirige El rumor analógico de las cosas. Las dos en Cuarta Pared de Madrid.

Fernanda Orazi es una talentosa intérprete de la última escudería teatral argentina que aterrizó en Madrid hace más de un lustro (Claudio Tolcachir, Lautaro Perotti, Maria Weiner...). Ella vino con la compañía de Ciro Zorzoli, La Fronda, y se quedó. Echa de menos a algunos amigos suyos, pero no tiene idealizada la extraordinaria actividad teatral de la que presume Buenos Aires: "Todo el mundo está haciendo muchas cosas en BA, pero también hay necesidad de que triunfen, por lo que también hay mucho de fórmulas repetidas. Para mí fue muy bueno salir de allá y encontrarme en un nuevo contexto, es una suerte poder hacerlo", comenta con su acentazo porteño.

A Orazi se la siente tenaz, amante de su trabajo y parece que la fortuna le sonríe. Ha conseguido hacerse un hueco en el difícil mundo del teatro madrileño. En sus colaboraciones con el autor y director Pablo Messiez, compatriota suyo también afincado en Madrid, es donde ha dado muestras de sus aptitudes. Ha protagonizado Muda, Ahora y Los ojos, las tres obras escritas y dirigidas por Messiez y previas a Las criadas, producción que acaba de estrenar en Cuarta Pared, dentro del Festival de Otoño de Madrid. En ella comparte escenario con Barbara Lennie, otra actriz de carrera imparable. Ambas dan vida a las taradas hermanas Clara y Solange, lo que es todo un desafío interpretativo.

Orazi es de esa raza de actrices para las que el escenario es un laboratorio donde investigar la vida: "El teatro es un lugar para pensar todo el tiempo. No tiene una técnica definida, creo que es la más indefinida de las artes. Y es un acto colectivo y voluntario. En realidad, nadie necesita el teatro, pero algunos decidimos juntarnos para hacerlo". Ella imparte talleres de entrenamiento para actores en El Local de Madrid (c/ Pinillas del Valle, 1), espacio que le permite investigar y encontrarse con almas gemelas dispuestas a formularse cuestiones como "¿Qué estamos haciendo cuando hacemos teatro?" En El rumor analógico de las cosas, obra que ha dirigido y que también estrena en esta misma sala y en esta misma semana (día 7), intenta responder a la pregunta. Interpretada por once actores, es una pieza metateatral en la que trata de dinamitar los lugares comunes a los que un intérprete suele enfrentarse a diario en la sala de ensayo. "Aborda el tema del teatro entendido como lugar donde volver a jugar con los sentidos y las palabras. Indagamos sobre los significados convencionales de las palabras y sus usos para darles la vuelta".

A pesar de la deriva de los tiempos, la actriz se muestra optimista: "Creo que en Madrid hay ahora muchas y grandes inquietudes. Quizá lo más difícil sea encontrar directores con una búsqueda singular, pero se van a generar nuevas cosas porque los modos de producción en el teatro están cambiando".