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Homo Ludens por Borja Vaz

'Etherborn', gravedad metafísica

La figura translúcida que manejamos en el videojuego de Altered Matter se mueve por escenarios inspirados en Escher

29 agosto, 2019 09:04

Cuando se anunciaron las ayudas del Ministerio de Cultura para fomentar la producción de videojuegos patrios en la presentación del último Libro Blanco del Desarrollo Español, hubo una serie de dudas sobre las características de los juegos que podrían optar a las mismas. Precisamente el juego del estudio barcelonés Altered Matter podría funcionar como un modelo en el que las posibles candidaturas podrían medir su idoneidad. En un juego sencillo, que basa toda su jugabilidad en una sola mecánica (la gravedad), pero que la reviste de un cuidado apartado artístico y una dirección narrativa que busca reflexionar sobre aspectos relativos a la existencia, la individualidad de la persona y la conciencia.

La figura translúcida que manejamos en Etherborn se mueve por escenarios que parecen inspirados por las litografías de Maurits Cornelis Escher, con sus perspectivas contradictorias y sus trampantojos geométricos. La principal regla que encauza la navegación por estos escenarios surrealistas es la gravedad, pero a diferencia del mundo real, en Etherborn la gravedad cambia de dirección cada vez que atravesamos una superficie curva. Los ángulos rectos son lo que limitan la exploración, y saber utilizar los diferentes cambios de gravedad en nuestro beneficio, recolectando unos orbes brillantes y ampliando el mapa, es lo que forma el núcleo de la experiencia a través de los cinco niveles que ofrece el juego.

En ocasiones los puzles se pueden asemejar a un cubo de Rubrik, en el sentido de que la visión espacial y la capacidad para mantener en la memoria los modelos tridimensionales en todo momento resulta fundamental, pero con la dificultad añadida de unos controles no siempre precisos y una cámara que no se puede manipular y que no siempre colabora a la hora de ofrecer una visión pertinente del problema.

Etherborn no exige movimientos complicados, tan solo unos cuantos saltos de vez en cuando, pero la dificultad de medir bien las distancias (la cámara está posicionada muy lejos de la acción) suele llevar a muchas muerte inoportunas. Por suerte, el juego apenas requiere un segundo para volver a ponernos en situación de intentarlo de nuevo, lo que lima mucha de la frustración que puede llegar a generar. A pesar de todo, la manera que tiene el juego de ocultar recovecos y posibles rutas con sus perspectivas forzadas es la principal fuente de dificultad. Si bien en ocasiones hace un buen trabajo de orientación con el uso de colores primarios, en otras enturbia la solución como una forma de alargar artificialmente una duración que, a todos los efectos, es bastante limitada. Como los conceptos jugables (la gravedad, los orbes luminosos que hay que recolectar para modificar el escenario) nunca evolucionan, el juego termina en el momento justo, antes de llegar al punto de saturación. Pero resulta evidente que se podría haber profundizado con más puzles que involucraran nuevas mecánicas y lo complicaran todo para ofrecer desafíos más elaborados y estimulantes.

Etherborn | Official Trailer | Gravity-Shifting 3D Platformer | PC, Switch, PS4, XB1

Etherborn es un nuevo ejemplo del gran momento que está viviendo la escena independiente del videojuego español. A pesar de las dificultades, los equipos están consiguiendo sacar adelante proyectos que combinan un acabado técnico profesional con una clara visión creativa. Fuera de nuestras fronteras los videojuegos españoles se están haciendo un nombre rápidamente, y es el momento de capitalizar toda esta efervescencia con un apoyo decidido, no solo de las instituciones públicas, que en el fondo su labor debería limitarse a unos pocos títulos, sino de las entidades privadas, que sean capaces de valorar el potencial de esta industria cultural.

@borjavserrano

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