De derecha a Izquierda, Rodrigo Díaz, Izan Fernández y Rodrigo Gibaja

De derecha a Izquierda, Rodrigo Díaz, Izan Fernández y Rodrigo Gibaja

Cine

'Voy a pasármelo mejor': Los Pitus se van de campamento

Regresan los protagonistas de 'Voy a pasármelo bien', aunque en esta nueva entrega desaparecen las canciones de Hombres G. La propuesta sigue funcionando por el encanto de los personajes.

Más información: Vida y milagros de Superman, un mito volátil: así ha cambiado el héroe con el paso del tiempo

Publicada

Voy a pasármelo bien (2022) fue una grata sorpresa. Aunque parecía un mero producto para explotar las canciones de Hombres G, el filme acabó erigiéndose como un sensible y simpático relato de iniciación protagonizado por unos niños que se asoman a la adolescencia en los años 80 en Valladolid.

Varios eran sus aciertos, desde un reparto infantil muy divertido –en especial, ese robaescenas que es Rodrigo Gibaja– a una construcción de época que se empapaba de fenómenos como Yo fui a EGB para recuperar desde marcas míticas de gominolas a expresiones del tipo ‘ciao, pescao’ o ‘me las piro, vampiro’.

Los números musicales, funcionales, al menos no estorbaban. No en vano, tras la cámara se encontraba David Serrano, uno de los creadores españoles más vinculados al género, ya que debutó como guionista en El otro lado de la cama (Emilio Martínez Lázaro, 1975) y después escribió para las tablas Hoy no me puedo levantar, a partir de los hits de Mecano, o Más de cien mentiras, con las canciones de Joaquín Sabina. Además, ha adaptado al español o dirigido clásicos como Billy Elliot o Mamma Mia.

En Voy a pasármelo mejor, David Serrano se mantiene como guionista, compartiendo como en la primera entrega la labor con Luz Cipriota, pero cede la dirección a la jovencísima Ana de Alva (Málaga, 2001), formada en danza, interpretación, música… A pesar de su corta edad, la película se adapta perfectamente a los estándares del cine de entretenimiento español a nivel de dirección.

En cualquier caso, este nuevo filme afianza la vitola de proyecto personal de Serrano, que ya se inspiró en sus propias vivencias para la primera entrega, ya que la excusa primigenia, la de elaborar un musical con las canciones de Hombres G, aquí desaparece. No hay ni una canción de la banda de David Summers.

Se han elaborado nuevos temas para las (escasas) escenas en las que los protagonistas cantan y bailan, mientras que suenan en varios momentos canciones de Nacha Pop, Miguel Bosé, Duncan Dhu, Seguridad Social o Chimo Bayo. De hecho, aparece un nuevo e hilarante personaje que adopta la estética de un bakala valenciano.

En cualquier caso, los que sí repiten son los miembros de Los Pitus, David (Izan Fernández), Luis (Rodrigo Gibaja), Paco (Rodrigo Díaz) y Fernando ‘El Cabra’ (Michel Herráiz), que viajan a un campamento veraniego de inglés (el humor con la sangrante ineptitud del español medio para ese idioma es bastante divertido).

Una imagen de la película

Una imagen de la película

Allí, diseñarán un disparatado plan para que David vaya a México a visitar a Layla (Renata Hermida), con la que tiene un noviazgo a distancia desde el final del anterior filme. Mientras tanto, cada uno de ellos tendrá que lidiar con nuevos enamoramientos y con realidades complicadas, como la dificultad de salir del armario en el caso de Paco o la maternidad inesperada en el caso de Luis.

La propuesta, aún con algún desmayo narrativo y gags no del todo pulidos, sigue funcionando por el encanto que desprenden los personajes y por la refrescante blancura de un humor que nos retrotrae a un tiempo feliz, que quizá no lo fue tanto.

Voy a pasármelo mejor

Dirección: Ana de Alva.

Guion: David Serrano, Luz Cipriota.

Intérpretes: Izan Fernández, Rodrigo Gibaja, Rodrigo Díaz, Michel Herráiz, Renata Hermida, Raúl Arévalo, Alba Planas.

Año: 2025.

Estreno: 18 de julio